El joven camina por el mismo centro de la Plaza de Armas en el Viejo San Juan. El vaivén de sus piernas nos recuerda la suavidad y eficacia del patinaje sobre hielo. Parece que lleva algodones en sus oídos, pero no, son audífonos. Éstos distinguen la autenticidad de su aparato inteligente. Mete la mano en su bolsillo, y en movimientos coordinados, casi ensayados, logra sacar su smartphone y caer sentado en un solo tiempo. Click… Ya está conectado. Buscaba un poco de señal Wi-Fi para conectarse a Internet y recargar un poco las baterías de su aparato electrónico. Entra a nytimes.com, luego a endi.com, chequea sus emails y después abre Pandora Radio(radio de alta definición por Internet). Los algodones no son sólo de adorno. “Tenemos que adaptarnos a él (Internet), es parte del futuro. No creo que vamos ni a cambiarlo, ni tenemos la fuerza para cambiar algo así. Tenemos que adaptarnos y ser un poco más inteligentes al respecto”, responde Eduardo González, quitándose los audífonos de los oídos, al preguntarle acerca de su visión respecto al futuro de estas nuevas tecnologías de la información. Como bien reconoce el teórico de la comunicación Alfonso Vázquez Atochero, Internet es el futuro y el futuro no se concibe sin Internet. Los nativos digitales, aquellos que nacieron y crecieron con las nuevas tecnologías de comunicación, viven inmersos en una realidad donde no sólo es posible compartir fotos y videos como nuevas formas de entretenimiento, sino más importante aún, es posible generar un desarrollo exponencial del conocimiento y proponer un modelo donde se dan unas tramas de comunicación más participativas. El fenómeno de la web 2.0 es potencialmente comparable con lo que sucedió a raíz de la invención de la imprenta en el siglo XV, según algunos estudiosos del tema. CIBERNAUTAS DE PLAZAS Y CAFÉS Un paseo por alguna de las plazas del Viejo San Juan, por cibercafés o por ciertos restaurantes que ofrecen el servicio Wi-Fi gratuito nos puede llevar al encuentro de estos chicos, los llamados “nuevos públicos”, consumidores de medios –siempre y cuando sean gratuitos-, bienes y entretenimiento socializados en la cultura digital. Según un estudio reciente realizado en Inglaterra y auspiciado por la firma Morgan Stanley, son personas que apenas buscan información periodística; que no escuchan la radio, sino música –jamás han comprado un CD-, y que ven televisión a la carta (a través de YouTube). Además, casi todos forman parte de la red social Facebook, a veces utilizan su ordenador como teléfono y el celular casi queda relegado a los mensajes de textos. En términos generales los jóvenes puertorriqueños que interactúan en San Juan y en otros lugares con señal inalámbrica coinciden en algunas prácticas: miran Facebook, My Space o alguna otra red social, leen sus correos electrónicos y buscan información de interés personal, profesional o académico, pero a diferencia de los participantes de la investigación inglesa sí buscan información en los periódicos en línea. Otros intercambian mensajes y fotos a través de las redes sociales, sin embargo, no utilizan la computadora más allá de ese tipo de comunicación. Si se conversa con alguno de estos cibernautas criollos, ninguno menciona las ventajas de la inteligencia colectiva, la posibilidad de utilizar el Internet como fuente principal de ingresos o el camino hacia la “sociedad de la información y el conocimiento” del que tanto se habla en los textos académicos. Para Angelie Berríos, por ejemplo, una joven que se encontraba compartiendo con sus amigos en un cibercafé del Viejo San Juan, mientras chateaba por Messenger y My Space a través de una computadora portátil, el Internet es simplemente un instrumento de consumo. “En cualquier información que necesite, es más fácil que buscarla en un libro o algo, que ir para la biblioteca”. responde al preguntársele sobre los beneficios que para ella ofrece esta tecnología. Aunque aparentemente la visión de estos jóvenes está más orientada al consumo que a la producción (generar contenidos, independientemente de sus fines), cuando observamos sus perfiles en las redes sociales, encontramos construcciones identitarias complejas y producción de contenidos (fotos, vídeos, notes,etc.) que manifiestan, de manera performativa, esas complejas construcciones identitarias. En este sentido se da un nivel de producción, pero claramente no hay una consciencia del potencial del medio fuera del entorno de la red social, o al menos, este no parece ser el foco de los jóvenes en términos generales. DEL “MATARILE-RILE-RON” A LAS REDES SOCIALES De ambos a dos, matarile rile rile a MySpace. De mambrú se fue a la guerra a Facebook. De 1,2,3… ¡pescao! a Twitter. Es evidente que con la llegada de Internet poco a poco se han ido transformado el espacio, el tiempo y las formas de comunicarse en la sociedad puertorriqueña. Es poco común oír entre los jóvenes de hoy, los nuevos públicos, hablar de los juegos tradicionales o de ir a socializar a los parques recreativos. Más bien se habla de