En las pasadas noches del domingo y lunes, 4 y 5 de diciembre respectivamente, estrenó en la cadena de televisión SyFy, la miniserie Neverland. Proyecto televisivo que vale la pena en sí mismo, en parte, por la oportunidad de ver a Rhys Ifans en un papel protagónico, pues entiendo que es uno de los actores más subestimados de los últimos años.
Es dirigida y escrita por Nick Willing, el británico que anteriormente había dirigido las miniseries Tinman (2007, sobre el personaje de Wizard of Oz) y Alice (2009, sobre Alice in Wonderland) para la misma cadena.
Neverland, basada en la historia de Peter Pan, funge como precuela de lo que ya conocemos. Explora el momento en que Peter, los “lost boys” y Hook descubren Neverland, y cómo cada uno de ellos se convierte en lo que J.M. Barrie concibió en su libro. Es importante mencionar que a pesar de estar basada en dicha historia, la intención de Willing, con Neverland, era crear un imaginario autónomo, y por tanto se toma licencias que no necesariamente siguen al pie de la letra la historia de Barrie.
Una mirada a lo que no sabemos
Esta versión comienza en el Caribe, en los 1700s, con unos piratas que encuentran una orbe que tras ser golpeada, explota. Años más tarde, en Londres, en el año 1906, Peter Pan (interpretado por Charlie Rowe) y los “lost boys” pertenecen a una ganga de ladrones liderada por Jimmy Hook, interpretado maravillosamente por el increíble actor galés, Rhys Ifans.
Jimmy, como cariñosamente le llama Peter, es maestro de esgrima y a la vez ladrón. Usualmente roba con los niños, pero en esta ocasión explícitamente le explica a Peter que hará el trabajo solo. El rebelde Peter, engaña a los demás niños y roban el lugar antes que Jimmy pueda detenerlos. Cuando Jimmy los encuentra se molesta pero ya es tarde, les pide que llenen sus bolsos en lo que el busca un artículo más. Es entonces que encuentran (él y Peter) la orbe que presentaron al principio y que resulta ser el medio por el que se llega a Neverland.
Una vez en Neverland, encuentran a la Capitana Elizabeth Bonny, interpretada a la perfección por la actriz británica Anna Friel. Entre una cosa y otra, Bony seduce a Hook y logra convencerlo de que con los poderes que se esconden en Neverland podrán regresar al mundo real y gobernar el mundo, o por lo menos Londres.
Mientras tanto, Peter y los “lost boys” se encuentran con una tribu indígena que había llegado a Neverland hace años. A diferencia de los piratas, ellos no quieren salir de este mágico lugar, sino que quieren utilizarlo con mesura para así vivir en paz.
De esa manera Jimmy y Peter comienzan a alejarse uno del otro y se empieza a crear la riña que conocemos. Según va avanzando la historia se revela que Jimmy había criado a Peter porque – muy a la Harry Potter con su triángulo amoroso entre Snape/Lily/James – el siempre amó a su madre y le prometió cuidarlo. Aún cuando odiaba a su padre, pues aunque era un hombre petulante, logró conquistar al amor de su vida.
El resto de la miniserie presenta una gama de aventuras explicando los “cómos” de la historia. Presentan cómo Peter logra volar, cómo conoce a Tinkerbell (la actriz británica Keira Knightley es quien presta su voz para el personaje), y cómo Jimmy pierde su mano y se convierte en el inolvidable Capitán Hook.
No es perfecta, a pesar de sus aciertos
El mayor problema que tiene la miniserie yace en los aspectos técnicos; dirección, edición, efectos especiales. A pesar de que Charlie Rowe funciona como un buen Peter Pan, y Rhys Ifans, que nunca falla, es un genial Capitán Hook, a veces se sentían forzados en algunas escenas que pudieron haber sido mejor editadas, o utilizado un mejor encuadre de cámara.
También opino que si SyFy hubiese presentado la miniserie en cuatro partes de 60 minutos cada una, el esfuerzo hubiese funcionado más. Al haberse presentado como dos partes de dos horas, a veces se sentía un poco larga y, quizás, hasta tediosa. Y es que, SyFy siempre trabaja proyectos sumamente ambiciosos que, con su bajo presupuesto, usualmente no llenan, mucho menos superan, el que tienen. La miniserie tiene efectos especiales de segunda, pero no es la primera vez que SyFy cae en esto. Una de sus mejores series, Sanctuary, tiene este problema desde que comenzó, en el año 2007, y aún no logran corregirlo.
Sin embargo, a pesar de los problemas técnicos, el esfuerzo fue interesante y el resultado final bastante bueno. A diferencia de todo lo que se hace sobre Peter Pan, este caso no trata la historia como algo infantil, sino como algo muy humano sin eliminar lo fantasioso. Eso, y las licencias que se tomaron pueden ser molestosas para algunos, pero para mí fue uno de los aciertos más grandes.
Neverland pasará al aire nuevamente, y en su totalidad, el próximo domingo 11 de diciembre a las 11 de la mañana por el canal SyFy. Sea usted fanático de la historia de Peter Pan o no, le recomiendo que la vea, explora temas que apelan a todos por igual porque, como antes mencioné, tratan la historia de una manera muy humana, adulta y real, sin dejar atrás el elemento mágico que tanto disfrutamos.
La autora es guionista y crítico de cine.