Cada vez son más los que rompen tabúes. Los que no le temen a la sexualidad. Los vocablos sexo, placer y lujuria ya pasan a ser ejecuciones sudadas en los pensamientos y experiencias de muchos. Estas palabras calan en las mentalidades de la mayoría, y representan el proceso de desactivar inhibiciones orgásmicas. Referirse a la excitación es navegar sobre aguas profundas y múltiples. Hay quienes apuestan por los famosos “one night stand”. Relaciones de una noche de satisfacción, para tal vez no volverse a ver. Están los que se autogratifican, los que recurren a la pornografía, los que se consideran tradicionales o medulares, los que practican orgías, juegos o se disfrazan… Pero, ¿los once minutos de placer, a lo Paulo Coelho, son suficientes para explorar el cuerpo y el gozo que se siente en el junte de cuerpos o en la satisfacción individual? Y concretamente: ¿estará el mundo enterado de los misterios ocultos detrás del placer femenino? ¿Sabremos qué es un orgasmo femenino? Un ente se ha encargado de emprender un viaje exploratorio a través de un túnel oscuro, el cual paso a paso permite la entrada del visitante que se acerca a pedir morada, aunque sea por varios minutos. Un barco es el transporte, el cual poco a poco se va acercando a la entrada principal que encierra un tesoro que está a punto de ser encontrado. Entre juego y juego sube la marea, y las aguas se van tornando un poco turbulentas. Pero el capitán sabe que todavía no hay peligro, aún el océano está bajo control, y no hay posibilidades de naufragio. Es así como el viaje continua. Poco a poco la embarcación acaricia las rocas, y cada vez se adentra más en aquel mar que comienza a azotar con furia la estructura corpulenta de aquel navío. Lluvia, truenos y relámpagos comienzan a caer de aquel firmamento hecho piel, pero la embarcación va decidida a encontrar aquel deseo. El timón no cambiaba su dirección, iba directo al cielo mientras los gemidos de una estruendosa tormenta aumentan con cada segundo. La entrada hacia aquella cueva desconocida, se torna cada vez más húmeda y las olas contraen con más fuerza la embarcación hacia su interior como si no la quisieran dejar salir. El movimiento de las olas aumenta, haciendo creer que el barco se hundirá en cualquier segundo. El ruido se vuelve más intenso a la vez que aumenta con la fuerte marejada. De repente surge lo inesperado. Una ola gigante se levanta sobre aquella embarcación, tal parecía que se han abierto las compuertas de una represa. El perseverante barco llegó al punto. Tiene el tesoro. Unos minutos más y listo, la tormenta cesa. Puede ser que se sienta fatiga en el ambiente. Mas todo va volviendo a la calma. Como el mar bravío e incontrolable, así es ella en su mundo de placer. Y es que algunas mujeres lo califican como “maripositas en la cosita”, mientras que otras lo catalogan como la entrada al mundo celestial donde, aunque sea por varios minutos, todo es perfecto. Pero sea lo que sea, cada cual tiene su propia experiencia orgásmica. Sin embargo, ¿qué hay detrás del orgasmo femenino? Ese proceso en el que la mujer llega a su mayor estado de placer, muchas veces es desconocido tanto por los hombres como por las mismas mujeres. Algo desconocido para muchos es que una mujer puede llegar a su clímax con simplemente contraer los músculos de su vagina. No siempre hace falta un compañero o compañera para que sienta placer, sólo basta que la fémina paute una cita con su cuerpo y comience a explorar cuáles son sus puntos más sensitivos. Desde los tiempos de Eva, se ha tildado a la mujer de ser la tentación del hombre. Aquella que le dio a probar a Adán la fruta prohibida. Cabe preguntarse, ¿Eva habrá tenido un orgasmo? ¿Se habrá tocado alguna vez? En tiempos pasados, en los cuales hablar de sexo era un tabú, las mujeres guardaban en silencio sus deseos reprimidos. Sin embargo, no es de sorpresa para nadie que hoy día la sexualidad femenina ya no es un secreto, porque han sido muchas las que han decidido dar a conocer sus deseos carnales. Deseos que en la mayoría de las ocasiones, empiezan en la bañera o en la oscuridad de una habitación. Hasta que finalmente se abren las compuertas del lago placentero. Es así como la masturbación ha dejado de ser un tabú según el documental “Female Orgasm Explained”, el cual tiene como propósito explicarle al mundo de qué se trata el orgasmo femenino. Es en este trabajo audiovisual, donde se explica que las mujeres que se masturban se conocen tan bien que saben exactamente lo que hacen al frotar suavemente