Según el Negociado del Censo, para el año 2014 alrededor de 5,266,738 puertorriqueños vivían en Estados Unidos, una cifra que actualmente sobrepasa la cantidad de puertorriqueños en la Isla. Aunque muchos nacieron allá, otros migraron en busca de mejores condiciones de vida. Dentro de esa diáspora se encuentran muchos futuros universitarios.
Con el propósito de indagar sobre el impacto de la migración en las universidades locales, Diálogo conversó con los encargados de admisión y mercadeo de cuatro grandes universidades del País. En este reportaje le presentamos las declaraciones de los funcionarios de la Universidad del Sagrado Corazón (USC) y la Universidad de Puerto Rico (UPR).
Estable la Universidad de Puerto Rico
Ivonne Calderón García, directora de la Oficina del Admisión de la UPR, indicó que en agosto de 2015 fue el año que más solicitudes de nuevo ingreso han recibido desde el 2010.
Según los cálculos oficiales, el sistema UPR recibió en el 2010 unas 17,042 solicitudes de las que aceptaron 12,988. En el 2011 recibieron 13,372 solicitudes y solo aceptaron 11,080. En el 2012 tuvieron un leve aumento cuando recibieron 15,599 solicitudes y aceptaron a 12,383. Mientras que en el año 2013 la cantidad de solicitudes recibidas se mantuvo casi igual con un total de 15,528 de los que aceptaron 12,514.
Ya para el 2014 recibieron 16,091 solicitudes de los que solo aceptaron a 12,969 y este último año académico (2015) tuvieron la mayor cantidad de solicitudes de nuevo ingreso desde la huelga del 2010, con un total de 17,798 de lo que aceptaron 14,295.
Según Calderón García, estos datos demuestran que hasta el momento la migración de puertorriqueños a Estados Unidos aparenta no haber afectado a la UPR.
Pero consciente de que la migración puertorriqueña puede continuar a gran escala, mencionó que en los próximos años la UPR se podría afectar porque muchos de los que se van son prospectos para la universidad. Además, dijo que el auge y la creación de otras instituciones hacen más complicado poder atraer estudiantes.
Asimismo, reconoció que como la UPR es la universidad pública del Estado, su costo y su prestigio influye al momento de atraer estudiantes. Pero a la misma vez, mencionó que es necesario crear estrategias de mercadeo para dar a conocer completamente sus ofrecimientos académicos, organizaciones y otros beneficios.
“Aunque somos la universidad del Estado, como quiera nos tenemos que hacer sentir y que el estudiante conozca de verdad cuáles son nuestros programas, porque muchos estudiantes en escuela superior están: ‘aja y ahora qué voy a estudiar’”, dijo.
Sin disminución significativa el Sagrado Corazón
Por su parte, Edwin Ríos, director de Gestión de Matrícula de la USC, dijo a Diálogo que aunque la emigración impacta el reclutamiento en las universidades, la universidad que representa no ha reflejado una disminución significativa en la matrícula.
Indicó que su Institución recibe al año alrededor de siete mil solicitudes de estudiantes de nuevo ingreso de los que aceptan unos 2,300. La USC cuenta con una matrícula de sobre cinco mil estudiantes de los que un 49 por ciento vienen de escuelas privadas, un 38 por ciento de escuelas públicas y solo un cuatro por ciento son estudiantes extranjeros.
“El plan de reclutamiento de la universidad es un esfuerzo continuo y dinámico que se realiza todo el año mediante visitas a escuelas y participando en ferias y actividades dirigidas a estudiantes de escuela superior. Además, participando en la iniciativa Campus Puerto Rico para promover la Isla como un destino educativo y atraer estudiantes del extranjero para que realicen sus estudios universitarios en la Isla”, puntualizó Ríos.
Proyecciones a largo plazo
Varios de los entrevistados coincidieron en que de aquí a unos años la cantidad de estudiantes puertorriqueños que solicitan a sus Instituciones puede disminuir. Por tal razón, insistieron en la necesidad de mercadear las universidades locales a otros países para atraer estudiantes internacionales, como también indicaron la posibilidad de tener que consolidar recintos o instituciones.
“¿Será necesario tener tantas universidades de aquí a muchos años? Por ejemplo, hoy no hay unas aerolíneas que antes había, esto quiere decir que no hacían falta. También, varias empresas de contabilidad que antes existían, ya hoy no existen. La banca nos da el ejemplo de que muchas se unen para ser más competitivas. Esto puede ocurrir con las universidades”, compartió el presidente de la Pontificia Universidad Católica Puerto Rico, quien preside la Junta de Gobierno de la Hispanic Association of Colleges and Universities (HACU) de Estados Unidos.
Asimismo, Mayra Cruz Rivera, vicepresidenta de Mercadeo y Asuntos Estudiantiles del Sistema Universitario Ana. G. Méndez, añadió que en algún momento tanto las instituciones privadas como la UPR tendrán que unirse para trabajar en conjunto las preocupaciones y problemas que todas enfrentan.
“Tenemos un reto y nos tenemos que unir para ver cómo lo atendemos. Lo que pasa es que el tema de la competencia por los estudiantes está presente. Pero trascendiendo ese tema, la realidad es que hay que buscar en algún momento ese consenso porque la problemática de la merma estudiantil es de todos”, dijo.
Por otro lado, Luisa Hernández, profesora de sociología del Recinto de Río Piedras de la UPR, mencionó que a medida que las personas continúen abandonando el País, el DE y las instituciones universitarias locales tendrán que reestructurar su sistema para poder mantenerse operando. Mencionó que entre las medidas que van a tener que tomar se encuentra el contratar menos profesores y personal no docente, como también agrupar más estudiantes en un mismo curso.
“Aquí los grupos de estudiantes han aumentado. Antes un profesor daba clase a 25 o 30 estudiantes y ahora ese profesor está enseñando un mismo curso a 40 estudiantes y no se les paga doble. Esto afecta porque la metodología educativa que usas regularmente no la vas a poder utilizar para un grupo de muchos estudiantes porque no es lo mismo, el nivel de aprendizaje puede cambiar”, dijo la profesora, quien se especializa en temas relacionados con la migración femenina.
La profesora también comentó que como en este momento la migración de puertorriqueños es producto de la crisis económica, gran parte de la población joven prefiere estudiar carreras cortas con el propósito de terminar en poco tiempo y poder buscar trabajo.
Campus Puerto Rico
Con la intensión de promover al País internacionalmente como una opción para completar estudios universitarios, el Departamento de Estado desarrolló el programa Campus Puerto Rico.
Este proyecto, que fue iniciativa del exsecretario de Estado, David Bernier, utiliza como estrategias para atraer estudiantes, científicos y académicos la ventaja de compartir el mismo sistema legal y el dólar estadounidense, como también el no necesitar visado para venir si es ciudadano o residente legal de Estados Unidos.
Por otro lado, hace énfasis en la variedad de programas académicos y de instituciones acreditadas que existen en la Isla a un costo accesible, en la oportunidad que tienen los estudiantes de recibir una educación bilingüe. Mientras que también se enfocan en dar a conocer la ventaja del clima cálido que prevalece durante todo el año, aspecto que les permite a los extranjeros disfrutar también de la riqueza turística de la Isla.
De los entrevistados, las representantes del SUAGM y de la UPR, así como el representante de la USC, informaron que conocen el programa y que se encuentran trabajando un plan para mercadear sus instituciones internacionalmente.
Este es el tercer artículo de una serie sobre el efecto de la migración en la educación superior.
