Con el salón multiusos del Centro de Estudiantes del Recinto de Río Piedras de la Universidad de Puerto Rico (UPR RP) lleno a capacidad, ayer se celebró el debate “Futuro UPR: ¿Cómo la defenderemos? paralización vs no paralización”, organizado por el colectivo universitario Pulso Estudiantil.
Los deponentes fueron los miembros de la Coalición Universitaria por el Progreso (CUP) Alejandro Caminero, Natalia Rolón y Brian Díaz —quienes no creen en la paralización como herramienta—, y Mikael Rosa, Francisco Santiago y Aurora Muriente de la Juventud Hostosiana (JH), quienes están a favor de la paralización.
El debate surgió tras la decisión que tomaron los alumnos en la pasada asamblea de estudiantes del recinto riopedrense de realizar un paro que comenzó hoy, y concluye el 5 de abril, el mismo día que se celebrará la Asamblea Nacional. En la asamblea también se determinó que a partir del 6 de abril comenzaría una huelga indefinida.
Aunque ambas organizaciones no creen en la misma herramienta para defender la universidad, estos coincidieron en que con un recorte de $450 millones, como pretende imponer la Junta de Control Fiscal (JCF), se le “iría la vida a la universidad”.
Ante esta realidad, entre los planes que presentó la CUP para defender la institución está atraer más fondos y darle a la UPR las herramientas basadas en ley para que pueda ser sustentable y tener una autonomía universitaria.
“Nosotros vamos a trabajar con propuestas. Nosotros no creemos en la paralización por el sencillo hecho que esta es la primera vez que se puede decir que la universidad no es culpable, sino la Junta de Control Fiscal y ellos necesitan dinero y nosotros ideas”, dijo Alejandro Caminero, representante de la CUP.
En cambio, Mikael E. Rosa de la JH mencionó que las medidas que se toman en la universidad tienen otras repercusiones, porque muchos de los derechos que hoy hay en Puerto Rico y en el mundo son gracias a las manifestaciones y la paralización.
Truenan contra claustro
Ante esta paralización de la universidad que comenzó hoy, el claustro del campus universitario se reunió ayer y decidió llevar a cabo un congreso multisectorial entre el 28 y 30 de marzo con portones abiertos. Lo que demuestra, según la JH, que los profesores no apoyan a los estudiantes.
“Los profesores que hoy tienen plaza en esta universidad hoy se aliaron en contra de los estudiantes y en contra de los profesores que no tenemos plaza. Se aliaron y lo que pretenden hacer es buscar la confrontación a través del intento de entrar al recinto en este proceso de paralización”, expresó Aurora Muriente, estudiante, profesora y miembro de la JH.
Muriente cuestionó por qué se esperó a estar a 24 horas de la paralización para decir que quieren sentarse hablar con los demás sectores.
La JH dejó claro que recurrieron a la estrategia de paralización porque agotaron los intentos de diálogo, pues nunca el gobernador de Puerto Rico, Ricardo Rosselló, ni la administración “se los permitió”.
Aun así, los miembros del CUP se aferraron a que la paralización no es la alternativa y que esta medida sería hacerle el trabajo sucio a la JCF y desataría un efecto dominó en la economía de los municipios que tienen un recinto.
La CUP urgió a hacer propuestas “inteligentes”, pues —para ellos— es de “ridículos” cerrar la universidad y no lograr nada. Los representantes en oposición a la paralización indicaron que los sectores a favor del cierre de la universidad han tenido la misma oportunidad de presentar propuestas, pero que estos “han optado por lo más fácil: la paralización”.
A esto, la JH contestó que ellos han tocado puertas, pero no han tenido suerte. De ahí que hayan tomado la decisión que hoy se refleja en el recinto riopedrense, que amaneció con los portones cerrados.
Por su parte, Natalia Rolón, de la CUP, expresó que las asambleas no son el espacio correcto para debatir ideas por el problema físico, ya que no todo el mundo puede estar en el mismo lugar y la manera de contar los votos “parece que estamos en el siglo 18”. Por esta razón, la estudiante hizo un llamado a ajustar ese proceso democrático para que participen más estudiantes.
Finalmente, el debate terminó con un llamado por parte de ambas organizaciones. En el caso de la CUP a que se unieran no solo a una paralización, sino a buscar el diálogo y hacer propuestas. Mientras que la JH hizo un llamado a la comunidad universitaria a apoyar la paralización con lo que cada estudiante sabe hacer y que pongan en práctica lo que se decidió en asamblea.