En Senegal las mujeres tienen un papel muy limitado y la homosexualidad es ilegal. Estos fueron algunos de los hallazgos que encontró el antropólogo y profesor de la Universidad de Puerto Rico en Cayey, Juan Caraballo Resto, quien realizó una investigación entre mayo y junio de 2016 con el propósito de explorar la diversidad religiosa en África occidental.
Según el parte de prensa, Caraballo Resto llevó a cabo observaciones participes en las cuales identificó espacios y grupos para compartir de una forma cotidiana, recurrente e intensiva para observar, y al mismo tiempo participar de actividades que llevan a cabo comunidades senegaleses.
“Senegal es un país en el occidente africano que tiene una diversidad religiosa muy grande y, contrario a muchos países vecinos, la diversidad religiosa no necesariamente supone un conflicto ni es un obstáculo en los procesos de unificación nacional”, expresó el doctor Caraballo Resto, quien describe la diversidad religiosa en Senegal como fluida y porosa.
Entre los hallazgos de la investigación, Caraballo Resto encontró que las formas en que el pueblo senegalés tramita su diversidad religiosa contrasta con la manera en que los puertorriqueños y en otras partes del mundo hacen lo propio. El antropólogo explicó que en Senegal la diversidad religiosa se da en un trámite fluido ya que no se limitan a visitar una sola denominación religiosa y esto no supone un problema. Es decir, las personas pueden involucrarse en más de un espacio religioso y es visto como normal.
El doctor mencionó que aunque la diversidad religiosa tenga estas características en Senegal, existen conflictos en cuanto a la poca participación de algunos grupos -como mujeres y homosexuales- en el espacio religioso.
Además, Caraballo Resto encontró cómo fluctuaciones económicas, de género y -sobretodo- religiosas se encuentran en espacios cotidianos como el deporte, específicamente en la lucha libre senegalesa. Los senegaleses hacen una integración de este deporte con prácticas religiosas (rituales) que llevan a cabo previo a sus luchas en la arena. También este deporte abre fluctuaciones económicas en sus practicantes ya que es uno de los deportes mejor pagados en el país.
En cuanto a las fluctuaciones de género en la lucha libre en Senegal, este deporte ha sido destinado para hombres exclusivamente. No obstante, actualmente las mujeres se están adentrando a este espacio pero con limitaciones ya que en su cultura, ellas tienen los roles específicos de madres, cuidadoras y maestras.
“Todas estas fluctuaciones -religiosas, económica y de género- porosas que se ven en la lucha libre senegalesa como práctica social, supone para nosotros un vuelco a Dios; un repensar en nuestras conceptualizaciones de Dios y de la religión desde las ciencias sociales”, concluyó el doctor Caraballo Resto.
Caraballo Resto realizó esta investigación en Senegal gracias a la Beca de Investigación que otorga el Programa de Becas Fulbright. Fulbright es el principal programa internacional de intercambio educativo patrocinado por el gobierno de los Estados Unidos y está diseñado para que ciudadanos estadounidenses de la comunidad académica viajen a otras partes del mundo a realizar sus investigaciones. El programa también aplica a estudiosos que desean desarrollar sus investigaciones en los Estados Unidos.