En la historia de la televisión en Puerto Rico, la producción de telenovelas ha fungido un papel protagónico. Desde Cristina Bazán, en la década de los ‘80, pasando por Señora Tentación en 1994, hasta Dueña y Señora en 2006, las telenovelas han contado con primeros actores locales, directores y técnicos, muy profesionales, que dieron vida a estas historias.
Sin embargo, en comparación con décadas pasadas, estas producciones han disminuido al punto que en la actualidad en las emisoras televisivas locales, predominan producciones extranjeras, realizadas por un elenco de actores extranjeros y desarrolladas en espacios que muy poco se parecen a la realidad puertorriqueña. ¿Qué paso?
Para el productor Carlos Durbayán, el problema radicó en que “la gente que dirigía en esa época los canales [que eran puertorriqueños] compararon los precios de costo de la producción de una telenovela puertorriqueña y decían que al mismo precio conseguían novelas extranjeras”.
De esta manera, explicó Durbayán, los dueños de los canales no tenían que hacer inversiones mayores, sumado a que muchos de estos directivos veían las producciones extranjeras “mejores”.
Con él coincidió la veterana actriz Alba Nydia Díaz, quien comentó que producir en Puerto Rico es difícil, ya que se observa con mejores ojos lo que viene de afuera, sin importar la calidad y cantidad de talentos locales que tengamos en la Isla.
De hecho, según acotó Durbayán, Puerto Rico cuenta con todo lo necesario para realizar este tipo de producciones.
“Dificulto que haya un país con tanto talento en proporción a la población como Puerto Rico. Es increíble, cuando voy a Miami y visito los canales el 40 por ciento de los técnicos y libretistas son los puertorriqueños que se hicieron en las telenovelas puertorriqueñas”, mencionó el productor.
¿Afecta la falta de taller a la Academia?
La Universidad siempre ha sido un espacio que proporciona profesionales a la movida laboral de las sociedades. Pero, ¿qué sucede cuando alguna disciplina, como la actuación en telenovelas, carece de espacios concretos para la cantidad de estudiantes que se gradúan?
En el caso del Departamento de Drama de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras, ante la falta de talleres cinematográficos o melodramáticos en la Isla, se da prioridad la actuación teatral.
Y es que, según explicó el director del Departamento, el profesor Dean Zayas, “el departamento de Drama no puede proveer alternativas prácticas porque en Puerto Rico no existe una industria de cine ni de telenovelas”.
“Es absurdo decir que el Departamento no ofrece alternativas prácticas, no se puede ofrecer alternativas prácticas en donde no existe la industria, porque ¿para qué?”, mencionó Zayas.
Sin embargo, entre su claustro se barajean otras cartas. Ese el caso de la profesora y actriz Julia Thomson, quien dijo a Diálogo Digital que “seria bueno crear un curso para cine y televisión, [pues] beneficiaría mucho a los estudiantes que tuvieran la oportunidad de tener ese espacio para que puedan ver lo que es tener el contacto con la cámara”.
Con la profesora Thomson coincidió el estudiante egresado del Departamento de Drama, Roberto C. González, quien reveló que en su preparación como actor en la UPR nunca le enseñaron a trabajar para telenovelas ni para cine.
González recordó que tuvo la oportunidad de participar en una serie de televisión y al comenzar a grabar, el director lo detuvo y le dijo que bajara un poco “que no es teatro”.
De modo que, dijo el egresado, “si en el departamento de Drama me hubieran preparado en cuestiones de los diferentes estilos en los medios hubiese podido decir que estaba totalmente preparado”.
Por el contrario, Gabriela Bonet, estudiante de quinto año del Departamento, piensa que la preparación en el Departamento es muy completa.
Según dijo, tuvo la oportunidad de ir a Escocia y comparar su educación con la de otros países y notó que la de aquí es muy buena. Sin embargo, a preguntas respecto a si se siente preparada para trabajar en telenovelas o cine, confesó que le falta muchísimo por aprender.