“Nuestra meta es formar estudiantes competentes que vayan a los campos de las ciencias, la tecnología y la robótica, pero más que nada que sean líderes, que sean líderes y puedan desarrollar su potencial al máximo”. Así resumió la profesora Nancy Velázquez Arroyo el esfuerzo recién iniciado por la facultad que dirige en la Escuela Secundaria Especializada en Ciencias, Matemáticas y Tecnologías en el municipio de Caguas. Cualquier transeúnte que cruce la plaza de recreo de Caguas y camine por las calles del casco urbano puede toparse de momento con el edificio que alberga la escuela, sin notar que se trata de un plantel para la enseñanza secundaria, pues más bien tiene aspecto de centro universitario vanguardista. Sin embargo, al interior del edificio se siente inmediatamente la algarabía típica de jovencitos que rondan los 13 años. Los 80 estudiantes que iniciaron su séptimo grado en el primer año de la Escuela Secundaria Especializada en Ciencias, Matemáticas y Tecnología podrían considerarse afortunados, no tan sólo por sus talentos académicos, sino por disfrutar de unas facilidades y herramientas de primer orden que ni siquiera los mejores colegios privados en la Isla ofrecen a sus alumnos. A un costo de $3.5 millones, el municipio de Caguas junto al gobierno central y alianzas con la empresa privada construyó las facilidades para atender a estudiantes cagueños y de pueblos limítrofes que forman parte de la Iniciativa Tecnológica Centro-Oriental (INTECO). Según el alcalde de Caguas, William Miranda Marín la intención es “generar opciones creativas que, particularmente, permitan que nuestros jóvenes puedan responder creativamente a los escenarios futuros”. Los estudiantes de esta escuela especializada comienzan su jornada diaria a las 7:30 de la mañana hasta las 4:00 de la tarde. Los períodos de clase tienen una duración de una hora y media en secciones de lunes y miércoles, y martes y jueves. Aunque es una escuela especializada, los estudiantes reciben todos los cursos regulares y se integra la tecnología en cada uno de éstos. Una mirada a un salón de clases basta para notar que estamos ante una grata excepción, pues el maestro tiene infinidad de herramientas tecnológicas para presentar el material, mientras los alumnos interactúan en la clase mediante plataformas multimediáticas. Velázquez explicó que trabajan mano a mano con la Universidad de Puerto Rico y la Universidad del Turabo. Los profesores de la Universidad de Puerto Rico en Cayey y Humacao brindan asistencia a la facultad y a los estudiantes en las áreas de matemáticas y ciencias, mientras que la Universidad del Turabo tiene a la disposición de la escuela su biblioteca. La directora del plantel explicó que la planificación del proyecto inició hace tres años y que contaron con expertas de la academia para el diseño curricular, proceso en el cual atendieron los estándares del Departamento de Educación e integraron otros modelos exitosos en Estados Unidos. Determinaron enfocarse en el nivel secundario por las estadísticas de deserción escolar en esos grados. La intención es ir agregando grados durante los próximos años hasta llegar al cuarto año de escuela superior.