Tras una negociación a menos de 24 horas de la fecha pautada para celebrarse la Asamblea General de Estudiantes de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras (UPR-RP), el Consejo General de Estudiantes (CGE) logró llegar a un acuerdo con la Junta de Gobierno del Teatro de la UPR para utilizar dichas instalaciones.
Las dificultades suscitadas en el proceso de solicitud del Teatro por parte del CGE -trámites iniciados desde el 23 de abril de 2012- fue el primer punto en agenda a discutirse en la asamblea informativa que inició a las 11:15 a.m. con un quórum de 826 estudiantes, según indicó el presidente del CGE, Álvaro Moreno-Ávila.
Teatro de la UPR como espacio universitario
Los principales reclamos relacionados al Teatro fueron la poca accesibilidad de estas instalaciones a la comunidad universitaria, insistiendo que éste debe ser considerado un espacio universitario por definición. "Este Teatro es nuestro. Lo debemos defender como nuestro gran salón de clases”, dijo en el informe Aníbal López, estudiante del Programa Graduado en Investigación y Evaluación Educativa de la Facultad de Educación y Representante Estudiantil ante la Junta de Gobierno del Teatro.
Luego de la exposición de López- quien mencionó los nombres de los seis estudiantes sancionados en el 2006 al protestar contra los intentos de privatización del Teatro bajo la presidencia del licenciado Antonio García Padilla- se aprobó una moción repudiando cualquier tipo de privatización tanto para el Teatro como para cualquier otra esfera de la Universidad.
Situación de la UPR
Por otra parte, el tema neurálgico sobre la situación actual de la UPR recayó sobre las finanzas y la distribución del presupuesto de la institución.
Christian Arvelo Forteza, vicepresidente del CGE, y Arnaldo Colberg, miembro del CGE, presentaron el informe sobre el recorte de cursos y secciones. “La administración universitaria indicó que la reducción en la oferta académica se deriva de la reducción de estudiantes matriculados en el Recinto y una reducción de $6 millones [en el presupuesto del] el Recinto”, informó Arvelo Forteza.
Asimismo, otro de los problemas que produjo el recorte sistemático de los cursos es la deficiente clasificación de algunas clases. “Se eliminaron sistemáticamente las clases que tenían menos de 19 estudiantes. Lo que hemos observado es que muchas de estas secciones -que tienen un límite por ser laboratorio o práctica de 15 estudiantes o menos- estaban mal clasificadas. Por lo tanto, en el Recinto muchas de las secciones que cortaron (…) no estaban bien clasificadas”, explicó Colberg.
Luis Gabriel Núñez, senador académico de la Facultad de Humanidades y estudiante de Música e Historia, proveyó un punto de información sobre algunos asuntos discutidos en la última reunión de su Senado. “(…) la Universidad se está ahorrando $6 millones por concepto de jubilación de profesores. Por ende, hay más dinero. El presupuesto de la Biblioteca [Jesús M.] Lázaro para comprar libros en este año académico es cero. La Biblioteca no tiene fondos. Creo que ese no es el ambiente universitario que nosotros nos merecemos y aspiramos”, subrayó.
Otro de los temas atendidos en la asamblea fue la suspensión de fondos por parte de la Fundación Nacional de las Ciencias (NSF, por sus siglas en inglés), organismo que encontró en febrero 2010 deficiencias e irregularidades en los recursos en el área de Ciencias e Ingeniería. “Se le permitirá que en el primer semestre académico 2012-2013, la UPR demuestre la obligación de un sistema que cumpla con las normas de la NSF”, indicó Christopher Torres Lugo, estudiante graduado de la Escuela de Administración Pública y Síndico Estudiantil de la UPR.
La Reforma Universitaria fue planteada en la asamblea como una que responde a la agenda política de la actual administración del gobernador Luis G. Fortuño, la que inició según los allí presentes con la pausa y reducción de cursos. Javier Vélez, representante alterno ante la Junta Administrativa de la UPR y estudiante graduado de la Facultad de Administración de Empresas, exhortó en su informe a que los estudiantes lean las propuestas de los partidos políticos y de las organizaciones universitarias. “Edúquense y tengan bajo su consideración todos los puntos de vista. Así podrán tomar una decisión ponderada sobre el tema de la Reforma y tendremos debates más enriquecedores de los cuales surgirá la Reforma Universitaria que tanta falta nos hace: una creada por y para los miembros de la comunidad universitaria”.
El tema de seguridad se centró en la oposición hacia la instalación de cámaras en el Recinto de Río Piedras. “Las cámaras de seguridad ya están compradas. Sólo falta instalarlas. Mas, sin embargo, se compraron con unos fondos federales para la protección de las mujeres”, indicó Núñez durante el informe de seguridad.
Por otra parte, se planteó el repetitivo problema que confrontan los estudiantes respecto al pago de la beca. Los principales reclamos son “que se procesen los pagos correctamente, que se procesen a tiempo y, a la misma vez, que no se interrumpa el servicio a los estudiantes”, puntualizó Jaime Rosado, Representante Estudiantil de la Junta Administración del Recinto y estudiante de la Escuela Graduada de Administración Pública durante el informe de asistencia económica.
