En Asia los pepinos de mar, equinodermos que abundan en nuestras costas, son considerados delicias culinarias. En Puerto Rico se les usa, no para ensalada, sino para entender uno de los misterios más grandes, y de más vigencia biomédica en las ciencias: el proceso de regeneración. El proceso de regeneración permite a ciertos organismos crecer de nuevo órganos dañados o perdidos. Es un misterio por qué ciertos organismos tienen capacidades regenerativas y en otros, como los mamíferos, éstas son muy limitadas. Los pepinos de mar, como otros equinodermos, tienen una capacidad asombrosa de regeneración. Cuando un pepino de mar se siente amenazado, eviscera o “vomita” todo su sistema intestinal, y luego lo desarrolla nuevamente desde cero. ¿Cómo es que este animal puede regenerar el sistema intestinal tras la evisceración? ¿Si se entiende este proceso, se podrá usar esta capacidad regenerativa para curar enfermedades y órganos dañados en humanos? Éstas son algunas de las preguntas de interés en el laboratorio de José Enrique García-Arrarás, de la Universidad de Puerto Rico en Rio Piedras. El laboratorio de García-Arrarás fue pionero en la investigación a nivel molecular del proceso de regeneración en pepinos de mar. En una de sus clases, mientras usaba pepinos de mar recogidos en las playas del Escambrón, se interesó en el proceso de regeneración. Ese interés dio paso a una serie de estudios innovadores en la citología de la regeneración. Los trabajos del Dr. García-Arrarás en este tema de investigación son reconocidos a nivel mundial . El laboratorio del Dr. García-Arrarás fue pionero en incorporar, junto a sus estudiantes, técnicas de biología molecular para entender el proceso de regeneración en pepinos de mar. Hoy en día el laboratorio utiliza técnicas de “microarray” y de bioinformática para identificar los genes requeridos durante la regeneración intestinal. Aunque el enfoque del laboratorio es en el intestino, han realizado estudios para entender la regeneración del sistema nervioso también, un proceso de sumo interés biomédico para el estudio de la parálisis y de otras enfermedades neurodegenerativas. Recientemente el laboratorio recibió un “ARRA award” del NINDS para un estudio de los genes involucrados en la regeneración del sistema nervioso. Los dineros de ARRA son bien competitivos y fueron otorgados a estudios que acelerarán el paso de la investigación científica. Estos dineros ayudarán al laboratorio a lograr su interés a largo plazo: entender cómo estos animales exhiben esta enorme capacidad de regeneración, mientras que nosotros los humanos, como la mayoría de los vertebrados, sólo podemos regenerar algunos tejidos (y estos de forma a veces incompleta). Además de la investigación, el Dr. García-Arrarás ha entrenado un gran número de estudiantes subgraduados en la investigación. En su laboratorio, además de puertorriqueños, han trabajado científicos de Colombia, Chile, y Rusia. Para acceder al texto original puede visitar: http://www.cienciapr.org/