Pensar en los medios de comunicación y pasar por alto la relación histórica entre ellos y los poderes político-económicos es imposible. Existen vínculos históricos que a través de los años han hecho de los medios de comunicación y los fenómenos político-económicos un mismo ser, en el que la resistencia y la negociación han producido (y producen) choques que, a la larga o a la corta, han generado (y generan) transformaciones importantes.
En la presentación de su más reciente libro “Avísale a mi contrario” La Radio en tiempos revueltos. Albizu y Muñoz: encuentros y desencuentros (1930-1955), el profesor de la Escuela de Comunicación de la UPR, Recinto de Río Piedras, el doctor Héctor Sepúlveda comenzó aclarando que no es un historiador tradicional y que tampoco pretende serlo. “En todo caso sería un historiador de la comunicación o un rescatador de la comunicación de los laberintos de la historia”.
Para el doctor Sepúlveda, el protagonista principal de su libro no es la figura de don Pedro Albizu Campos ni la de Luis Muñoz Marín, es el medio radial. Muñoz y Albizu son protagonistas secundarios.
“Como ensayista siempre he acostumbrado transitar por el materialismo histórico para poder explicar de forma clara y transparente los vericuetos de los acontecimientos y los protagonistas que me seducen”, sostuvo el docente. Para el también autor del texto Suaves Dominaciones: críticas y utopías de los medios en Puerto Rico, sin la radio, tanto la figura de Albizu como la de Muñoz, “no hubieran tenido el papel de constructores de esos imaginarios patrios que tanto discuten las páginas del texto, siendo la resistencia cultural de Albizu el detonante para las negociaciones de Muñoz”.
Para Sepúlveda, esos imaginarios “hoy por hoy constituyen los componentes principales de nuestra personalidad de pueblo, culturalmente definido y patrióticamente dividido”.
“Avísale a mi contrario” La Radio en tiempos revueltos. Albizu y Muñoz: encuentros y desencuentros (1930-1955), presenta “el imaginario del concepto muñocista Patria-Pueblo, en aparente contradicción al concepto albizuísta de Patria-Nación”, pero que según el autor, “convergen en la palabra patria y desde la patria ambos desarrollan sus utopías con la radio como punto de encuentro principal”.
De manera que estas dos figuras, tradicionalmente antagónicas, pero igualmente significativas para el Puerto Rico de mediados de siglo XX, son presentadas desde un ángulo donde los puntos de convergencia resultaron ser fundamentales dentro del proceso de nuestra formación nacional, socio-política, y cultural, a través de la radio.