La Coalición de Organizaciones Anti-Incineración se expresó jubilosa por la declaración de nulidad que hizo el Departamento de Justicia sobre el contrato firmado entre la Autoridad de Desperdicios Sólidos (ADS) y la incineradora Energy Answers en el año 2012, bajo la pasada administración del ex gobernador Luis Fortuño.
“Se le están cerrando las puertas a los que hacen esta disparatada propuesta que amenaza nuestra salud y la de nuestros ciudadanos más vulnerables, incluyendo nuestros niños. Por lo único que han llegado hasta aquí es porque el gobierno anterior les aprobó los permisos en tiempo récord, con el truco de la ‘emergencia energética’, sin darnos oportunidad de objetarlos”, expresó Teresa Sánchez, portavoz de Madres de Negro, organización de la Coalición que se manifiesta todas las semanas frente a la alcaldía de Arecibo, en reclamo por la protección de los hijos de cada una de ellas.
Sánchez lamentó que algunos de sus compueblanos arecibeños brindaran su apoyo a los contratos de incineración a cambio de dinero, según ella indicó, aunque se mostró optimista y complacida por la anulación del contrato. “Ahora se están comprobando todas las irregularidades y violaciones de ley en que incurrieron”, añadió la portavoz.
Por su parte, el ingeniero y planificador Ivan Elías, agradeció a la Clínica de Asistencia Legal de la Universidad de Puerto Rico (UPR) por el apoyo brindado a la comunidad de Arecibo en su lucha contra los contratos de incineración. “Los arecibeños agradecemos a la Clínica de Asistencia Legal de la UPR, sus estudiantes y su profesorado, incluyendo al Profesor Pedro Saadé, su compromiso con nuestras comunidades y su excelente trabajo. Su análisis legal nos sirvió de base para solicitarle a ADS hace unos meses que anulara el contrato con Energy Answers. Ahora se ve el resultado”, afirmó Elías.
“Esto es un golpe para la compañía. Ellos necesitan este contrato que obligaba ilegalmente a los municipios cercanos a Arecibo a pagar por llevar sus residuos sólidos a la megaincineradora para hacer viable su operación”, explicó Sánchez, indicando, además, que todavía les causa temor que la incineradora Energy Answers contemple importar desperdicios del exterior y convierta a Arecibo en el “crematorio del Caribe, en perjuicio de nuestra comunidad”.
Según la Coalición de Organizaciones Anti-Incineración, el incinerador propuesto para Arecibo representa un peligro para las comunidades circundantes y de las que están vientos abajo de las emisiones de la chimenea. La emisión de plomo, mercurio y dioxinas, pueden afectar la salud de decenas de miles de personas.
En Islandia, en 2011, tuvieron que decomisar ganado vacuno que se veía afectado por las emisiones de un incinerador que viajaban en dirección del viento. En aquella ocasión se encontraron dioxinas en la leche y los productos lácteos originados allí. Las ganaderías de Arecibo y Hatillo se verían afectadas por las emisiones que viajarían junto con el viento, de acuerdo con la coalición arecibeña.