
Dilma Rousseff y Aécio Neves se enfrentarán nuevamente en tres semanas
La candidata a reelección por el Partido de los Trabajadores (PT) y actual presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, falló el domingo en obtener el 50% necesario para lograr su reelección, por lo que deberá ir a una segunda vuelta con el economista Aécio Nieves, del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB) el 26 de octubre.
Las elecciones contaron por primera vez con urnas electrónicas que permitieron conocer, una hora después de que cerrara el último de los 450,000 colegios electorales, el 90% del escrutinio. Además, el Tribunal Superior Electoral proveyó máquinas para el registro inicial de los electores mediante sus huellas dactilares.
Rousseff, economista de profesión, alcanzó un 41.6% de votos de los cerca de 142.8 millones de electores que participaron de la contienda, mientras que Neves, también economista, hizo lo propio con un inesperado 33.5%, desbancando así a la ecologista Marina Silva, quien perdió en los últimos días el auge inicial de su candidatura por el Partido Socialista Brasileño (PSB), logrando un 21.3% de los votos.
La candidatura de Silva, quien entró a la contienda en agosto en sustitución del economista Eduardo Campos luego de que este falleciera en un accidente aéreo, se presentaba como bastión para romper el bipartidismo que ha gobernado en Brasil desde el 2005. Pero la falta de alianzas políticas y errores de campaña le impidieron conseguir un resultado distinto al del 2010, cuando también quedó en tercer lugar con un porcentaje similar de votos.
Silva declaró, concluido el sufragio, que “Brasil señaló claramente que no está de acuerdo con lo que está ahí”, aludiendo al gobierno actual de Rousseff.
Rousseff y Neves buscarán atrapar a los cerca de 22 millones de electores del PSB que votaron por Silva. Aunque todavía faltan tres semanas para la segunda vuelta y las predicciones son inconclusas, las encuestas de los últimos días han señalado que Neves se agenciará alrededor de un 60% de esa población, lo que representa un reto para la reelección de Rousseff.
Mientras, Silva favoreció el martes la candidatura de Neves, con tal de derrotar a la incumbente a favor del “cambio que el país necesita”.
A cambio de su apoyo, la ecologista pretende que Neves integre a su programa proyectos de sustentabilidad ambiental, el fin de la reelección presidencial (algo que el PT rechaza en principio) y destinar el 10% del producto interno bruto a la educación.
Entre las propuestas de Neves se encuentran una mayor apertura al capital privado, la autonomía del Banco Central y la búsqueda de más acuerdos bilaterales con Europa y Estados Unidos.
Mientras, los partidarios de Silva están divididos entre quienes reclaman un cambio gubernamental tras 12 años del PT en el poder —sumado a un lento crecimiento de la economía en los últimos cuatro años y escándalos de corrupción— y los que favorecen los programas sociales del partido que lidera Rousseff.
En las elecciones, los brasileños también votaron por 127 gobernadores estatales, 27 senadores y 513 diputados a la Cámara.