
Tras una semana de especulación sobre la causa del siniestro en las instalaciones de la Caribbean Petroleum Corp (CAPECO), las autoridades encargadas de investigar lograron descartar que éste fuera un acto de terrorismo o de sabotaje. En una conferencia de prensa realizada en Fortaleza, el director del Negociado Federal de Investigaciones (FBI), Luis Fraticelli, informó que la gasolina en los tanques había ocasionado una nube de vapor que arropó las instalaciones. Entonces, una fuente de energía, que todavía se desconoce, provocó el primer incendio, el cual llevó a la gran explosión. El portavoz del FBI, Harry Rodríguez, explicó en conversación telefónica con Diálogo Digital que aunque ya saben que el incendio no fue provocado por explosivos, la autoridades siguen evaluando vias investigativas tanto criminales como civiles. El equipo de investigación está dirigido por el FBI y el Negociado Federal de Alcohol, Tabaco, Armas y Explosivos. Como parte de la investigación, que aún no ha terminado, estudiaron el lugar, entrevistaron a 105 personas -incluyendo personal de la refinería- y revisaron videos.