NACIONES UNIDAS (Reuters) – Potencias mundiales acordaron ayer ampliar las sanciones para castigar a Corea del Norte por su reciente ensayo nuclear y programa de armas, mientras Rusia dijo que preveía que Pyongyang lanzaría otra provocativa prueba de misiles. Los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU, más Japón y Corea del Sur, acordaron un borrador de una resolución que será discutida mañana, según un diplomático. Estados Unidos y Japón han buscado fuertes sanciones para castigar a Corea del Norte por su ensayo nuclear de mayo, pero China y Rusia han sido cautelosas sobre provocar a Pyongyang al imponer más sanciones. Corea del Norte ha causado malestar en países dentro y fuera de la región en las últimas semanas con lanzamientos de misiles, amenazas de ataque a Seúl y un ensayo nuclear, provocando que las fuerzas estadounidenses y surcoreanas eleven su alerta militar en la península a uno de los mayores niveles desde la Guerra de Corea de 1950-53. Agravando la situación, el Ejército ruso informó que tenía información que indicaba que Norcorea planeaba lanzar otro misil. “Tenemos cierta información sobre el tipo y las características del misil. Sin embargo, no tenemos datos certeros sobre el momento (en que se lanzará)”, expresó una fuente de alto rango del Ejército según citó la agencia de noticias Interfax. Por otro lado, el ministro de Defensa de Corea del Sur, Lee Sang-hee dijo que recientes medidas adoptadas por Pyongyang estaban ligadas a los planes de sucesión de su líder, Kim Jong-il. “Kim Jong-il está empecinado en construir un plan de sucesión para ceder el poder creando tensión (…) mientras ignora la situación desesperada de su pueblo hambriento y el empobrecido estado de la economía”, comentó Lee Sang-hee en un mensaje a las tropas, de acuerdo a un colaborador militar. “El régimen norcoreano es inmoral, irresponsable y un grupo inhumano que pone su propia supervivencia antes de la vida y la felicidad de su gente”, agregó.
Legisladores surcoreanos dijeron que la agencia de inteligencia de su país les había informado que los líderes de Pyongyang habían comenzado a trabajar en la sucesión de Kim para permitir a su hijo menor Jong-un, que fue educado en Suiza, asumir el poder. Analistas han dicho que la reciente demostración de poder militar podría ayudar al líder de 67 años a desviar la atención de una economía decadente que empeoró durante su Gobierno y a convocar apoyo después de una supuesta apoplejía que sufrió el año pasado, que puso en duda su liderazgo. La economía del país podría sufrir otro golpe a raíz de las nuevas sanciones de la ONU, pese a que ya se encuentra en gran medida aislada del sistema económico mundial. Corea del Norte parece estar lista para aumentar las tensiones disparando un misil de largo alcance que podría llegar a territorio estadounidense y misiles de mediano alcance capaces de atacar Corea del Sur y la mayor parte de Japón, dijeron funcionarios. La prensa estatal norcoreana expresó que el país podría seguir incrementando su fuerza disuasiva nuclear para contrarrestar lo que considera una amenaza hostil de Estados Unidos, que cuenta con armamento nuclear. El enviado especial estadounidense en Corea del Norte, Stephen Bosworth, dijo en Nueva York que Estados Unidos hará lo que sea necesario para conservar la seguridad de sus aliados, pero no tiene planes de invadir Norcorea o derrocar a su Gobierno por la fuerza.
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