BERLIN- Líderes mundiales del pasado y el presente, unidos con multitudes de ciudadanos alemanes y turistas, celebran este lunes el vigésimo aniversario de la caída del Muro de Berlín, un fuerte símbolo de la Guerra Fría que dividió a una ciudad, a un continente, y al mundo. Figuras de la era que anunciaron el colapso del comunismo en Europa oriental, como el ex líder soviético Mikhail Gorbachev y Lech Walesa, que encabezó las protestas en Polonia al frente del sindicato Solidaridad, participarán en eventos conmemorativos en toda la capital alemana. Junto a ellos se encontrarán los líderes de las naciones que ocuparon Alemania durante la posguerra, excepto por Estados Unidos, que estará representado por la secretaria de Estado Hillary Clinton. El primer ministro británico, Gordon Brown, el presidente francés, Nicolas Sarkozy, y el mandatario ruso, Dmitry Medvedev, tienen previsto asistir a las celebraciones organizadas por la canciller alemana, Ángela Merkel, en medio de una serie de encuentros bilaterales.
“Su majestuosidad yace no en la presencia de una estructura, sino en su ausencia”, leía el primer ministro británico Gordon Brown en su discurso, según extractos que trascendieron por anticipado. “El muro ya no existe. Las dos Berlín son una. Las dos Alemanias son una. Las dos Europas son una”, apuntó. Miles de turistas se han congregado en la capital una vez dividida para conmemorar el hecho que apresuró la reunificación de Alemania, el colapso de la Cortina de Hierro y el fin de la Unión Soviética. Merkel, quien trabajaba como investigador científico en Berlín Oriental en 1989, declaró este fin de semana que la caída del Muro fue “el día más feliz en la historia reciente de Alemania”. Se han planeado celebraciones en toda la ciudad, incluyendo el derribo de 1.000 piezas gigantes de dominó sobrepuestas en la ubicación original del Muro.
Los recuerdos del 9 de noviembre de 1989 dominaron los titulares de los diarios alemanes durante el fin de semana, y las estaciones de televisión emitieron programa tras programa con imágenes documentales, relatos de testigos y paneles de discusión acerca del hecho que cambió el rostro de Europa. Gorbachev, el ex canciller Helmut Kohl y el ex presidente George Bush padre, que lideraban sus respectivos países en noviembre de 1989, aparecieron en un aviso de doble página en el diario. “Ningún muro es lo suficientemente fuerte como para ahogar el espíritu humano”, declaró Bush en un comentario junto a la foto de los tres ex líderes. “Rara vez se ha visto un evento histórico tan radical y tan inmediatamente visible como el 9 de noviembre de 1989”, indicó una editorial del diario Koelnische Rundschau. “Cualquiera que hubiera estado parado antes del 8 (de noviembre) en la Puerta de Brandeburgo habría considerado un sueño absurdo el que una multitud de personas estaría sobre el Muro cuatro horas más tarde”, agregó.
Sacudida por la huida masiva de sus ciudadanos hacia Berlín Occidental, Alemania Oriental comenzó a levantar su “barrera de protección antifascista” en las primeras horas del 13 de agosto de 1961. Los sobrevivientes de la Guerra Fría han estado reflexionando sobre el día cuando Alemania Oriental abrió su frontera a occidente luego de que miles de sus ciudadanos comenzaron a cruzar la Cortina de Hierro a través de la frontera de Hungría con Austria en el verano de 1989. Helmut Schmidt, el ex canciller que dirigió Alemania Occidental desde 1974 a 1982, aseguró a la cadena pública NDR que estuvo “profundamente conmovido” cuando cayó el Muro. “Siempre supe que algún día tendríamos la oportunidad en Europa de reunir los dos estados alemanes de la posguerra, pero no creía que viviría para verlo”, declaró Schmidt, quien actualmente tiene 90 años. “Casi me sobrepasó”, agregó.
De acuerdo a un estudio publicado este año, al menos 136 personas murieron tratando de cruzar el Muro de Berlín entre 1961 y 1989. Miles de personas, sin embargo, consiguieron evadir los campos minados, perros y guardias en torres de vigilancia, usando ingeniosos planes que incluyeron túneles, cables aéreos y compartimentos ocultos en autos para cruzar hacia Occidente. El Muro cayó después de que el miembro y portavoz del Politburó Guenter Schabowski dijo en una rueda de prensa que los ciudadanos de Alemania Oriental podían cruzar las fronteras a partir de ese momento, sin percatarse de que la decisión no debía ser anunciada hasta las 0004 de la mañana siguiente. Su mensaje desató una oleada de gente hacia la frontera que los sorprendidos guardias orientales no lograron contener. Para algunos alemanes, la reunificación en 1990 del país sigue siendo un tema controvertido. Varios cientos de manifestantes izquierdistas protestaron el sábado contra las celebraciones planeadas en Berlín. Un nuevo sondeo a más de 1.000 alemanes realizado por el diario Leipziger Volkszeitung mostró que uno de cada ocho personas quiere que reconstruyan el Muro, con los número casi iguales en la parte occidental y oriental del país.