El jefe del gabinete japonés, Yukio Edano, reconoció que es imposible predecir cuándo finalizará la emergencia nuclear desatada por el accidente en la planta de Fukushima, en el noreste del archipiélago.
Edano dijo que ‘en la situación actual, lo que hacemos es evitar que ésta empeore, por lo cual trabajamos a marchas forzadas para restablecer los sistemas vitales de la central nuclear”, que sufrió severos daños por el tsunami que golpeó la costa este de Japón tras el terremoto.
A dos semanas del sismo de 9.0 grados en la escala de Richter que sacudió a este país asiático, los trabajos para recuperar el sistema de refrigeración en el reactor 3 continúan ante reportes de aumentos inusuales de los niveles de radiación en las inmediaciones de la planta.
El número de muertos y desaparecidos por el terremoto y tsunami del pasado día 11 se elevó a 27 mil 490, informó la Policía. Un total de 10 mil 418 decesos y 17 mil 72 desaparecidos.
El primer ministro japonés, Naoto Kan, nombró este sábado al ex ministro de Transportes Sumio Mabuchi su asesor especial para la gestión de la crisis en la planta nuclear de Fukushima.
En rueda de prensa, el también vocero del gobierno informó del nombramiento de Mabuchi, que buscará reforzar la gestión de las operaciones para controlar la central de Fukushima.
Al comentar la situación en la central nuclear, Edano recordó que ha habido algunos avances, como la restitución parcial de la iluminación en algunas salas de control y el vertido de agua dulce, en lugar de salada, sobre los reactores.
Edano reiteró además que los niveles de radiación detectados en algunas verduras cultivadas en zonas cercanas a la central nuclear “no suponen una amenaza inmediata para la salud”.
Sin embargo, el nivel de radiactividad sigue disparándose en la zona marina cercana a Fukushima, lo que sugiere que hay un escape de material contaminado por el drenaje que se conecta a los reactores de la central.
Fuente de www.ecoportal.net