#Elecciones2016. A pocas semanas de las elecciones generales y en medio de un momento crítico para la economía y el desarrollo social de Puerto Rico, Diálogo conversa con los seis candidatos a la gobernación. La serie de entrevistas se estará publicando cada domingo. Conoce el sentir de los candidatos con relación a la UPR y sus propuestas para trabajar con la junta de control fiscal.
Digamos que para la licenciada Alexandra Lúgaro el tiempo de administrar millones de dólares en fondos federales desde compañías privadas ligadas al Departamento de Educación (DE) ya pasó a la historia.
Ahora, Lúgaro está concentrada en una misión que no tiene mucho que ver con propuestas educativas cuyos frutos han dejado –y todavía dejan– mal sabor de boca en algunos sectores del magisterio nacional.
La candidata independiente a la gobernación de la isla, manifestó a Diálogo que para ella la educación es un derecho humano como cualquier otro y, de paso, reconoció que “en Puerto Rico la educación siempre se ha visto desde el punto de vista económico”.
La abogada resaltó que la educación es “el eje central” de su plataforma gubernamental. Y no solo eso, sino que –como derecho humano–, bajo su gobierno será visualizada desde una perspectiva social, pues a su entender, la educación es el canal para el levantamiento social de cualquier nación.
Ante eso, y considerando su trayectoria empresarial en el DE, Diálogo quiso saber dónde Lúgaro ubica a la Universidad de Puerto Rico (UPR), en el contexto de su propuesta de trabajo como aspirante a la gobernación. Si su definición de universidad responde a un modelo de inversión socioeconómica o, simplemente, responde a un modelo empresarista.
“El capital humano es el activo principal que tiene un país y es en la universidad donde se desarrolla ese capital humano. Así que el concepto que yo tengo de la universidad y al que aspiro, es que Puerto Rico pueda tener una universidad pública y gratuita. En estos momentos sabemos que eso no es posible con las finanzas públicas como están. Sin embargo, Puerto Rico –si se organizara– sería un país que sí pudiera aspirar a una universidad pública y gratuita”, dijo.
La licenciada aseguró que siempre ha hablado de la educación como el vehículo principal para que Puerto Rico pueda enfrentar, no solo sus problemas económicos, sino también sus problemas sociales. Asimismo, destacó que dentro de esa oferta educativa la transformación de la UPR es fundamental.
Para Lúgaro, la organización del país requiere de la transformación del componente universitario del Estado. Declaró que esa transformación depende de cómo la universidad se reinvente, de cómo la universidad se despolitice y de cómo se elimine la burocracia administrativa que, al igual que en el gobierno, ha afectado esa flexibilidad que debe tener una universidad a la hora de adaptarse a los retos de la actualidad.
Además, para la licenciada es de vital importancia estabilizar todo el andamiaje operacional de la UPR que, a su modo de ver, se ha afectado durante el cambia-cambia bipartidista. Para eso, de acuerdo con Lúgaro, será fundamental que la universidad “empiece a proveer las herramientas reales que los estudiantes necesitan para conseguir empleo y para poder enfrentar los retos del mundo moderno”.
¿Consolidación de recintos?
Si usted fue de los que, luego del primer debate entre los aspirantes a la gobernación, tuvo la valentía de sentarse frente a su televisor para sintonizar el segundo encuentro, seguramente, recordará que Lúgaro se posicionó a favor de la consolidación de unidades de la UPR, así como de la privatización de la Autoridad Metropolitana de Autobuses (AMA), a pesar de que aclaró que no sería una primera opción.
Pero tal parece que todo fue un malentendido. Según Lúgaro, aquella noche ella no planteó nada sobre la consolidación de recintos.
“Se ha dicho en los medios que yo he hecho una propuesta para consolidar recintos y creo que de forma malintencionada. En un debate reciente se me preguntó si yo contemplaría la consolidación de recintos y yo quise hablarle a la gente con la verdad. Dije que sí. Pero fui bien enfática en que la universidad se tiene que transformar, que se tiene que reinventar y que de ocurrir esa transformación y reinvención no habría que consolidar”, aseguró.
“Pero yo no quiero decirle a la gente que no voy a consolidar recintos y de momento toparme con que es insostenible el cuadro financiero de la universidad, para que me colapse la UPR. El problema entonces estriba en qué hay que hacer para lograr esa transformación”, subrayó.
La egresada de la University High School (UHS) y de la UPR, añadió que por décadas la política tradicional ha vendido alternativas y sueños incumplidos. Y aclaró que el cambio verdadero del país no estriba única y exclusivamente en la propuesta.