quién tiene un perfil en Facebook, en MySpace, en Twitter o quién tiene un blog. Podemos ver que se han modificado el pensamiento y el contacto, las formas de comunicarse y de socializar han pasado de una análoga a una en bytes. En esta nueva lógica de contacto y de socialización, Internet y las redes sociales son el epicentro y desde donde trabajan los nuevos públicos. Como bien dice Vázquez Atochero “el nuevo reto es comprender cómo ahora los grupos se forman en un nuevo escenario (…) cuáles son sus intereses y qué es lo que la propia red ofrece”. Respecto a lo que ofrece o cuáles son los beneficios que tienen las redes sociales, el joven Jemel Matías, nos comenta que es “la rapidez, la accesibilidad, la agilidad [con la] que tu entras a la red y en segundos ves lo que está ocurriendo, en vivo, al otro lado del mundo. [Es] el súper medio de comunicación diría yo”, esto mientras disfrutaba en un cibercafé en el Viejo San Juan. De hecho, los escenarios ciberespaciales más visitados por la sociedad puertorriqueña, según las estadísticas ofrecidas por Alexa.com son: facebook.com, google.com.pr, youtube.com, yahoo.com, myspace.com, live.com, google.com, msn.com, ebay.com y elnuevodia.com. Según el economista social Manuel Lobato Vico, director del portal tendenciaspr.com y profesor de Ciencias Sociales del Recinto de Río Piedras de la Universidad de Puerto Rico, estos nuevos públicos tienen un papel “fundamental” en las redes sociales ya que son quienes dan vida al software. Sin ellos, explica, estarían vacíos y perderían su “magia”. En términos de las prácticas de consumo Lobato no pudo precisar cómo es la dinámica debido a que en Puerto Rico no se ha realizado una investigación que atienda ese aspecto. Por otro lado, señaló que los nativos digitales “tienen el perfil exacto del consumidor de contenidos”: generan los contenidos y los consumen. “Las redes sociales tienen al creador perfecto, al mismo consumidor”, comenta Lobato. Añade que esas prácticas comunicativas constituyen una acción colectiva muy particular. Por otro lado, Eliseo Colón Zayas, director de la Escuela de Comunicación de la Universidad de Puerto Rico, opina que las dinámicas en las redes sociales en Puerto Rico son muy “simplonas”. “Las redes sociales de aquí son simplemente para intercambio melodramático, del chisme, del cuento, del enjuiciamiento, etcétera. En términos generales no hay unas propuestas de inteligencia colectiva”. Estos usos “simplones” del manejo de las redes sociales, Colón Zayas los adjudica a que no se tienen unos conocimientos de construcción textual. Y esto lo demuestra el tipo de aplicación y el portal que los jóvenes utilizan, con el desplazamiento que hubo de myspace a facebook, este indicativo le demuestra al Director de la Escuela de Comunicación que tampoco existe el interés de generar nuevas propuestas estéticas de contenidos dinámicos porque de ser así utilizarían myspace y no facebook. LOS NUEVOS PÚBLICOS EN EL CIBERESPACIO Se ha podido observar que la participación de los nuevos públicos o los nativos digitales en Internet y las redes sociales, ha sido enmarcada bajo las categorías de acción colectiva e inteligencia colectiva. Pero ¿a que se refieren estas categorías? El profesor Lobato Vico utiliza la primera categoría para explicar dos acontecimientos que se están manifestando en Internet. En primer lugar, una acción colectiva que utilizó la herramienta “wiki” (sitio web editado por voluntarios múltiples). En segundo lugar, utiliza la acción colectiva con la idea de explicar, que aunque se trabaje de manera individual “hay una acción colectiva por parte de la gente, porque su acción individual contribuye a crear un producto colectivo”. Como ejemplo de esto último mencionó la creación de un Blog, que es completamente individual y personal pero al fin y al cabo ese blog forma parte de la blogosfera. En Puerto Rico esta categoría de “acción colectiva” se puede ver, por ejemplo, en el portal de imágenes flickr.com donde existen aproximadamente unos cinco grupos: Mi Viejo San Juan, Puerto Rico Sun, Flickr Puerto Rico, Go to Puerto Rico y Puerto Rico: Off the Beaten Path. Respecto a la inteligencia colectiva, Colón Zayas explica que es un término desarrollado por el comunicólogo Pierre Lévy. Según éste, “la inteligencia colectiva permite pasar de un modelo cartesiano de pensamiento basado en la idea singular del cogito (yo pienso), para un colectivo o plural cogitamus (nosotros pensamos)”. Comentó además que en Puerto Rico la inteligencia colectiva podría verse en “ciertas culturas juveniles de universitarios o escolarizadas en ciertas destrezas técnicas que permitan apropiarse de algunos textos y usar mediante parodia e ironía ciertas trasformaciones a un texto”. Como ejemplo de estas propuestas de inteligencia colectiva utilizó la relación que se ha dado de los VJ’s y los DJ’s en Estados Unidos, donde se integra una canción con imágenes de una película y se produce un texto nuevo. La guerrilla http://laguerrilla.tumblr.com/ y