
SOBRE EL AUTOR
Por: Paula María Arribas
“Si me dan pasteles, dénmelos calientes”, cantaban los jíbaros mientras marchaban frente a los ojos del pianista estadounidense Louis Moreau Gottschalk en su visita a Puerto Rico en 1857. Souvenir de Porto Rico fue el resultado de esa marcha y ahora es una de las danzas más interpretadas de la música puertorriqueña.
Ese evento histórico vino a mi memoria durante la marcha universitaria efectuada el pasado jueves 5 de marzo. “¡Todos los recintos, un solo país!” era la consigna de la voz del estudiantado puertorriqueño ese día. Entonces, ¿qué será lo más interpretado de esa nueva voz que se levantó esa fecha? Un junte histórico. Un junte verdaderamente histórico. Excepto que la prensa se enfoca en el hecho de que algunos vándalos dañaron un patrimonio nacional: El Capi. Lo aceptaré, como historiadora de arte –y artista, de paso- esa arquitectura neoclásica del Capi es bien exquisita, de más está mencionarlo. Pero el “pensar” de los que ahí se reúnen pues ni neoclásico ni renacentista. Pa’ mí, es un pensar del neolítico tirando pa’ características paleolíticas.
Ese jueves no fue uno usual, por lo menos ninguno en toda mi vida universitaria. Ese jueves nos reunimos el futuro inmediato de este país a protestar sobre los que son el bastardo presente. Las universidades del país nos uníamos con fervor a una sola voz: lucha sí, entrega no. La marcha salió del Sixto Escobar hacia el Capi. Mientras estaba sudando y cogiendo sol, miré hacia mi lado izquierdo y había un edificio cayéndose, literalmente, en cantos. Me tomó de sorpresa saber que ese edificio servía como una escuela elemental. Los niños de esa escuela se citaron en el balcón con cartulinas y uniéndose a la voz de sí a la lucha. Pero se estaba cayendo la escuela, y los niños gritando a viva voz. Así se está cayendo “la institución” y mucho peor, nuestra educación.
El Capi no se está cayendo en cantos y ahora hay que usar fondos del pueblo para arreglar la puerta que dice NO AL IVA. ¡Hay que jo…! La escuela se cae en cantos y el gobierno coge aire. Los niños me hicieron llorar. Me hicieron recordar que esta lucha no solo es por mi educación sino por la de ellos. “¡Yo lucho por ustedes!”, era lo único que podía gritarle. Pero aun así, su escuela se estaba desmoronando y yo seguía marchando. “¡Decimos no, no, no, no, no nos pararán y el que no crea que haga la prueba, no nos pararan!”
En todas esas horas que nos dimos cita piqueteando, gritando y sudando, tenía muy presente en el pensamiento a mi ex pareja. Pensé que no solo marchaba por los niños, ni tampoco por la educación de mis amistades, ni mi educación, sino que también marchaba por su educación. No estaba ahí, de hecho no creo que sepa lo que es la lucha (de ningún tipo). Pero me uní a la lucha con mis compas de Mayagüez, Bayamón, la IUPI, Artes Plásticas, UMET, Inter, Sagrado… No hubo un “Once recintos, una UPR” ni un “Soy la Inter, y tú ¿qué esperas?” ni mucho menos un “Te queremos en Sagrado”. El jueves cinco de marzo hubo un “Menos recortes, más educación. Que le quiten privilegios a la administración”. Mi cartel decía “IVA= Medida DestructIVA” y estuvo como anillo al dedo. Pero fue histórico porque ya no éramos los mafuteros y huelguistas de la iupi, éramos los protestantes de la educación de este país.
Mucha gente se unió en solidaridad y aunque la prensa tergiversa lo que ocurre, todos estábamos claro de lo pacífico que se dio el junte con to’ y la fuerza de choque. Estuve ahí, junto con personas maravillosas, para hacer historia. Estoy viviendo para hacer historia, como el slogan de mi clase graduada. Pero una historia que ojalá sea incluida en los libros de textos de las escuelas elementales, intermedias y superiores para que dejen de estar todavía hablando de la colonización española y los indios taínos. Así que, gente, todos los recintos, un solo país. No necesitamos ser jíbaros para que nuestra voz sea una de las más interpretadas. ¡Qué la crisis la paguen los ricos!
La autora es estudiante de Educación e Historia del Arte de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras.