Los aceites, grasas y otros lubricantes son esenciales en la industria para reducir la fricción y el desgaste en la maquinaria. Actualmente, los lubricantes están hechos de sustancias que no son biodegradables, tales como derivados del petróleo, polímeros y metal en polvo. Anualmente, miles de toneladas de aceites y grasas caen al suelo, a los cuerpos de agua dulce y al mar. Los científicos han tratado de modificar los lubricantes para hacerlos menos tóxicos al ambiente. Por ejemplo, algunas grasas usan ingredientes vegetales en vez de aceites minerales. No es hasta recientemente que un nuevo tipo de grasa lubricante tiene el potencial de no ser un contaminante del ambiente. Investigadores de la Universidad de Huelva en España han desarrollado esta nueva grasa a base de aceite de ricino y derivados de la celulosa. Segun el científico Jose María Franco, “el objetivo del proyecto fue crear un producto que sirviera como lubricante sólido hecho de materiales 100% naturales y biodegradables.” La grasa que crearon no se deteriora con las altas temperaturas y su producción resulta más barata que la grasa normal. Aunque hay detalles que todavía están bajo investigación, el desarrollo de este nuevo lubricante refleja el interés de la industria en utilizar materiales biodegradables que reduzcan su impacto al medioambiente. Para acceder al texto original pueden visitar: http://cienciapr.org/news_view.php?id=1148
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