En momentos en que el suicidio del juez superior José J. Ramírez Lluch ha estremecido al País, cifras de la Comisión para la Prevención del Suicidio del Departamento de Salud reportan que el 86 por ciento de las muertes por suicidio en la Isla, se le atribuyen a varones de 45 a 59 años.
A pesar de que la Comisión no cuenta con un sistema de vigilancia para conocer las razones del suicidio en Puerto Rico, la directora de la Comisión, Alicia Menéndez, señaló que la gran cantidad de suicidios en ese sector se debe a que “los hombres tienden a no hablar de sus problemas personales”.
“Los hombres tienden a no hablar de las cosas que les pasan. No buscan ayuda. Por que en los hombres esto se ve como debilidad. Tienen que aprender que es de hombres también hablar de su vida y de sus penas”, advirtió la funcionaria sobre los factores sociales que inciden en que la población masculina sea más vulnerable al suicidio.
Durante los últimos 15 años, el suicidio en Puerto Rico se ha mantenido en un promedio anual de 313 muertes. Sin embargo, para este año 2015, se registró un alza en la mortalidad por suicidio en personas de 80 a 84 años de edad.
Ante las cifras contantes de suicidio, se le preguntó a Menéndez si existe una problemática real en la Isla sobre las muertes por suicidio. A la pregunta, la doctora señaló que a pesar de que no nos encontramos entre los países con mayor tasa de suicidio en el mundo, los números reflejan una alta incidencia de este tipo de muertes en comparación con otros países latinoamericanos.
Menéndez destacó que aunque el suicidio es un tema que toca muy de cerca a muchas personas, también ha sido un asunto muy estereotipado en la Isla.
“No es un tema que le gusta trabajar a nadie. Yo llevo dos años como directora y es muy difícil. Todo el mundo se sensibiliza con este tema, pero hay mucho rechazo también. Muchos estigmas. Inclusive, yo he ido a actividades para hablar de suicidio y me dicen que quiete la palabra suicidio. Hay que hacer mucha labor de educación a la comunidad”, lamentó la doctora.
La ley de prevención del suicidio y la Comisión
Aunque muy pocos la conozcan, la ley para la implantación de la política pública en prevención del suicidio (Ley 227) se estableció en Puerto Rico para el año1999. Esta ley se implementó para atender el comportamiento suicida en el país y crear lo que actualmente se conoce como la Comisión para la Prevención del Suicidio.
Una vez la Comisión establecida, el organismo comenzó a encargase de implementar políticas públicas y desarrolló adiestramientos sobre la prevención del suicidio a profesionales de la salud y empleados públicos.
Para el mes de junio de este año, la Comisión lanzó un protocolo uniforme de prevención primaria del suicidio en Puerto Rico. Según la doctora, este informe ayuda a desarrollar la capacidad de poder manejar situaciones difíciles en los puertorriqueños.
A pesar del trabajo que lleva a cabo la Comisión y de la existencia de una política pública de prevención al suicidio, Menéndez aseguró que existe una necesidad de implementar sistemas de vigilancia que ayuden a entender más a fondo el suicidio en la Isla.
“Es necesario que se investigue sobre el suicidio. Y que se asuma al suicidio como un problema serio del País. Si queremos poner esas cifras en lo más bajo, todo el mundo tiene que asumirlo como algo importante”, señaló la funcionaria.
Por dar un ejemplo, la doctora recomendó la autopsia psicológica como alternativa ante la falta de vigilancia. El propósito de la autopsia, que se lleva a cabo en países como Francia y Chile, es realizar una serie de entrevistas a familiares y amigos cercanos de la persona que cometió el acto para así conocer cómo llegó a suicidarse.
Actualmente, el suicidio es la octava causa de muerte violenta en la Isla, pero continúa siendo un tabú entre los ciudadanos. En la Comisión, el tema ha sido difícil de tratar ya que no cuentan con las herramientas para conocer cuál es el comportamiento de un individuo suicida ni por qué comete el acto.
“Lo que tenemos es lo que nos da el Instituto de Ciencia Forense de Puerto Rico. Aquí no sabemos (datos de) los intentos suicidas, cuántos son. No sabemos cuál es el comportamiento suicida en general. Hay muchos casos de suicidios que no contamos. Como los suicidios de accidentes de carro que no entran en las estadísticas de suicidio. Nuestras estadísticas podrían ser más altas de lo que estamos dando”, concluyó la directora de la Comisión.
Busque mañana la segunda parte de este reportaje sobre el suicidio en jóvenes y niños.