Sin mayor éxito que la insatisfacción de las partes en discusión, culminó la reunión entre los directivos de la Hermandad de Empleados No Docentes (HEEND) de la Universidad de Puerto Rico (UPR) y la Junta de Síndicos del Sistema UPR. Estos no lograron llegar a un acuerdo en los reclamos del gremio sindical sobre honras a cláusulas del convenio colectivo negociado entre la administración universitaria y la HEEND. El tranque en las negociaciones surge a raíz de la negativa de la administración de la UPR de hacer efectivo un aumento de $140.00 mensuales a los empleados del sistema y dar paso a un plan de reclasificación que impactaría a 300 empleados. La HEEND, quien a través de su presidente, Wilberto Jiménez, ha expresado que no claudicarán en su empeño para que las autoridades del sistema universitario cumplan con lo negociado. El empuje del sindicato por que se cumplan los reclamos estipulados en el convenio colectivo han cobrado mayor fuerza esta última semana a raíz de unas expresiones adjudicadas tanto a la directora de la Oficina de Gerencia y Presupuesto (OGP) María Sánchez Brás y el Secretario de la Gobernación Juan Carlos Blanco, aduciendo que el Sistema UPR tenía fondos suficientes para cumplimentar con sus responsabilidades generales. Sin embargo, la presidenta de la Junta de Síndicos, Ygrí Rivera de Martínez a través de un comunicado de prensa desmintió las expresiones de Jiménez luego de que el Secretario de la Gobernación le enviara una misiva a Rivera corrigiendo las expresiones atribuidas a éste y que fueron publicadas en un diario local. Rivera destacó en el comunicado que la UPR opera con un déficit de $111 millones que ha sido matizado con $105 millones provenientes de los fondos del programa federal ARRA, dinero destinado para asuntos académicos y no para aumentos salariales. Luego del fracaso de las negociaciones entre ambos flancos, la HEEND se reunirá con otras entidades universitarias agrupadas en la Coalición en Defensa de la Educación Superior para discutir los pasos a seguir en los próximos días. El gremio sindical ya había aprobado un voto de huelga meses atrás y que podría oficialmente ser puesto en vigor si no prosperan las conversaciones. De concretizarse una huelga en el sistema universitario, los trabajos académicos y administrativos se detendrán hasta nuevo aviso con posibles consecuencias para la comunidad universitaria, principalmente para el estudiantado. La UPR ventila una situación álgida y volátil en momentos en que no sólo la HEEND, sino también el Sindicato Puertorriqueño de Trabajadores, entidad que agrupa a los empleados de ornato y mantenimiento de diez de los once recintos del Sistema UPR, reclama la validación de su convenio. Mientras, está más cerca la fecha en que será efectiva la renuncia tanto del presidente de la UPR, el Lcdo. Antonio García Padilla y de la rectora del Recinto de Río Piedras, Gladys Escalona de Motta, situación que empaña más el panorama universitario. A dos semanas de efectivas las renuncias, la Junta de Síndicos no se ha expresado sobre si ya, al menos, existe un candidato para el interinato de la presidencia.
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