A muchas personas les gusta invertir su tiempo y dinero en un pasatiempo, que puede convertirse en un estilo de vida. Un ejemplo de esto es el cosplay. En las convenciones uno puede notar la inmensa diversidad de personas que ejercen el cosplay, sin embargo, ¿quiénes participan de esto? ¿Por qué lo practican? ¿Cuáles son las implicaciones psicológicas detrás del fenómeno?
Según las doctoras en psicología clínica Robin S. Rosenberg y Andrea M. Letamendi, poco se conoce sobre las motivaciones psicológicas detrás del cosplay. Rosenberg y Letamendi llevaron a cabo el estudio Expressions of Fandom: Findings from a Psychological Survey of Cosplay and Costume Wear en el 2012 para conocer más sobre qué es lo que impulsa a los practicantes del cosplay a hacerlo, quiénes componen esta práctica, y cuánto tiempo y dinero le dedican.
El estudio surgió luego de que las autoras presenciaron una serie de incidentes que retrataban al cosplay de manera negativa. “Sentimos que no había evidencia suficiente para contrastar el decir que vestirse de un personaje era un síntoma de una enfermedad mental. Pensamos que podíamos proveer evidencia científica y data que demostrara que los cosplayers no están exhibiendo enfermedades mentales ni comportamiento problemático”, explicó Letamendi en una entrevista con The Daily Dot.
Mediante una encuesta electrónica, las psicólogas encontraron que el 65% de los participantes se identificaron como mujeres. Este resultado está respaldado por un artículo en la revista digital The Mary Sue, en el que la autora enfatiza que el cosplay es dominado por las mujeres porque combina lo geek con el mundo de la moda, que es estereotipado como femenino.
Rosenberg y Letamendi encontraron además que la edad promedio de cosplayers es de 28 años y que 37% de los participantes de la encuesta practican el cosplay entre una a cinco veces al año. Asimismo, concluyeron en su estudio que el 51% de las personas ejercen el cosplay por diversión, mientras que el 38% es por amor al personaje y el 36% lo ven como un medio de expresar creatividad.
Un fenómeno inclusivo y diverso
En cuanto a diversidad, las psicólogas hallaron que el 68% se identificó como caucásico, o blanco, 12% como asiáticos, mientras que 5% fueron latino o hispánico, y el resto se identificó bajo “otro”.
Sin embargo, el estudio se limita exclusivamente para los Estados Unidos. La doctora Nanet M. López-Córdova, catedrática asociada del programa de psicología clínica de la Universidad Carlos Albizu, le explicó a Diálogo que el cosplay es un movimiento mundial que incluye gente de todas las razas, de todos los espacios socioeconómicos, y de diferentes orientaciones sexuales.
López-Córdova, quien se especializa en diversidad cultural y psicología de la salud, relató que ha visitado varias convenciones estilo Comic-Con, donde observó que además de diversidad social, el cosplay cuenta con una variedad de personalidades.
“Cuando yo vivía en Ohio, fui a una de estas convenciones y lo que noté es que hay un poco de todo, gente que era introvertida, y gente que era extrovertida. El denominador común entre todos ellos es la creatividad, no el comportamiento”, resaltó la psicóloga.
La doctora argumentó que muchas personas hacen el cosplay no tan solo porque le gusta el medio de donde proviene el personaje, sino porque se identifican con el personaje. “Ellos escogen ese personaje ya que puede tener una característica particular que le evoca algo en la personalidad propia de ellos. Por ejemplo, uno puede traerle felicidad, otro puede darle valentía”, puntualizó la profesora.
Agregó que existe un estereotipo que rodea a las personas de la cultura geek, ya que muchos piensan que son más callados y más introvertidos, pero cuando se rodean de la comunidad, y se visten, hacen amistades, y se encuentran envueltos con personas que comparten los mismos intereses que ellos.
López-Córdova celebró el cosplay como una práctica saludable “siempre y cuando la persona no se haga daño a sí mismo, a su integridad propia, y a otras personas. Esto es algo que participan hasta familias completas y que representa la diversidades que existen en Puerto Rico. Hay personas que practican deportes, hay otras que practican la música, y pues, estas personas practican el cosplay; es todo lo mismo”.
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