LUQUE, Paraguay- Los ministros del Mercosur dieron hoy en Paraguay su respaldo al empleo de monedas locales en sustitución del dólar para el comercio intra-regional, aunque reconocieron los escasos avances para la integración del bloque en medio de la crisis económica global. Ministros de Economía, presidentes de bancos centrales y cancilleres se reunieron en las afueras de Asunción para pulir los detalles del encuentro que mantendrán el viernes los mandatarios de Argentina, Brasil, Uruguay, Paraguay, Bolivia y Chile. El acuerdo sobre el uso de las monedas locales en las transacciones comerciales posibilitaría a los países estar más preparados para enfrentar los efectos de la crisis, pero representaría apenas un tema de consenso en medio de un pesimismo generalizado sobre el estado del bloque comercial. La delegación de Venezuela consideró que el uso de las monedas locales, que busca reducir el peso del dólar como moneda de referencia y tiene como antecedente una experiencia entre Argentina y Brasil, era un ejemplo a seguir. Al respecto, el ministro de Economía de Argentina, Amado Boudou, dijo que “es un período atípico, por la crisis internacional, para evaluar el funcionamiento del Mercosur. Todos los países trabajaron para sostener sus economías internas”. “Hay que seguir trabajando en la integración que venimos llevando adelante para el comercio bilateral o dentro del Mercosur que ya estamos teniendo con Brasil para trabajar con monedas locales, y erradicar el dólar del comercio intra-Mercosur”, dijo el ministro Boudou. En tanto, las diferencias comerciales entre las economías mayores del bloque quedaron nuevamente al descubierto tras el reclamo de los industriales de Brasil por la adopción de parte de Argentina de licencias no automáticas en sus importaciones. La nueva disputa entre los socios más poderosos del bloque llevó a programar un encuentro bilateral entre los presidentes de Argentina, Cristina Fernández, y de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva en la tarde del viernes, dijo una fuente de la presidencia brasileña. El reclamo de la Confederación Nacional de la Industria, que pidió denunciar a Argentina ante la Organización Mundial de Comercio, “ciertamente estará en la agenda”, dijo la fuente.
En el marco de la cumbre, la reunión bilateral entre los cancilleres de Perú y de Bolivia concluyó con un acuerdo para dejar atrás las disputas de los últimos dos años originadas por diferencias sobre pactos comerciales de la Comunidad Andina, de la que ambos son socios. En junio pasado, en el momento de mayor tensión de la relación, Perú retiró a su embajador en La Paz. “Están dadas las condiciones para que el embajador de Perú, Fernando Rojas, pueda retornar a La Paz (…)”, explicó el canciller peruano, José García. Pero las negociaciones del Mercosur no tuvieron el mismo final. Los funcionarios no llegaron a un acuerdo para eliminar el doble cobro del Arancel Externo Común, una medida con la que el Mercosur avanzaría hacia la conformación de una unión aduanera plena. En las reuniones realizadas en la sede de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) tampoco se llegó a un consenso sobre la conformación del Parlamento del Mercosur por el rechazo paraguayo a una representación proporcional a la población y convocaron a un encuentro en 30 días para tratar el tema en exclusividad. “Estamos contribuyendo a que nuestras sociedades consideren efectivamente que el Mercosur está en un momento muy grave”, dijo en el plenario el vicecanciller argentino, Alfredo Chiaradía. Las críticas apuntaron además a la falta de medidas conjuntas para enfrentar la crisis. “Hemos respondido con medidas proteccionistas unilaterales, sin coordinación regional alguna. Como resultado, tenemos hoy día el aumento del descrédito del Mercosur”, dijo el canciller paraguayo, Héctor Lacognata. Sin embargo, los roces por medidas unilaterales ante la crisis no pondrían en riesgo otros avances. “Estamos en una coyuntura excepcional, pero nadie pone en duda los beneficios de estar en el bloque”, explicó a Reuters el argentino Carlos Alvarez, presidente de la Comisión de Representantes Permanentes.
Además de la búsqueda de una mayor fluidez comercial, los presidentes intentarán acordar modos de aumentar la presión sobre el Gobierno de facto que desalojó del poder a Manuel Zelaya a finales de junio, un tema que se terminará de discutir el viernes. La primera mandataria invitada que llegó a Paraguay fue la chilena Michelle Bachelet, quien, luego de un encuentro con su colega paraguayo, Fernando Lugo, se refirió a la crisis que atraviesa Honduras. “Creemos que ahora corresponde a la OEA adoptar todas las medidas adicionales (…) para generar condiciones que permitan que el hermano pueblo hondureño pueda efectivamente recuperar la democracia”, dijo Bachelet. Por su parte, Argentina presentaría propuestas para aumentar la presión internacional sobre el Gobierno interino de Honduras, al tiempo que impulsará un pronunciamiento sobre la distribución de vacunas contra la nueva cepa de la gripe N1H1, que afectó fuertemente al cono sur. El jueves, los ministros de Salud y Desarrollo Social de la región decidieron impulsar acciones coordinadas “a efectos de fortalecer medidas que garanticen la debida atención de la población contra los efectos ocasionados por emergencias sanitarias (…) como la influenza humana A”, según una declaración conjunta.
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