
El Instituto FILIUS, adscrito a la Universidad de Puerto Rico (UPR), recibirá el apoyo de la Cámara de Representantes para proveerle estabilidad financiera, con tal de continuar beneficiando a personas con impedimentos y necesidades especiales de forma gratuita.
El director del Instituto, el doctor Nicolás Linares, ofreció hoy su respaldo al Proyecto de la Cámara 1035, el cual asegurará que la entidad continúe otorgando servicios, por ejemplo, a pacientes de autismo infantil.
“El Proyecto de Autismo Infantil recibe diariamente referidos de toda la Isla para nuestra clínica de diagnóstico. Desde el año 2011 al presente, hemos recibido 1,012 referidos. Muchos de estos casos no se logran citar, ya que dependemos de que el contrato sea renovado todos los años y se pierden aproximadamente tres meses de servicio”, explicó el doctor Linares al deponer en la vista pública de la Comisión de Educación para el Fomento de las Artes y la Cultura, que preside la representante Brenda López de Arrarás.
Al igual que con el Programa de Autismo Infantil, el Instituto FILIUS “realiza esfuerzos colaborativos para desarrollar investigaciones entre las unidades de la UPR y entidades gubernamentales para mejorar la calidad de vida de la comunidad puertorriqueña”, planteó Linares.
El Instituto FILIUS es el primer instituto de investigación multidisciplinario y multicampus creado en la Universidad de Puerto Rico. Su misión como organización de compromiso social consiste en atender “las necesidades de hispanos con impedimentos mediante estudios científicos, análisis de políticas de servicios, práctica intramural, divulgación, educación de facultad y estudiantes y adiestramientos a profesionales”, según lo establecido en su página de Internet.
Asimismo, Linares indicó que FILIUS ha contribuido a desarrollar política pública relacionada con personas con necesidades especiales.
Entre las investigaciones que realiza FILIUS, Linares destacó la intervención interdisciplinaria en el desarrollo de destrezas sociales en estudiantes dotados, investigaciones sobre género, sexualidad e impedimentos en estudiantes con y sin impedimentos, y el protocolo para el diagnóstico de autismo.
Además, FILIUS se encarga de investigaciones sobre la viabilidad de un sistema audiovisual computarizado para promover destrezas vocacionales en adultos con impedimentos de bajo potencial de empleo, el perfil epidemiológico de la población de autismo en Puerto Rico y la incidencia en cambios de conducta reportados por padres de niños con autismo.
Otros programas que trabaja FILIUS, detallados por Linares, son el Proyecto de Servicios Relacionados a Estudiantes con Necesidades Especiales (ProSerEs), que ofrece servicios de psicología, patología del habla y terapia ocupacional a estudiantes en desventaja social en la Isla; el Proyecto Life Coach, que ofrece a ayuda como “consejeros de vida” a jóvenes de instituciones juveniles, impedimentos laborales y a padres, y el Proyecto de Investigación y Educación sobre las Mejores Prácticas de Servicios para Poblaciones con Necesidades Especiales, que busca preparar a las familias con personas de necesidades especiales sobre cómo obtener servicios de óptima calidad.
Del mismo modo, el Instituto tiene programas como el Proyecto Inserción de las Personas con Impedimentos en el Ámbito Laboral, que tiene la finalidad de establecer un servicio de colocación de empleos de personas con impedimentos, y la Unidad de Educación Continua y Transferencia de Conocimiento, que ofrece actividades educativas para profesionales de la salud y la educación que laboran con poblaciones con necesidades especiales.
Como parte de las alternativas propuestas para darle estabilidad al Instituto, Linares recomendó "hacer un acercamiento a la Comisión de Hacienda para que introduzcan una enmienda al presupuesto, para consignarlo al asignado por la Legislatura al Instituto FILIUS en una asignación especial a la UPR-Instituto FILIUS anualmente, y que ese desembolso provenga del presupuesto del Departamento de Educación”.
Linares concluyó su ponencia con la lectura de una emotiva carta de agradecimiento que le escribió hace varios años Inés Mendoza, la esposa del exgobernador Luis Muñoz Marín, con motivo de las terapias con las que él logró devolverle el habla al mandatario, quien sufrió un derrame cerebral durante su vejez.
Se espera que el Proyecto de la Cámara 1035 sea aprobado en la Cámara de Representantes en o antes del próximo miércoles, 25 de junio.