http://revistalatitudes.wordpress.com/ son ejemplos puertorriqueños de este fenómeno. BRECHA DIGITAL La brecha digital, entendida como la falta de acceso a Internet o el uso inadecuado de las nuevas tecnologías, también supone un tema de debate en nuestro país. Lobato Vico cree que aquí más bien hay una “diferencia entre quien deliberadamente no quiere utilizar Internet y las generaciones que viven volcadas en el uso de Internet”. Este entrevistado opina que, por el contrario, el Internet ha servido para eliminar brechas. “Internet ha servido para que la gente que estudia en Yauco tenga el mismo acceso a la información que tiene un estudiante en Miramar”, afirmó. Por su parte, Colón Zayas ve la brecha digital en términos “no de hardware sino de software”. Es decir, que el hecho de que las personas tengan una computadora no implica que tengan el conocimiento que requiere una “cultura digital o la digitalización de la cultura”. Dice que aquí esa brecha digital es perceptible en el “analfabetización funcional” con respecto al mundo digital. PUERTO RICO Y SUS IDENTIDADES EN EL CIBERESPACIO A principios del siglo 21, ha ocurrido un crecimiento vertiginoso de las redes sociales cibernéticas (myspace.com-2003, flickr.com 2004, facebook.com-2004 y youtube.com 2005, entre otros, son ejemplos de lo anterior). El sociólogo Manuel Castells explica en el libro La sociedad red el concepto de identidad como “el proceso mediante el cual un actor social se reconoce a sí mismo y construye el significado en virtud sobre todo de un atributo o conjunto de atributos culturales determinados, con la exclusión de una referencia más amplia a otras estructuras sociales. En las páginas electrónicas mencionadas anteriormente se desarrolla un interesante fenómeno de proyección identitaria que permite observar las construcciones sociales que los individuos crean en torno a diversos temas de interés. Puerto Rico no es la excepción: son miles los usuarios que mediante la creación y la participación en grupos dentro de estas páginas, reivindican rasgos e informaciones que los distinguen como “puertorriqueños”. EL EFECTO BORICUAZO EN FACEBOOK La red social Facebook es la página web con mayor cantidad de usuarios en la isla, de acuerdo a la página digital alexa.com. Tras una exploración utilizando el concepto “Puerto Rico” nos encontramos con cientos de grupos que dan prueba del proceso identitario que explicamos anteriormente. Algunos ejemplos de estos grupos identitarios en Facebook son: “Así crecí en Puerto Rico!! Soy Boricua y Que!!!!” (23,169 fanáticos), grupo que relata las vivencias de la infancia compartidas por puertorriqueños nacidos en los años 1960 hasta principios de 1980; “Orgulloso de ser puertorriqueño” (10,291 fanáticos), que invita a puertorriqueños que en la actualidad viven en el exterior a dejar saludos en la página; “Puerto Rico the best place in the world” (13,067 fanáticos); y, “Turistas de Nuestra Propia Tierra, Puerto Rico” (5,481 fanáticos), en donde los seguidores añaden, envían o rotulan fotos de lugares en Puerto Rico que han visitado y gustarían que otros conocieran; y Welcome to Puerto Rico – You Need a Vacation (1,377 fanáticos), en donde varios puertorriqueños invitan a personas que nunca han estado en la Isla a que disfruten de las mejores vacaciones de su vida aquí. Estos grupos muestran una imagen positiva de lo puertorriqueño y reivindican su identidad con altas dosis de emotividad o nostalgia (por parte de los que residen fuera de la Isla). Por otro lado, este fenómeno identitario también es perceptible en Flickr.com, un sitio web que permite almacenar, ordenar, buscar y compartir fotografías en línea. Los cibernautas jóvenes y los investigadores académicos entrevistados coinciden en lo evidente: Internet es el futuro. No obstante, también es evidente que uno de los principales retos que tendrán los puertorriqueños en su viaje a la sociedad de la información y el conocimiento será aprovechar al máximo las posibilidades que brindan las nuevas tecnologías y el ciberespacio. Conformarnos con utilizar esta herramienta sólo para divertirnos denota otra “brecha digital” que impedirá el desarrollo de una genuina inteligencia colectiva en la red. La alfabetización digital de los ciudadanos de todas las edades será un elemento fundamental para lograrlo, según Norenid Feliciano, una joven periodista, gestora de contenidos multimediáticos y estudiosa de estos temas. “Es necesario revisar las políticas públicas del Departamento de Educación y de otras entidades del Gobierno para superar la brecha digital que a mi juicio todavía existe aquí”, aseguró. Feliciano estima que la clave está en la formación efectiva de los estudiantes, de modo que el ciberespacio y lo digital sean algo más que un vehículo de entretenimiento y se conviertan en vehículo para el desarrollo de una sociedad más justa e igualitaria. Los autores son alumnos del curso graduado Horizontes de Información: Hiperperiodismo, que ofrece el profesor Mario E. Roche en la Escuela de Comunicación de la UPR.