esa pequeña “habichuelita”, como algunas suelen llamarle, en la que se encuentra la mayor excitación. Todo comienza con su amigo inseparable e insaciable, el clítoris, en el momento en el que la mujer decide explorar sus misterios más profundos y toma el tiempo de conocer qué le gusta y cómo le gusta. Exploración que comienza desde los diez años aproximadamente de acuerdo a las declaraciones emitidas por las entrevistadas en el documental. “La mujer conoce cómo tocarse gentilmente y sabe hasta qué punto llegar”, indicó una joven francesa, la cual formó parte de la investigación. Los datos ofrecidos por el video investigativo demuestran que durante la realización de un cuestionario sobre el comportamiento sexual, menos del 50% de las mujeres que participaron, confesaron haberse masturbado alguna vez. Y es que la masturbación es una pieza clave en la excitación femenina, la cual en palabras crudas se basa en la estimulación del clítoris. Pero todos aquellos que creen que el clítoris es la única excitación de la mujer, se equivocan. Este pequeño granito no es más que el comienzo de una travesía orgásmica. Por lo que sexólogos indican que es importante que la mujer conozca su cuerpo y su propio placer para que así pueda compartirlo con su pareja, y aprendan al unísono cómo una mujer llegar al máximo placer. Orgasmo Femenino 101 En la clase de Orgasmo Femenino 101 se explica que este proceso consta de tres pasos los cuales culminan en una electrificante sensación. Todo empieza con lubricación y excitación; luego el útero se levanta y la vagina se expande causando que el libido cambie de color; es ahí cuando llega el orgasmo o los múltiples orgasmos a raíz de contracciones entre la vagina y el ano. Finalmente ocurre el terremoto vaginal ocasionando que el río se salga de su cauce o tal vez se pueda comparar con un volcán en erupción. Una vez terminada la explosión volcánica, la vagina y todos sus componentes vuelven a su estado normal tal y como si hubieran sentido una inmensa liberación. Pero si pensabas que al casarte, no volverías a tocarte, te equivocaste. Mujeres entrevistadas para este documental indicaron que a pesar de estar casadas y llevar una vida sexual satisfactoria, no dejaban de tocarse porque se había vuelto una necesidad en sus vidas. Necesidad que para ellas significaba estar en control de su sexualidad. “Female Orgasm Explained”, presentó que las mujeres al masturbarse esconden en su mundo placentero, fantasías que incluyen hombres enmascarados, “threesomes”, y hasta el experimentar con personas del mismo sexo. Fantasías que en ocasiones se vuelven realidad, y en otras sólo permanecen en la imaginación candente de sus encuentros sexuales con sus cinco dedos y un amigo en el baño, en la oscuridad de su cuarto. Es aquí donde las mujeres emprenden un viaje de placer en el cual desean ser sometidas por alguien, y desean ser poseídas con locura y pasión cual si fuera una “violación consentida”. Según las declaraciones emitidas por sexólogos entrevistados en el documental, las fantasías sexuales estimulan la imaginación erótica y preparan al cuerpo para una sesión de placer. Muchas mujeres se tornan violentas durante el acto sexual, y es que se ha comprobado que en la batalla sexual las mujeres pueden ser igual o más traviesas, apasionadas y atrevidas que los hombres. Pero lejos del clítoris y los menesteres vaginales, existen otras áreas sensitivas alrededor del cuerpo que se encuentran a medida que la pareja o la misma mujer se va explorando durante el coito. Caricias en el cuello, suspiros o mordidas en la oreja y besos apasionados son algunas de las zonas estimulantes que ayudan a que la mujer llegue a su “punto G”. Zonas erógenas que también contribuyen al alcance del orgasmo femenino las cuales deben ser estimuladas antes de “pelar pa’ bajo”, como se dice popularmente. No obstante, las jóvenes entrevistadas para los realizadores del documental aseguraron que es más difícil conseguir el orgasmo vaginal que el orgasmo a través del clítoris, porque en el caso del primero el placer se tiene que dejar completamente en las manos de su pareja; la cual en ocasiones desconoce el camino a seguir. La sexualidad es un reto, es un juego dedicado para los chicos y chicas exploradores. Y aunque del orgasmo femenino se hable poco, “Female Orgasm Explained” enfatizó que primero la mujer tiene que conocer sus puntos sensitivos para luego instruir a su pareja. Es así como ambos aprenden mientras disfrutan de la explosión carnal que surge en el proceso.