NUEVA YORK (Reuters) – Un juez federal rechazó una moción del Departamento de Justicia de Estados Unidos para negar o retrasar la apelación a la detención de un joven afgano que cumple sentencia en la prisión de la Bahía de Guantánamo, dijo el miércoles la Unión Estadounidese de Libertades Civiles. Mohammed Jawad está acusado de arrojar una granada que hirió a dos soldados estadounidenses y al interprete que los acompañaba en un bazar en Kabul en diciembre del 2002. Jawad, quien tenía entre 16 y 17 años en el momento de su arresto, fue entregado a las fuerzas estadounidenses y posteriormente fue enviado a la prisión de la base militar de Bahía de Guantánamo, Cuba. Su juicio, que estaba previsto que comenzara en enero, ha sido pospuesto de manera indefinida. “La decisión de hoy reivindica el derecho a impugnar una detención indefinida”, expresó Jonathan Hafetz, un abogado de la Unión Estadounidese de Libertades Civiles (ACLU, por su sigla en inglés) y consejero en el caso de habeas corpus de Jawad. Habeas corpus es el principio legal según el cual los prisioneros pueden refutar su detención. “Una rápida audiencia es especialmente necesaria debido a que el bienestar físico y mental del señor Jawad continúa en riesgo por las condiciones de su detención en Guantánamo. Esta orden ratifica el derecho del señor Jawad de presentarse ante la corte”, dijo Hafetz. El Departamento de Justicia declinó comentar la decisión. Una audiencia de estatus en el caso de Jawad está fijada para el 27 de abril. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, se ha comprometido a cerrar la prisión de Guantánamo, que es ampliamente vista como una mancha en el historial de derechos humanos de su país y como un símbolo del abuso a los detenidos durante el gobierno de su predecesor, George W. Bush. Obama ahora debe decidir qué hacer con los detenidos que aún permanecen en Guantánamo.