Como adelantamos en la primera parte de esta entrevista, la licenciada Alexandra Lúgaro sabe muy bien cómo se bate el cobre en el Departamento de Educación (DE).
Antes de lanzarse al ruedo político, la candidata independiente a la gobernación trabajó mano a mano en el DE dirigiendo propuestas educativas y manejando millones de dólares en fondos federales a través de la empresa América Aponte & Asociados, propiedad de su madre.
Por eso, cuando Lúgaro reconoce que Puerto Rico no ha podido implementar una política pública educativa a mediano y a largo plazo que permita desarrollar un proyecto educacional inmune al intervencionismo político-partidista y a modelos empresaristas, hay que prestar atención, porque el magisterio nacional lleva años promoviendo esa denuncia.
De acuerdo con la aspirante a La Fortaleza, es momento de plantearle al país una ruta distinta que permita adelantar un proyecto educativo para hacerle justicia a las realidades nacionales. Esto, según Lúgaro, sin la necesidad de continuar el ‘cambia y cambia’ de secretarios, cuyas agendas y políticas públicas “han estado –y todavía están– estrechamente ligadas al bipartidismo de rojos y azules”.
No obstante, para la abogada, el desarrollo económico de Borinquen depende de una reestructuración del DE que haga posible un sistema educativo que no desmoralice al maestro y que logre hacer comunidad escolar teniendo presente que el activo principal del país son sus ciudadanos.
“Yo trabajo la educación en dos áreas: en la económica y en una plataforma separada de educación. ¿Por qué? Porque aquí la gente tiene que entender que no va a haber desarrollo económico si no mejoramos la educación. Por eso, a pesar de que la educación es una plataforma separada, yo la incluyo dentro de la económica, porque va a ser el pilar principal del desarrollo económico de Puerto Rico”, aseguró.
Asimismo, Lúgaro manifestó que en la isla nos hemos atado al modelo educativo de Estados Unidos, cuando –a su entender– hay otros modelos que muy bien pueden servir para encaminar la educación nacional.
“Los Estados Unidos tendrán muchas cosas buenas, pero su modelo educativo no lo es. Es uno de los peores sistemas del mundo. Los mejores cinco sistemas educativos gastan 15 veces menos que los Estados Unidos y están haciendo mucho mejor desempeño. En Puerto Rico muchas personas viven bajo la falsa premisa de que, para recibir fondos federales para educación, tenemos que seguir el modelo federal”, dijo.
Y es que, según Lúgaro, Puerto Rico tuvo la oportunidad de decirle a Estados Unidos qué modelo pedagógico seguiría, mediante el Flexibility Waiver. Sin embargo, la candidata independiente aseguró que –en lugar de seguir mejores modelos pedagógicos, como Canadá, Singapur, Finlandia y Corea del Sur– “nos movimos hacia los Estados Unidos, que son como el número 40 del mundo”.
De igual modo, Lúgaro destacó que urge la elaboración de un plan educativo nacional que involucre expertos en todas las áreas y materias, fijando una meta de país. Además, subrayó que esa iniciativa debe tener una visión a largo plazo, pues de esa forma se garantizaría el cese del intervencionismo político-partidista y se pondría en marcha –de manera más eficiente– un proyecto nacional que involucre representantes de todos los sectores de la sociedad.
“Para eso Puerto Rico tiene que –constantemente– analizar, recopilar datos y hacer unas evaluaciones continuas. Hay que evaluar los recursos humanos, los proyectos gubernamentales y la costoeficiencia de los incentivos. Yo no vengo con una plataforma utópica de que esto se va a arreglar en cuatro años. Yo quiero hablarle al país con la verdad. Hay que decirle a la gente lo que está pasando para que luego entiendan que no podemos arreglarlo todo a la vez”, anotó.
Los maestros y su rol
Si bien Lúgaro propone una mirada distinta al sistema educativo de Puerto Rico y visualiza la educación como un medio fundamental para la transformación del país, no es menos cierto que la licenciada y su trayectoria producen incomodidad en algunos sectores del magisterio.
No obstante, Lúgaro propone un fortalecimiento de la clase magisterial. Y para eso, entiende que es necesario seguir el ejemplo de Finlandia, pues “por años se ha mantenido entre los mejores sistemas educativos del mundo” y visualizan al maestro como una “figura de orgullo y respeto”.
“En Puerto Rico –culturalmente– el maestro ya no tiene ese rol. Eso hay que rescatarlo, si queremos darle fuerza al magisterio. Y esto empieza en la raíz, cómo alguien se hace maestro. En estos sistemas [como el de Finlandia] la carrera más difícil a la que aspirar es a la de maestro. La carrera que más paga es la de maestro. Aquí es todo lo contrario, el índice más bajo para entrar a la universidad es por educación”, señaló.
Además, Lúgaro enfatizó en la necesidad de transformar las facultades de pedagogía en centros académicos de clase mundial y condenó la proliferación de universidades pequeñas que “se han convertido en fábricas de diplomas”, lo que –a su entender– ha desembocado en la llegada de gente sin preparación al mercado laboral. Ante eso, la licenciada propone estándares de calidad al momento de que se realicen adiestramientos de maestros.
“Tenemos muchas universidades que funcionan como un mero negocio, donde la persona que paga recibe el crédito. Y eso, definitivamente, tiene unas repercusiones. Yo quisiera concentrar la educación, lo que es pedagogía, en universidades que realmente se vayan a acatar a unos estándares de calidad en el adiestramiento de estos maestros”, declaró.
La abogada también hizo alusión a la necesidad de subir los requisitos para ser maestro y destacó que es de suma importancia mantenerlos fijos de cara al futuro, como una herramienta para exigir preparación. Lúgaro añadió que los mejores sistemas educativos se dirigen hacia la creación de estándares altos para el reclutamiento de maestros.
Asimismo, la candidata independiente aspira a un sistema educativo en el que, tanto los maestros como el Estado, sean responsables de los resultados. Y, a su juicio, esa responsabilidad se tiene que medir.
“A quienes le fallamos es a nuestros estudiantes, porque no le estamos dando las herramientas para competir en este mundo. Yo voy a las escuelas y el problema es que el sistema le ha fallado también a los maestros. Los maestros son responsables de que los niños aprendan, pero el Estado tiene que ser responsable de darle al maestro las herramientas necesarias para lograr que los estudiantes cumplan con esos objetivos”, reiteró.
Igualmente, Lúgaro aseguró que la isla cuenta con el mejor sistema educativo del mundo plasmado en papel pero destacó que “cuando uno va a las escuelas, nada se está haciendo en la práctica”. La licenciada manifestó que la fiscalización tiene que ser la base para que los planteles escolares mejoren, no solamente en términos de su propósito social, sino también en términos de la costoeficiencia.
Finalmente, Lúgaro reconoció que los métodos de evaluación de los maestros deben ser revisados y transformados, de manera que no sean medidas punitivas las que definan la productividad del magisterio. Del mismo modo, apuntó a que el sistema educativo tiene que poner punto final a la burocracia y dar más poder administrativo a las escuelas.
“Tenemos un sistema muy burocrático. ¿Cómo un sistema tiene tanto y no funciona? El dinero pasa de nivel central, a la región de distrito y lo que llega a la escuela son migajas del sistema. Hay que eliminar eso y que el dinero llegue a las escuelas para que sean las escuelas las que lo administren. Vamos a enseñarle a las escuelas a administrar correctamente el presupuesto”, puntualizó.
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