“Todos los candidatos pueden tener excelentes propuestas para la Universidad de Puerto Rico, pero mientras ese sistema sea dócil, que esté sujeto al vaivén político, a que cada cuatro años hay que cambiar la política pública de la universidad, a que lleguen nuevos aparatos de gente a botar a los que están para colocar a los de ellos, a excluir proyectos para anteponer proyectos propios y beneficiar los intereses que les dé la gana, pues aquí muchos candidatos seguirán hablando sin acción”, destacó.
De igual modo, Lúgaro anotó que los intereses que están financiado las campañas políticas tradicionales que terminan incumpliendo con la UPR son las universidades privadas, que según dijo “son las que terminan recibiendo todos los contratos del gobierno, cuando los recursos académicos más preparados están en la UPR”.
Por otro lado, también destacó que es necesario ver cómo el financiamiento y el inversionismo político han incidido en el proceso de colapso de la UPR y en el debilitamiento de la idea de que la universidad del Estado sea una universidad pública.
- Diálogo: ¿Y cuál es el plan que usted propone para romper con el intervencionismo político-partidista en la UPR?
- Lúgaro: No podemos despolitizar a Puerto Rico en cuatro años. Yo siempre he hablado de comenzar por dos áreas fundamentales: educación y desarrollo económico. Luego de eso nos movemos a despolitizar el resto del país, porque cada agencia, cada institución está altamente politizada. ¿Por qué educación y desarrollo económico? Porque son las dos áreas que Puerto Rico necesita urgentemente ver progresar. Eso solamente lo vamos a ver cuando la educación y el desarrollo económico no estén sujetos al vaivén político, cuando podamos ver una UPR que pueda implementar una estrategia consecutiva por ocho, 12 o 16 años, cuando la UPR esté libre de influencias de personas que vienen a cumplir sus propios intereses. Yo estoy bien segura de que, en el caso de la universidad, podemos comenzar con un sistema de méritos donde las personas no estén por sus palas políticas.
- Diálogo: ¿Y eso cómo se hace?
- Lúgaro: Aquí en Puerto Rico nos hemos acostumbrado a la falta de transparencia del gobierno, que hacen las cosas tras bastidores y luego vienen a hablarnos de crisis, a hablarnos de las medidas de austeridad y de lo que tenemos que hacer para pagar los platos rotos de unas personas que jamás nos hablaron claro. Yo creo que hay que empezar a hablar, a dar a conocer todo lo que pasa en la universidad, que las personas sepan dónde está el dinero, cuánto se recauda, a dónde van esas sumas de dinero. Tiene que haber una reglamentación y una tecnología que nos permita saber a dónde van nuestros recursos y creo que ese será el mayor escudo ante la corrupción.
Garantías sin maquinaria política
De acuerdo con Lúgaro el no tener una maquinaria política es, precisamente, lo que va a garantizar que su proyecto gubernamental pueda ser realidad. A su entender, las maquinarias políticas son las que han llevado a la gente sin preparación a ocupar puestos gubernamentales.
“Toda la gente que anda con Ricky [Rosselló, candidato novoprogresista] y con David [Bernier, candidato popular], que cada vez que los vemos andan en grupos de 30 o 40 personas, es la misma gente que terminan acomodando en el gobierno. Así es como funcionan las cosas aquí”, manifestó.
“Cuando hablamos de educación, cuando hablamos de salud, del ambiente, yo creo que algo bien importante para el país va a ser la implementación de una política pública científica. Aquí tenemos políticos tomando decisiones por motivos políticos, tenemos personas que lo que saben hacer bien es bailar detrás de una pick-up, tomando las decisiones de nuestra educación, de nuestra salud, de nuestro ambiente. Esas personas tienen que tener la capacidad y la preparación”, reiteró.
Con relación al impacto de trastocar las estructuras administrativas de la UPR, que por tantos años han mantenido a la institución atada a modelos político-partidistas, Lúgaro se limitó a reconocer que no lo ha podido medir con estadísticas certeras, pero dio fe de que lo reconoce todos los días cuando sale a la calle.
- Diálogo: Considerando que de ser electa gobernadora tendrá que enfrentarse a la imposición de una junta de control fiscal, ¿cómo explica su plan desde el punto de vista económico?
