La Organización Internacional del Trabajo (OIT), afirmó que los jóvenes de los países industrializados sufren una alta tasa de desempleo, creciente inactividad y trabajo precario, mientras que aumentan los que viven en la pobreza en los países en desarrollo.
En su informe “Actualización de las Tendencias Mundiales del Empleo Juvenil, 2011”, publicado hoy miércoles, la OIT comenta que la “mala suerte de esta generación que ingresa al mercado laboral marcada por el desempleo, podría tener consecuencias a largo plazo en términos de salarios más bajos y desconfianza en el sistema político y económico”.
El documento añade que la frustración colectiva de los jóvenes ha sido uno de los factores que ha contribuido al surgimiento de los movimientos de protesta que han tenido lugar alrededor del mundo este año.
Según el texto, el número absoluto de jóvenes desempleados disminuyó levemente desde su punto más alto en 2009—pasó de 75,8 millones a 75,1 millones a finales de 2010—, pero atribuyó este descenso a que ellos se retiran del mercado laboral cada vez más, especialmente en las economías desarrolladas y en la Unión Europea.
El desempleo juvenil alcanzó en 2010 un 12,7% a nivel mundial.
Fuente Radio ONU