
El horror es uno de los géneros cinematográficos más exitosos de Hollywood. Desde que son pequeñas, a las personas del público les encanta ser asustadas por una imagen inesperada que salta en medio de la pantalla, rompiendo con la intranquila calma del suspenso. Ahora bien, la saga Paranormal Activity estrena su tercera entrega, siendo ésta, a mi parecer, la más espeluznante de las tres.
Las dos entregas anteriores de Paranormal Activity (PA) han tenido una acogida dividida entre el público. La audiencia o bien ha quedado fascinada y atemorizada o por el contrario, sumamente aburrida y defraudada por las dos primeras películas. Mucho me temo que la tercera parte sufrirá de lo mismo, ya que no se diferencia mucho de sus precuelas.
En esta ocasión, la película nos narra la niñez de Katie y Kristi (las dos protagonistas de las dos anteriores). Esta historia promete contarnos, por fin, la causa de toda la “actividad paranormal” que ocurre en torno a estos dos personajes y lo hace, en parte. Durante los 85 minutos de film, vemos prácticamente eventos bastante similares a los ya vistos en los 86 minutos de la primera y los 90 minutos de la segunda. Si usted, como yo, disfrutó de esos 176 minutos previos a PA3, saldrá bastante satisfecho de la sala de cine. Si por el contrario, las dos anteriores no le convencieron, no espere que esta lo logre.
Por otra parte, tengo que admitir que, aunque ciertamente se nos revelan nuevos hechos sobre el origen demoníaco de esta presencia sobrenatural que gira en torno a Katie y Kristi, no termina de responder satisfactoriamente todas nuestras dudas, dejando espacio aún para la especulación o incluso una cuarta entrega de la saga. Esto puede resultar un poco frustrante para algunos espectadores, pero personalmente, creo que responder todas las interrogantes de los filmes anteriores, hubiese acabado con su esencia.
El uso de la cámara en primera persona (formato de PA1) y de las cámaras de vigilancia (PA2) vuelven en esta tercera entrega. La innovación en esta ocasión es el uso de una cámara de vigilancia móvil que se convierte en la más asustadiza de las cámaras en la película, por un excelente uso de la incertidumbre. De igual modo, en PA3, se ven nuevos efectos especiales que ayudan a incrementar el miedo que produce el film.
De resto, como ya dije, no hay demasiada diferencia con las PA anteriores. A pesar de que ninguna de las tres fue escrita ni dirigida por las mismas personas, se ha logrado mantener un sentido de unidad y coherencia entre las tres.
No hay mucho más que decir sobre Paranormal Activity 3. Si usted quedó complacido con las dos anteriores, seguramente esta no le defraudará. Mi recomendación personal, vea las dos primeras seguidas antes de ir al cine, para disfrutar de la experiencia completa y si usted se asusta fácilmente, no duerma sólo esa noche.