- Lúgaro: Si vemos esto desde el punto de vista económico a Puerto Rico se le va a exigir –siguiendo la trayectoria de este tipo de juntas en otras ciudades como Detroit, Nueva York y Washington– que hagamos más con menos. Para el 2030, de cada dólar que el país genere, 41 centavos van a ser dirigidos para pagar los planes de retiro. Quiere decir que nos quedamos con 59 centavos para rendir todos los servicios públicos del país. Ese dinero no da. Cuando se me pida como gobernante corra este país con un 10% menos, con un 15%, con un 20%, yo voy a tener que establecer mis prioridades: desarrollo económico, educación y reformar el sistema de gobernanza. Si mi plan fiscal o mi presupuesto incluyen partidas que no tienen que ver con desarrollo económico, educación o reformar el sistema de gobernanza, esas no van a ser las prioridades. Por eso, tenemos que saber escoger una persona que ante esta junta sepa por dónde cortar.
Para Lúgaro el peligro más grande en ese proceso está representado por los partidos de “la vieja política”, que –a su entender– están atados a intereses particulares que imposibilitan la responsabilidad al momento de realizar recortes.
“Ellos no van a recortar por las personas que le financian las campañas, por el dueño de la incineradora o las aseguradoras médicas; van a comenzar recortando por la gente, porque ellos se deben ya unos intereses particulares”, aseguró.
Igualmente, la abogada identificó como prioridades inmediatas la estructura social de la isla, el sistema de salud, la educación y el acceso a la justicia. De igual modo, hizo énfasis en que urge romper con la mala distribución de fondos públicos en obras que cuyo único fin es “llenarle los ojos a la gente para que voten”.
¿Lúgaro neoliberal?
Diálogo también conversó con Lúgaro sobre la privatización de la Autoridad Metropolitana de Autobuses (AMA), la corrupción pública y las exenciones contributivas a las empresas foráneas. Veamos lo que dijo:
- Diálogo: Usted manifestó que estaba dispuesta a privatizar la AMA, a preservar las exenciones contributivas a las empresas foráneas y se ha levantado todo un debate sobre si Alexandra Lúgaro es neoliberal. ¿Es usted, en efecto, neoliberal?
- Lúgaro: Yo soy realista. La mejor descripción para mí es realista. Yo contesté con la verdad y les hablé de todas las cosas que podemos hacer en la AMA y lo que hay que hacer antes de tener que privatizarla. Yo no creo en la privatización. Pero en la medida que pasa el tiempo Puerto Rico abre las oportunidades para salvar ciertas agencias. En la Autoridad de Energía Eléctrica, desde el 1989 sabíamos que la autoridad iba a colapsar. ¿Qué hicieron los partidos? Siguieron subiendo los costos de energía, destruyeron la agricultura y la manufactura del país. Entonces, cuando hablé de la AMA fui real y les dije ‘miren, tenemos que hacer todo esto. Si hacemos todo esto la AMA seguirá siendo pública. Pero si no lo podemos hacer, yo no tengo problemas con la palabra privatización’. A mí no me da miedo hablarle a la gente con la verdad. Yo lo que quiero es que la gente cuando coja la AMA llegue a donde tiene que llegar y a la hora que tiene que llegar.
La licenciada destacó a su vez que mientras la corrupción continúe latente, el dinero seguirá siendo insuficiente. Además, resaltó la importancia de nombrar un secretario de justicia que investigue las querellas de mal manejo de fondos públicos, en lugar de engavetarlas, pues entiende que mediante esa estrategia sí habrán consecuencias reales para los infractores.
Con relación al asunto de las exenciones contributivas a las empresas foráneas, Lúgaró dijo que “cuando dentro de la economía cambias las condiciones de mercado que estaban preestablecidas antes de que se diera una inversión, desestabilizas el mercado”. Asimismo detalló que, de eso suceder, “creas una incertidumbre en el mercado y un freno sobre la inversión”.
“Las multinacionales llegaron a Puerto Rico porque habían unas reglas de juego preexistentes. Si tú le dejas saber al aparato internacional que en Puerto Rico las reglas de juego cambian, desmoronas la economía, porque la gente no vuelve a invertir. Lamentablemente, a las multinacionales establecidas no les podemos cambiar las reglas”, opinó, al tiempo que aprovechó para aclarar que toda nueva inversión extranjera se tiene que dar con reglas estrictas.
“En este momento lo que procede, en términos de finanzas y desarrollo económico, es no destruir la certidumbre del mercado. Ya tenemos suficiente con tener el crédito dañado como para que también la gente desconfíe de establecer negocios en Puerto Rico”, puntualizó.
A continuación, Lúgaro habla sobre su visión de lo que debe ser la UPR:
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