MEXICO DF (Reuters) – La epidemia de influenza H1N1 le dio una tregua a México, país que apenas esta semana empezará a volver a la normalidad tras varios días de suspensión de la vida pública y parte de su economía, mientras la OMS no subirá por el momento sus niveles de alerta y poco a poco el miedo a una pandemia mundial comienza a ceder. Aunque el Gobierno mexicano ha asegurado que ya pasó lo peor y que los casos de infectados se han estabilizado, aún no se declara vencedor en la lucha contra el virus -mezcla de cepas porcinas, aviarias y humanas- y aseguró que no se pueden descartar nuevos brotes. El presidente Felipe Calderón anunció la noche de ayer que su país diseñará un plan para impulsar su economía, cuyos males -consecuencia de la crisis financiera global- se agravaron con el brote de influenza. “Ya he dado instrucciones a los miembros del gabinete económico para que diseñen una serie de medidas encaminadas a mitigar el impacto sobre la actividad económica”, dijo Calderón, explicando que el plan incluirá estímulos fiscales. México, con 26 muertes confirmadas hasta el momento y otras 701 personas infectadas, es epicentro de la epidemia; pero en el mundo se han expandido los casos H1N1 a países tan lejanos como Nueva Zelanda. “Las pruebas (…) muestran tendencia a la baja, disminución de casos y se ha podido corroborar que se debe a las acciones que se han tomado”, dijo el secretario de Salud, José Angel Córdova, en conferencia de prensa. México cerró la semana pasada por varios días escuelas, restaurantes, cines, bares, discotecas, empresas, museos y hasta iglesias para intentar frenar el contagio, y exhortó a la población a no salir de sus casas si no es necesario. Medidas que priorizaron la salud e integridad de la población, pero que afectaron la realidad económica de ese país. Ahora, con los contagios estabilizados, las autoridades mexicanas ven las cosas con más optimismo y anunciaron que el país volverá poco a poco a la normalidad abriendo establecimientos y comercios desde el 6 de mayo. Córdova dijo más tarde que el 7 de mayo las universidades y preparatorias retomarán las clases en todo el país, pero que los alumnos de educación básica no volverán a las aulas hasta el próximo lunes. “El retorno a la normalidad debe ser progresivo y acompañarse de medidas de orientación a maestros, los escolares, empresarios”, sostuvo Córdova. Estas medidas incluyen que se mantenga una distancia de dos metros entre los espectadores de cines y en lugares de trabajo, no dialogar dentro del transporte público y que restaurantes sólo haya hasta 4 personas por cada 10 metros cuadrados. Incluso los funcionarios del Gobierno decidieron que por el momento, no llevarán corbata, porque la prenda es un posible depósito de microbios. La gigantesca Ciudad de México y sus alrededores, una caótica zona urbana donde viven unos 23 millones de personas, fue el epicentro mundial de la epidemia.
En el mundo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) informó que la cifra de casos confirmados de influenza H1N1 ya superó los 1,000 en 20 países. Pero de acuerdo con su directora general, Margaret Chan, no se planea subir el alerta pandémica al nivel máximo si todo sigue como hasta ahora. Un aumento al nivel 6 implicaría que la enfermedad se está transmitiendo rápidamente de persona a persona en más de un área, lo que podría golpear duramente a los países más pobres.
Para declarar ese nivel, la OMS debe constatar que el virus se está expandiendo entre comunidades en Europa y Asia. “Si la situación continúa como está, la OMS no tiene planes de elevar el nivel de alerta a fase 6 en este momento”, dijo Chan en una sesión informal de la Asamblea General de Naciones Unidas. Gran Bretaña confirmó el lunes nueve casos nuevos del virus en el país, llevando a un total de 27 los infectados. El Salvador reportó el domingo dos casos confirmados y Colombia corroboró la infección en una persona, después de que Costa Rica anunciara el sábado el primer caso de la cepa H1N1 en Latinoamérica fuera de territorio mexicano. Casi todas las infecciones fuera de México han sido leves. Estados Unidos es la segunda nación más afectada por el virus, que confirmó un aumento a 286 casos en 36 estados, y ha sido el único país además de México en reportar alguna víctima mortal por la enfermedad. El director adjunto de los Centros para Control y Prevención de Enfermedades en Estados Unidos, Richard Besser, se mostró optimista de que la nueva influenza podría no ser más peligrosa que una clásica gripe estacional, y Washington estimó que estaría lista una vacuna para el otoño boreal. El jefe de epidemiología mexicano, Miguel Ángel Lezana, coincidió con su colega estadounidense. “La virulencia es muy similar a la de la influenza estacional”, dijo el médico en una entrevista con Reuters. En Europa, España se convirtió en el país con mayor cantidad de infecciones de la nueva influenza, al informar que los casos llegaron a 54. Y Portugal confirmó el lunes un primer caso de la nueva cepa, dijo la ministra de Salud, Ana Jorge.
El temor al virus ha llevado a algunos países a no tomar ningún tipo de riesgo. En China, decenas de mexicanos fueron puestos en observación por el temor a la enfermedad, lo que desató una protesta diplomática de México, que asegura que ese tipo de medidas son discriminatorias y no tienen justificación. “Manifiesto, a nombre del país, nuestro más enérgico rechazo a las medidas vejatorias o discriminatorias emprendidas por varios países en contra de los mexicanos”, dijo Calderón la noche del lunes. China aseguró que no se trató de una situación discriminatoria, sino de una mera cuarentena médica. La cancillería mexicana dijo el lunes por la madrugada en un comunicado que enviará un vuelo en las próximas horas con escalas en varias ciudades chinas para repatriar a los mexicanos que quieran volver a tierra natal. Además, 20 países vedaron las importaciones de carne porcina y de otro tipo en respuesta al virus, que ha infectado a personas y presuntamente a cerdos en una granja canadiense, pese a que la cepa no se transmite en alimentos. Entre ellos figuran Rusia, China, Suiza, Croacia, Indonesia, Tailandia y Ecuador. Argentina, Cuba, Ecuador y Perú prohibieron vuelos desde y hacia territorio mexicano para tratar de contener una expansión del virus, lo que también despertó el enojo de la Cancillería de México. Las medidas para evitar el contagio podrían terminar de golpear a la economía mexicana, según analistas, que ya sufre una desaceleración por la crisis de su principal socio comercial, Estados Unidos. La afluencia de turistas europeos y estadounidenses a República Dominicana subió un 40 por ciento en los últimos días por el desvío de vuelos que tenían previsto originalmente aterrizar en México, según la asociación de hoteles de la isla. De acuerdo con un sondeo entre analistas privados difundido el lunes por el banco central mexicano, los analistas redujeron sus expectativas para la economía de México y ahora pronostican una contracción del 4.0 por ciento en el 2009, frente a la caída del 3.3 por ciento que esperaban el mes anterior. Sin embargo, el peso mexicano cerró con una apreciación de más del 4 por ciento a 13.30 por dólar.