A pesar de que la Universidad de Puerto Rico (UPR) en Humacao fue afectada de forma significativa por el huracán María, que azotó a la isla el pasado 20 de septiembre, el personal de la institución no ha estado indiferente a las necesidades de los estudiantes.
Los daños no fueron solo a la infraestructura: también se afectó seriamente la comunidad universitaria, donde se reflejan necesidades básicas de alimentación, vivienda y artículos de primera necesidad.
Más del 70% de los estudiantes que son atendidos por la UPR en Humacao pertenecen al área oriental. La mayoría están bajo nivel de pobreza federal, lo que profundiza la vulnerabilidad del alumnado.
Plazoleta Café
La solidaridad ha sido el enfoque principal una vez se reanudaron las clases. Esa misma solidaridad dio pie a dos grandes iniciativas.
Una de ellas es el comedor universitario, llamado Plazoleta Café. Esta gestión, que comenzó con el reinicio de clases el lunes 30 de octubre, impacta diariamente sobre 1,500 personas de la comunidad universitaria ofreciendo un plato de comida caliente.
Este esfuerzo ha sido posible gracias a las contribuciones de la Oficina de Recursos Humanos de UPR en Humacao; la Primera Iglesia Bautista en Humacao en el barrio Mariana; el Centro de Operaciones de Emergencia (COE) de Humacao y el Asilo Simonet donde se encuentran integrantes de World Central Kitchen.
Además, diariamente diversas personas buscan más de 200 alimentos de ligera preparación que son transportados y entregados a la comunidad universitaria en la plazoleta del campus humacaeño.
También, empleados de recursos humanos confeccionan almuerzos con la intención de lograr que aquellos y aquellas que son el componente principal del nido de los búhos y búhas de Humacao –los estudiantes– no pasen un día sin alimento.
Las organizaciones estudiantiles también dicen presente
Por otra parte, más de 50 organizaciones estudiantiles han tomado la iniciativa de retomar las actividades de acopio de distintos artículos que comenzaron cuando las islas caribeñas vecinas fueron afectadas por el paso del huracán Irma.
Entre estas organizaciones se encuentran la American Medical Student Association, la Asociación Estudiantil de Biología General, la Asociación Universitaria de Estudiantes de Gerencia, Nada es lo que Parece y la Asociación Universitaria de Estudiantes de Contabilidad.
Este esfuerzo es posible gracias a estudiantes que donan de sus horas libres para estar a la disposición de quienes más los necesitan. También, se están movilizando para obtener más recursos de personas, entidades públicas (no pudiendo participar las municipales debido a que, se alega, los estudiantes no son solo de Humacao) o privadas que estén dispuestas a lograr que los estudiantes puedan continuar con su agenda académica sin preocuparse de no tener alimentos durante su día
A pesar del arduo trabajo que realizan las organizaciones estudiantiles y los demás voluntarios, más de la mitad de la comunidad universitaria aún queda sin beneficiarse. Esto es debido a la necesidad de alimentos tales como arroz, habichuelas, carnes y otros ingredientes como aceite, condimentos, sofrito, etcétera.
La amplia demanda de botellas de agua por las altas temperaturas en que los estudiantes toman sus clases –en algunos casos bajo carpas a las afueras de los edificios del campus– es otra preocupación, ya que no se pueden ofrecer más de 200 botellas diariamente.
Por otro lado, se necesitan donaciones para dar continuación a este proyecto universitario. Para este fin se acude a la generosidad de la comunidad interna y externa de la UPR en Humacao. Las donaciones se están recibiendo frente al edificio de Servicios al Estudiante en el campus para continuar con esta gesta construida sobre la solidaridad.
Para contactarnos favor de comunicarse con Jilarie Santos Santiago vía jilarie.santos@upr.edu o al 787-224-7348, o con quien suscribe, Génesis M. Sánchez López, vía genesis.sanchez1@upr.edu o al 787-477-0477.