Aunque el cáncer colorrectal es el segundo tipo de cáncer que más muertes causa entre hombres y mujeres en Puerto Rico, también es uno de los que mejores probabilidades tiene de manejarse si se detecta a tiempo.
Entre los años 2006 al 2010, se diagnosticaron en la Isla a 948 hombres y 788 mujeres con cáncer colorrectal. Para el año 2010, según datos del Registro de Cáncer de Puerto Rico, la prevalencia de sobrevivencia de cáncer colorrectal aquí fue de 7,431 personas.
Una persona a la que se le detecte el cáncer en una etapa temprana o inicial, antes de que se propague, podría tener una tasa relativa de sobrevivencia a cinco años de hasta un 90 por ciento. Sin embargo, sólo alrededor de cuatro de cada 10 casos de cáncer colorrectal se descubren en dicha etapa inicial. Cuando el cáncer se ha propagado fuera del colon o del recto, las tasas de supervivencia son más bajas, según datos de la American Cancer Society.
Las investigaciones científicas señalan que nueve de cada 10 casos detectados con cáncer colorrectal son prevenibles. Una alimentación saludable que incluya el consumo de verduras y frutas, además de ejercicios, pueden ayudar a prevenir esta enfermedad.
Por otra parte, el alto consumo de grasas y carnes rojas, el fumar y el exceso del consumo de alcohol aumentan el riesgo de un diagnóstico positivo a cáncer colorrectal.
Las pruebas de detección temprana también juegan un papel muy importante. Estas pruebas ayudan a la detección y remoción de pólipos, entiéndase, crecimiento similares a uvas en el revestimiento del colon y el recto. Lo que ayudaría a disminuir el riesgo de cáncer colorrectal.
Si usted tiene entre 50 y 75 años es importante que consulte a su médico para hacerse una prueba de detección anualmente. Si tiene más de 75 años consulte a su médico si es necesario realizársela.
Una de las pruebas más conocidas para la detección del cáncer colorrectal lo es la colonoscopia, un procedimiento en el que el especialista puede visualizar el colon y, si es necesario, remover pólipos que pueden convertirse en cáncer. También está la prueba inmonuquímica fecal conocida como FIT o FOBT por sus siglas en inglés. Esta es una prueba de alta sensibilidad para la detección de sangre oculta en la materia fecal que puede realizarla usted mismo desde la comodidad de su hogar. Su médico podría recomendarle que siga una dieta especial antes de la prueba. El médico le daría las instrucciones y materiales necesarios para que usted mismo tome la prueba. Se le podría pedir que repita esto algunas veces durante sus deposiciones (materia fecal). Luego, llevaría la muestra al médico o al laboratorio. Esta prueba debe hacerse una vez cada año.
Señales y síntomas
Según información del Centro de Control de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), el riesgo de padecer de esta condición es mayor si:
- Usted o un pariente cercano ha tenido pólipos colorrectales o cáncer colorrectal.
- Usted tiene enfermedad inflamatoria intestinal, como la enfermedad de Crohn o colitis ulcerativa, entre otras.
- Usted tiene algún síndrome genético, por ejemplo poliposis adenomatosa familiar (PAF) o cáncer colorrectal hereditario no polipósico (también conocido como Síndrome de Lynch).
No espere a tener síntomas para realizarse la prueba, no siempre el cuerpo le dará señales de que algo no anda bien. En caso de presentar sangre en la materia fecal, dolor de estómago o cólicos persistentes y/o pérdida de peso sin razón conocida acuda a su médico. Recuerde que estos síntomas no son exclusivos del cáncer colorrectal.
Nunca olvide que la prevención es su mejor alternativa. Después de todo, nadie lo cuidará mejor que usted mismo.