Mientras esperaba a que comenzara el concierto, no podía dejar de pensar que iba a ser uno bueno, pero a la misma vez uno que no amaría. Claro, es una banda que me gusta y la quería ver, pero pensaba que no me iba a dejar una impresión muy fuerte. Pero esta impresión dejó de ser la misma una vez que las luces del Coliseo José Miguel Agrelot (“Choliseo”) bajaron, salieron al escenario Brandon Flowers, Dave Keuning, Mark Stoermer y Ronnie Vannucci jr., y se comenzaron a escuchar los acordes iniciales de la canción “Human”. En ese momento me percaté de que no sólo me gustan, sino que soy fanático de The Killers.
Tengo que mencionar también que otra de las cosas que influyó en mi cambio de ánimo, fue la excelente banda puertorriqueña Polbo. Claro, el sonido no era tan bueno como cuando comenzó la atracción principal (para esta hay mucho más cuidado con el sonido que para la banda local, como suele pasar), pero eso no causó que Polbo perdiera su ritmo. La banda local dio un set de sus mejores y más reconocidas canciones, incluyendo canciones del nuevo disco. Tocaron “Yo Era Tan Cool” de su primer disco y su más reciente canción “Negra”, ambas tocadas con gran entusiasmo, esta intervención fue corta, por lo que me quedé con las ganas de seguir escuchando sus canciones. Polbo fue escogida por los mismos “killers” luego de haber sido elegidos como finalistas en el concurso de “Coors Light The Killers Experience”, en el cual varias personas votaban por la banda que ellos querían que abrieran el concierto. La decisión no pudo haber sido mejor. Polbo es una banda muy divertida musicalmente, y los integrantes son personas que saben lo que hacen y saben cómo calentar un público, además de que su lírica es genial. Es una de las mejores bandas de Puerto Rico ahora mismo y es refrescante poder escuchar una banda local buena y nueva al lado de otra banda grande del momento. En el futuro espero verlos en un concierto exclusivo de ellos, donde otra banda local le abra. Con todo esto dicho, tengo que recalcar que la experiencia de escuchar una banda del presente, reconocida mundialmente y que forma parte de nuestra generación es una experiencia única para cualquier amante de la música. Poder ver y escuchar en vivo una banda de “Rock” que no fue fundada en los 70’s u 80’s y que se espera con ansia su próximo “hit” en la radio es algo que no se debe de perder si uno es “fan” de verdad. Y es aún más refrescante saber que The Killers puede tocar en vivo y que puede hacer un “show” espectacular. Al fin y al cabo, los muchachos de “The Killers” son “showmen”, teatreros, y saben que su imagen y su concepción como estrellas son bien importantes para la gente. Por esto no resulta extraño que el concierto estuviese repleto de explosiones, confeti y todo cambio de luz y atmósfera imaginable. Por momentos, parecían sonar mejor que en sus propios discos. Su espectáculo es uno de gran intensidad y es la unión de ellos la que permite tal nivel de grandiosidad, por lo cual son tan reconocidos. La gente claramente sintió esta potencia, ya que todos gritaron y cantaron con la banda en cada una de las canciones. Era obvio que la llegada de esta banda era algo que se estaba esperando desde hace mucho tiempo. El set incluyó canciones de cada uno de los discos. Comenzaron con “Human” del más reciente disco “Day & Age”, la cual sonó mucho mejor que la versión de estudio. El escenario estaba diseñado según su más reciente “motif” de “Day & Age”, con palmas en el escenario y un piano que brillaba donde Flowers se sentó dos veces para tocar “Sam’s Town” y una versión más lenta de “Human”. Era obvio que no podían salir del Coliseo sin tocar las canciones de su disco más amado: “Hot Fuss”. De este tocaron “Somebody Told Me” (su clásico), “Mr. Brightside”, “Smile Like You Mean It”, “Jenny Was A Friend Of Mine” y “All These Things That I’ve Done”. Estas fueron las más que disfrutó la gente. Contribuyeron hasta con una canción de su disco de b-sides y rarezas “Sawdust”; esta fue la canción “Shadowplay”: un “cover” de la canción clásica de “Joy Division” hecha exclusivamente para el filme de Anton Corbijn “Control”, sobre la vida de Ian Curtis, cantante de esa banda. Para enfatizar la espectacularidad del momento, quisiera hablar en detalle de la interpretación de esta canción. Primero las luces cambiaron a verde y negro, colores del disco “Substance” de “Joy Division”. Detrás de la banda, en las pantallas verticales gigantescas, comenzaron a pasar imágenes de Curtis y del filme, convirtiendo el momento en un instante sublime. Fue todo un set muy elaborado y detallista, y cuando al final del concierto, mientras tocaban “When You Were Young” (del disco “Sam’s Town”), comenzaron a caer chispas encima de la banda, ya se sabía que “The Killers” hizo lo mejor posible por asegurar que este concierto fuese uno para no olvidar. Sólo se puede esperar que con este excepcional concierto, José Dueño y Larry Stein tomen nota de las otras bandas contemporáneas de Estados Unidos y Europa que la gente de Puerto Rico quiere ver. Grupos como “Radiohead”, “Coldplay”, “Kings of Leon”, “Foo Fighters”, “The White Stripes”, “Interpol”, entre muchas otras. Si estas bandas tocan igual de impresionante que “The Killers”, pues les aseguro que la gente no lo pensará dos veces para comprar la taquilla. Por el momento sólo podemos cruzar los dedos para que los productores cojan ideas, pero al menos The Killers ha saciado nuestra sed y nos han dejado más que satisfechos mientras esperamos.