La naturaleza es un fenómeno que no deja de asombrarnos, especialmente cuando descubrimos que en ella podemos encontrar soluciones sencillas para problemas más complejos. De esto se trata la biomímesis. No muchos conocen sobre este término, pero es de suma importancia.
¿Alguna vez has pensado en lo estructurados que son los panales de las abejas? Estos animales de forma innata crean sus panales con perforaciones hexagonales. ¿Por qué no triángulos o cuadrados o círculos? La respuesta está en que el hexágono es la forma geométrica que maximiza el espacio de los panales para poder crear más miel en menos área y con la mínima producción de cera.
De una forma similar, podemos aprender de estas y utilizar su modelo para maximizar espacios en nuestra vida diaria como, por ejemplo, a la hora de crear cosechas para poder sembrar más vegetación en un espacio limitado y obtener más frutos.
Esto es solo un ejemplo de lo que es la biomímesis: una ciencia que promueve utilizar la naturaleza como ejemplo e inspiración para enfrentar problemas del mundo moderno con soluciones sencillas. La importancia de esta técnica recae en entender que la naturaleza está llena de encantos, ideas y lecciones importantes para nosotros, por lo que debemos hacer el mayor esfuerzo de cuidarla y preservarla.
En la actualidad, han surgido muchas invenciones gracias a todas las ideas que hemos encontrado en el medio ambiente. Una de las más comunes fue la invención del velcro que surgió luego de que un hombre cuestionara y utilizara como modelo la forma en la que una planta se pegó al pelo de su perro.
Al igual que las abejas, las termitas también nos han ayudado. Estas crean sus termiteros, diseñan de forma natural un tipo de “chimenea” por la cual crean una presión negativa que hala el aire de afuera y provee ventilación a los interiores. Basado en modelos similares, se han construido edificios donde fluye la ventilación sin la necesidad de acondicionadores de aire. Esta técnica ayuda a ahorrar energía y permitir que áreas de escasos recursos se beneficien.
La biomímesis también ha dado paso a varios avances tecnológicos. Por ejemplo, de las alas de las mariposas y de cómo estas reflejan la luz, surgieron ideas para desarrollar pantallas de tabletas electrónicas que ahorran energía.
Asimismo, estudiar cómo se comunican los murciélagos ha permitido generar bastones para personas no videntes que ayuden a no tropezarse gracias a su sistema de radar. Por la misma línea, al estudiar el llamado de los delfines, que utilizan frecuencias marinas para orientarse y comunicarse, ha aportado a crear instrumentos para guiar embarcaciones y detectar terremotos submarinos.
Incluso, también los tiburones nos han ayudado ya que estos sirvieron de inspiración para la idea de desarrollar uniformes para nadadores que fueran más eficientes y redujeran la resistencia en el agua igual que la piel de estos animales.
Estos son solo algunos ejemplos de muchísimas formas en las que la naturaleza nos ha servido de guía para desarrollar medidas que nos ayuden a ser más eficientes.
Les exhorto a buscar más información acerca de la biomímesis y a indagar distintas opciones que ayuden a conservar nuestros ecosistemas, nuestra naturaleza y a proteger los bienes y servicios que obtenemos de ella porque nosotros no solo nos inspiramos de ella, sino que dependemos de ella para nuestro bienestar.
Agradezco a Para la Naturaleza y su personal por introducirme a este concepto en su “Feria Para la Naturaleza 2017” el pasado 22 de abril.