Desde su aparición, a principios de los ochenta, la epidemia del Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH) ha sido la causa de más de 25 millones de muertes, tres millones de ellas en el último año. Ante esta alarmante cifra, durante el 1 de diciembre se conmemora el Día Mundial contra este virus y su peligrosa evolución, el Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA). Contrario a años anteriores, el 2009 ha traído consigo algunas buenas nuevas que arrojan esperanza. ONUSIDA, el programa conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/SIDA con sede en Ginebra, Suiza, informó que las infecciones por VIH se redujeron en un 17 por ciento en el mundo durante los últimos ocho años. Sin embargo, la cantidad de personas portadoras del virus aumentó a 40.3 millones. En 2005 cerca de cinco millones contrajeron la infección, 700 mil fueron menores de 15 años. Pero, a pesar del alza, el número de muertes descendió a un 10 por ciento menos que en los pasados cinco años. Con la ocasión, el Secretario General de Naciones Unidas, Ban Ki- moon, en su mensaje afirmó que “hemos de poner fin al estigma y a la discriminación que aún impiden a mucha gente saber cómo prevenir el VIH y obtener tratamiento”. Este estigma y discrimen que carga padecer el virus “se traducen en violaciones de derechos humanos”, según el círculo vicioso descrito por ONUSIDA. Por esto, el Programa decidió construir una estrategia de comunicación contra el prejuicio que empiece a partir de la conmemoración de este día, y que se espera continúe, por lo menos, durante un año. Se debe “luchar contra el VIH y no contra las personas que viven con VIH”, expresó la Organización. Todos tenemos derecho a ser tratados con igualdad, pese a las diferencias de sexo, género y orientación sexual. Hay que poder compartir los espacios y a convivir con los individuos que viven con VIH sin menosprecio, así se sostiene en el portal electrónico de ONUSIDA. De esta forma, Colombia es uno de los países líder en la iniciativa de inclusión que se basa en la solidaridad para “poder aprender a abrazar a los demás sin miedos”. Esta visión busca respetar a las personas que sufren la condición. Propagación global En América Latina y el Caribe la epidemia ha sido ampliamente diversa desde sus inicios. En los países del Caribe se ha propagado por contacto heterosexual mientras que en la mayoría de los países latinoamericanos, la epidemia se considera aún de tipo “concentrada” y afecta mayoritariamente a grupos específicos de población: hombres que tienen sexo con hombres, usuarios de drogas intravenosas y población vinculada al comercio sexual. Sudáfrica, la nación registrada con la tasa más alta de personas infectadas, informó que tratarán a más pacientes de la pandemia y aumentarán el número de pruebas, pues actualmente, el continente africano tiene alrededor de seis millones de contagiados. Entre tanto, en China las autoridades manifestaron que cada vez se reportan más casos entre la población homosexual de ese país, pero el Gobierno exigió públicamente, no discriminar contra este grupo. Iniciativas En la capital estadounidense, Washington DC, anunciaron los futuros planes para realizar la Conferencia Internacional del SIDA en 2012. Y Corea del Sur firmó una petición ante la Organización Protectora de los Derechos Humanos surcoreana con el propósito de anular las pruebas de SIDA obligatorias para algunos trabajadores extranjeros. Un dato curioso, en este Día Mundial, es que la red social Twitter cambió por primera vez su habitual azul por el rojo, color emblemático para la lucha contra este mal; cuyo primer enfermo en el mundo fue registrado en 1959. Según se cree era un hombre perteneciente a una tribu africana, como lo indica un estudio presentado en el V Congreso Nacional del SIDA en Chicago, Estados Unidos, publicado en la revista Nature en 1998. En esta nota colaboró Christian Ibarra.