Ben Stiller: el reto de ser un director-actor

26 de diciembre de 2013 Por Janice Mejías Cine y TV

Estas navidades, cuando multitudes en familia se dirijan a los cines de Puerto Rico a ver lo más reciente del comediante Ben Stiller, lo harán —me atrevo a decir—sin el conocimiento de quién estuvo detrás de las cámaras, asegurándose de que el producto final fuese digno de ganarse un espacio en lo que se ha convertido en una de las fechas más codiciadas por los estudios de cine. Se trata del mismo protagonista, cuyos talentos detrás de la cámara no son un secreto para sus seguidores.

Stiller dirigió su primera película, Reality Bites, hace 20 años atrás, pero no fue hasta uno de sus trabajos posteriores, la comedia Zoolander, que el cineasta de Nueva York se estableció como un prometedor director de comedia, género en el que ya se había hecho de un nombre como actor con There’s Something About Mary de los hermanos Farrelly. Aunque tardó siete años en volver a trabajar detrás de las cámaras, Tropic Thunder fue evidencia del crecimiento de Stiller como director, filme que le consiguió una nominación al Oscar a Robert Downey Jr. tras dar vida a uno de los personajes más memorables de ese año.

Cinco años más tarde, Stiller vuelve a trabajar como director, esta vez en el remake de The Secret Life of Walter Mitty, adaptación del cuento del autor estadounidense James Thurber. El filme fantástico cuenta la vida de Walter, un empleado de la icónica revista LIFE, quien se la pasa soñando despierto. Un día, Walter se ve obligado a emprender en una aventura real cuando parte de su trabajo se extravía, enfrentando los miedos que lo aislaban de la sociedad.

Con Walter Mitty, Stiller se desvía un poco de la comedia y se zambulle en géneros que sólo había trabajado como actor. El resultado es su trabajo más maduro al día de hoy.

“Tener la oportunidad de trabajar en lo que considero es un material desafiante es lo que me ayuda a crecer como director. En realidad, es mucho lo que creces y aprendes cada vez que haces una película. Con The Secret Life of Walter Mitty me adentré a un territorio que no había explorado antes y el tener que juzgar una película por diferentes criterios y no sólo por las risas o el nivel de comedia fue una experiencia completamente nueva y emocionante para mí. Lo más que me disfruté de este proyecto fue el no tener que preocuparme por ser gracioso y poder enfocarme en seguir a este personaje, que es de lo que trata la historia.”, expresó Stiller en entrevista con Diálogo, como parte de la gira de promoción de su nueva película.

Sobre las dificultades que se presentan al protagonizar y dirigir un filme de esta magnitud, Stiller manifestó que necesita a alguien guiándolo y retándolo constantemente.

“Dirigir y protagonizar es casi una cuestión de dar y recibir. Debes aprender a tener compasión contigo mismo y a la vez darte la oportunidad de conseguir todo el material posible, porque más tarde lo vas a necesitar en la sala de edición. Para esta película intenté separar mi trabajo como actor de mi trabajo como director, el cual abarca cosas más específicas como logística, cámara, etcétera. Al final, tuve que aprender a tener paciencia conmigo mismo como actor y concederme la oportunidad de intentarlo una y otra vez hasta conseguir las tomas necesarias, pero resulta difícil no frustrarte contigo mismo”, añadió el actor entre carcajadas.

Dialogando sobre proyectos que sólo ha tenido la oportunidad de trabajar en sus sueños e imaginación, el actor de 48 años compartió los títulos de dos de sus libros favoritos, los cuales espera poder adaptar al cine en algún momento de su carrera.

“Realizar esta película fue una experiencia increíble y me siento muy afortunado de haber tenido la oportunidad de fungir como director. Esta es, sin duda alguna, una de esas cosas que nunca me habría podido imaginar, pero sí existen muchas películas que me gustaría hacer en algún momento de mi vida. Una de ellas es la adaptación de la novela What Makes Sammy Run? de Budd Schulberg. El otro proyecto es una colección de cuentos llamado CivilWarLand in Bad Decline de George Sanders, la cual me encantaría poder llevar a la pantalla grande en el futuro”, concluyó el actor.

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