Los casos de contagio del virus de influenza H1N1 aumentarán durante los próximos meses en el hemisferio sur cuando comience su temporada invernal, dijeron expertos, quienes pidieron una vigilancia sostenida aún si el virus parece haber debilitado su expansión. Los virus de la influenza atacan con fuerza en los meses más fríos. El invierno también es la estación en el que aumentan las infecciones de gripe debido a que la gente tiende a congregarse en ambientes escasamente ventilados. “Si, es muy posible que veamos más casos en el hemisferio sur con la llegada del invierno, que está comenzando justo ahora”, dijo Bill Rawlinson, jefe de la unidad de virología del Prince of Wales Hospital en Sidney, Australia. “Parece menos severo pero cada año en Australia tenemos de 1.500 a 3.000 muertes por la influenza. Cuando tienes una cepa nueva, aunque no sea tan fatal como el H5N1, aún es un evento serio y se ve un exceso de muertes (…) debido a que la gente no tiene inmunidad”, dijo el experto por teléfono a Reuters. El nuevo virus, cuyo brote comenzó en México, ha infectado a más de 1.200 personas en 21 países. Hasta la fecha, se han confirmado 27 muertes, 26 en México y una en Estados Unidos. Aunque muchos científicos concuerdan que el nuevo virus no parece más mortal que la gripe estacional humana, la jefa de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Margaret Chan, llamó el lunes a la precaución. Chan indicó que aún son los primeros días y que nadie puede predecir cómo evolucionará la situación o el virus, o si el mundo se encamina a una pandemia.
Raina MacIntyre, profesora de epidemiología de enfermedades infecciosas en la Universidad de Nueva Gales del Sur, dice que el peor escenario posible sería que una epidemia azote países como Australia y Nueva Zelanda. “El peor escenario sería una epidemia que enferme al 40 por ciento de la población, cause 50 por ciento de ausentismo laboral y escolar, y tenga una tasa de mortandad de 2,4 por ciento”, explicó la profesora a Reuters en un correo electrónico. “Con nuestras mejores estrategias disponibles de prevención y mitigación podemos reducir eso a un 10 por ciento de infectados y a cortar a la mitad la tasa de mortalidad”, dijo MacIntyre. “Si, estamos definitivamente ante un riesgo mayor dado que estamos entrando en nuestro invierno, cuando se intensifica la transmisión de influenza (…) Estamos en una fase crítica”, concluyó. Pero por el momento nadie tiene pistas sobre cómo se comportará el virus a partir de ahora. “Hasta el momento, no hemos visto una virulencia particular en este virus, aunque se necesitan más casos confirmados para estar seguros de ésto”, dijo Julian Tang, asesor de la División de Microbiología del National University Hospital en Singapur. “Esto también significa que el virus podría ser candidato para una reconfiguración con otras cepas potencialmente más virulentas de influenza, como la gripe aviaria H5N1”, agregó Tang. Algunos expertos consideran que eso sería lo peor que podría ocurrir. El mundo podría enfrentar un virus monstruoso que no sólo se contagiaría con facilidad entre las personas, sino que también contaría con el poder asesino del H5N1, que tiene una tasa de mortandad de 60 a 70 por ciento.
Tang dijo que en los países tropicales, las comodidades modernas como el aire