El primerísimo actor José Luis “Chavito” Marrero falleció a sus 82 años en el Hospital Pavía en Santurce por complicaciones respiratorias. “Chavito”, quien llevaba 11 días recluido en el hospital, sufría de una fibrosis pulmonar que lo obligaba a usar oxígeno las 24 horas del día. El comediante murió al lado de su compañera inseparable, la actriz Mercedes Sicardó, y sus tres hijos, José Luis, María de Lourdes y Ana María. Este actor, quien fue calificado como “el maestro de la pantalla gigante y chica del siglo 20” por el gobernador de Puerto Rico, Luis Fortuño, también laboró como director, luminotécnico y escenográfo. “Chavito fue una figura clave en el desarrollo de la televisión y cine en Puerto Rico, por su participación en producciones de todo orden, y será recordado con mucho respeto y cariño”, expresó el Gobernador. Aunque “Chavito” inició sus estudios universitarios en el Departamento de Ciencias Naturales de la Universidad de Puerto Rico, sintió una fuerte atracción por el arte dramático que lo motivó a cambiar de concentración. Marrero se presentó artísticamente en obras de teatro como “Tiempo muerto”, “La charca”, “La carreta” y “Mañanita de Sol”, entre muchas otras. Además, su última participación en una producción cinematográfica fue en la película puertorriqueña “Maldeamores” donde interpretó el papel de “Cirilo”. “Yo admiraba su versatilidad”, comentó vía telefónica el actor, profesor, productor y director Dean Zayas, quien laboró junto a Marrero en obras de teatro, televisión y radio. Para Zayas, “Chavito” era un actor completo que tenía la capacidad de cubrir toda la gama de expresiones artísticas. Por otro lado, la gerente general del Centro de Bellas Artes, Myrna Casas, expresó en entrevista radial (Noti Uno) que la comunidad puertorriqueña perdió a un excelente actor que dirigía tanto teatro y zarzuela como televisión. “Chavo hizo todo bien, y lo vamos a extrañar”, añadió Casas. La generosidad, paciencia y solidaridad de este actor impactaron en su juventud al profesor de la Escuela de Comunicación de la Universidad de Puerto Rico Mario Roche, a tal magnitud que lo convirtió en su “protector en el contexto de filmación”. “Chavito”, quien le brindó su experiencia y conocimiento sin recelo a Roche, participó junto a él en el filme puertorriqueño “La guagua aérea”. “Confío en que Chavito servirá de inspiración para la clase artística de Puerto Rico y a nivel internacional. Como puertorriqueños, nos toca continuar la obra y legado de este gran actor y humilde ser humano que brilló por procurar siempre el desarrollo y prosperidad de la clase artística en la Isla”, destacó el Primer Ejecutivo. Los restos de este primerísimo actor serán expuestos hoy a partir de las 11 a. m. en la Funeraria Buxeda de Río Piedras. Mañana, 10 de febrero, será velado en el Instituto de Cultura, en el Viejo San Juan. Su hija Ana María comentó que “Chavito” podría ser sepultado en el Cementerio Buxeda en Cupey.