Nosotros, el sindicato de estudiantes graduados de la Universidad de Michigan (GEO), condenamos enérgicamente la política de intimidación violenta empleada por el presidente de la Universidad de Puerto Rico (UPR), Dr. José Ramón de la Torre, la Junta de Síndicos, la rectora interina del Recinto de Río Piedras, Ana Guadalupe, y el Gobierno del Estado Libre Asociado de Puerto Rico. La asamblea de estudiantes, fomentada por la administración de la universidad, decidió recientemente con una inmensa mayoría que el estudiantado debía continuar la huelga. Ahora los administradores de la Universidad y los políticos se colocan en una posición difícil y contradictoria: la democracia sólo cuenta cuando es a favor de sus posiciones. Por directriz del superintendente José Figueroa Sancha, un centenar de policías rodean el campus e impiden el libre acceso al principal centro docente de Puerto Rico, donde los manifestantes acampan desde finales de abril. Apoyamos las reivindicaciones que persiguen los estudiantes. Sus reclamos, como los nuestros, son por una educación accesible y pública, una administración transparente y abierta. Vivimos en momentos en que la educación pública está siendo amenazada por los intereses privados. Tenemos la obligación de luchar junto a ustedes por el bien de los movimientos estudiantiles alrededor de todos los Estados Unidos. Compartimos su lucha y su visión de lo que debe ser la Universidad. Apoyamos la determinación de la Asamblea General para que renuncien inmediatamente los directivos de la Universidad (rectora interina Ana Guadalupe y presidente José De la Torre) por sus estilos antidemocráticos y autoritarios. Despreciamos la medida de receso académica tomada por los administradores para detener los reclamos de la comunidad en huelga. Exigimos que la Universidad respete la decisión democrática de los estudiantes en continuar la huelga y los exhortamos a que se sienten a negociar de buena voluntad. Exhortamos al gobernador Luis Fortuño, la Legislatura de Puerto Rico y a la fuerza táctica de la Policía a que renuncien a la violencia contra los estudiantes y la población. Exhortamos a los líderes puertorriqueños en los Estados Unidos a que tomen posición pública apoyando a los estudiantes. La fuerza bruta no callará las voces del movimiento estudiantil ni las nuestras. Apoyamos el paro nacional que ha sido convocado para el martes 18 de mayo de 2010.