En los últimos años, se ha cuestionado la producción y el consumo excesivo de las noticias de espectáculo en los medios de comunicación del País. Existen sectores preocupados ante esta situación y no es para menos; el que los medios trabajen cuantiosas noticias dedicadas a temas superficiales es motivo de consternación. ¿Por qué se producen tantas noticias de espectáculo? ¿A los periodistas realmente les interesa trabajar este tipo de temas? ¿Los lectores prefieren éstas temáticas sobre otras?
Según Mario Roche, periodista y profesor de la Escuela de Comunicación en la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras (UPR-RP), antes de la llegada de la llamada convergencia mediática las decisiones de los temas que se iban a trabajar recaían en los directores y editores del medio, según lo que ellos entendían eran los temas de mayor interés público. “Un medio partía de la premisa de que dichos temas iban a despertar interés en la audiencia”, explicó el profesor.
Sin embargo, hoy día la tecnología permite obtener datos que les facilita a los medios de comunicación identificar cuáles son las categorías preferidas y las notas más leídas por el público.
Roche explicó que en la actualidad la selección de los contenidos de un medio recae en las preferencias del público. “La decisión de determinar qué es o no noticia ya no pasa únicamente por el criterio [de editores] sino por el público y las interacciones [del medio] con el público”, explicó.
“Aunque no te guste lo tienes que cubrir, es tu trabajo”
Lorraine Martínez, periodista independiente, coincide con las declaraciones del académico. “Los lectores en Puerto Rico son los que determinan en gran manera los contenidos que tenemos hoy y, al suceder esto, vemos que el contenido es fatal. Las primeras planas siempre las ocupan la farándula, noticias que no necesariamente son los temas de los que tenemos que estar informados”, comentó la periodista.
En ocasiones se da por hecho que a los periodistas les gusta cubrir eventos de farándula, aunque necesariamente no es así. “Muy a menudo me he topado con la situación de que tengo que cubrir un acontecimiento con el que no me siento cómoda cubriendo. El periodismo tiene sus altas y bajas, y una de las bajas es que no te guste lo que tienes que cubrir pero es tu trabajo”, enfatizó Martínez.
Diálogo conversó con Hermes Ayala, otro periodista del País que lleva casi 19 años laborando para diferentes medios, quien comentó que no le gusta cubrir frivolidades de artistas específicos que, “cada vez que les pasa algo hay que sacar algo de ellos”.
Además, piensa que los medios tienen la oportunidad de brindar conocimientos al público. “Una cosa es hacer periodismo y otra cosa es embrutecer. O sea, ¿en qué abona al periodismo un artículo sobre la Vampi? Es un fenómeno de las redes sociales pero de ahí no pasa”, argumentó. Ayala piensa que a la hora de tomar la decisión de leer una noticia, el lector debe cuestionarse qué aportación le dará la misma.
Priorizar el espectáculo es “una forma torcida de someterse al público”
Aiola Virella, directora del periódico Metro Puerto Rico, reconoció que, en el medio que dirige, las noticias de espectáculo, por lo regular, son las más leídas y comentadas por el público.
“La categoría de entretenimiento siempre se destaca entre las más leídas. Yo te diría que de diez noticias, cinco son de entretenimiento. Por ejemplo, el día que degradaron los bonos [de Puerto Rico] esa noticia no estaba en las primeras diez notas más leídas; la nota más leída fue sobre cuando Natalia Rivera se había caído en Pégate al medio día”, relató Virella.
Según Oscar Serrano, periodista, abogado y cofundador del Centro de Periodismo Investigativo (CPI) y NotiCel, es errado que algunos medios se sometan a lo que el público quiere.
“Si le dan tres o cuatro días a un reportero para que esté detrás de un artista, pero no para que averigüe un asunto importante del Gobierno, es una agenda y una forma torcida de someterse al público”, sostuvo Serrano.
Cuando se le cuestionó por qué los medios no realizan investigaciones a profundidad, considerando que se ha llegado a pensar que a los lectores no les interesa, Serrano planteó que es un crimen decir que al lector no le interesa las investigaciones a profundidad. Según él, el detalle está en utilizar las técnicas necesarias para llamar la atención de la lectoría.
Estas entrevistas evidencian que la responsabilidad de lo que se publica en los medios no recae solamente en el medio ni en los periodistas, sino también en las preferencias del público. Para que haya un periodismo que informe sobre acontecimientos y noticias relevantes y necesarias, debe de haber un público mayoritario interesado en leerlas.