Luego de siete días en huelga y receso académico, la Asamblea General de Estudiantes de la Universidad de Puerto Rico (UPR) en Bayamón determinó ponerle fin a la misma y retomar las labores institucionales.
El pleno estudiantil aprobó por mayoría evidente la moción presentada por el estudiante Orlando Peña, de la Facultad de Administración de Empresas, y que incluye la realización de manifestaciones pacíficas.
El Consejo General de Estudiantes (CGE) en sus redes sociales divulgó la moción pero hizo hincapié de que se trataba de una versión preliminar y que próximamente se estaría divulgando el acta oficial.
La Asamblea Extraordinaria comenzó a las 11:56 a.m., en la cancha bajo techo, como una asamblea informativa puesto que el quorum era de 413 estudiantes y lo requerido es 455. No obstante, alrededor de las 12:20 p.m. la asamblea contaba con el quorum necesario para comenzar a proponer mociones. En ese momento, los estudiantes que se mantuvieron en huelga, al margen del CGE, aprovecharon para presentar una moción que conllevaba la destitución de la directiva del CGE.
Ambos grupos se mantenían en controversia por la decisión del CGE de levantar la huelga, luego de que no se cumpliera con la condición aprobada por la pasada asamblea de que hubiera 300 estudiantes presentes en la manifestación. Los manifestantes se mostraron disgustados por lo que calificaron como “el abandono” del CGE. “No se merecen nuestro respeto. Nos dejaron solos y se encargaron de dar información equivocada”, manifestó Juan Oquendo de la Facultad de Administración de Empresas. Sin embargo, la moción no fue aprobada por mayoría evidente.
Diálogo trató de conseguir una reacción del vicepresidente del CGE, Noel Ortiz, ante las imputaciones de haber abandonado a los manifestantes, pero este no quiso emitir comentarios. Sin embargo, informó que no se puede descartar futuras asambleas puesto que todo depende de lo que los estudiantes acuerden.
Durante la asamblea, el profesor de Educación Física y miembro del comité mediador, Carlos Marichal, tomó el micrófono para expresar su punto de vista. “Yo no veo posibilidad de que el conflicto se resuelva con la universidad cerrada. Me da pena que en una universidad de 5,000 estudiantes haya un quorum de 455. Es penoso que unos pocos tengan que trabajar por unos muchos”, manifestó.
Asimismo el presidente del CGE, Kevin Robles, tomó un espacio para leer un informe de lo que pasó durante la semana pasada y sobre los reclamos de mejorar la iluminación de los estacionamientos, la adquisición de materiales para los laboratorios y los servicios médicos, entre otros.
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