Colectivo académico analiza la realidad política, social y cultural de Puerto Rico
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Diálogo
Diálogo es la publicación oficial de la Universidad de Puerto Rico (UPR). Desde su fundación en 1986, ha servido de taller para los profesionales en formación que actualmente se desempeñan en otros medios dentro y fuera del País. Su plataforma virtual, contiene las versiones impresas desde el 2010 hasta mayo de 2014, mes en que el medio migró exclusivamente al formato digital.
“Puerto Rico debe estar dispuesto a mirar nuevas opciones para el tratamiento de la drogadicción”, así justifica la doctora Carmen Maldonado Vlaar la eficacia del estudio que realizó junto a otros investigadores, con el que se espera evitar que recaiga el drogodependiente que se encuentre en el proceso de rehabilitación. El estudio, que consiste en suministrar la hormona vasopresina -producidas por el cuerpo humano para controlar la ansiedad- fue puesto en práctica sólo en la adicción a cocaína. Sin embargo, según la doctora, esta alternativa puede ser utilizada para otros tipos de adicciones y condiciones. “Por ejemplo, en Canadá el suministro de esta hormona se utiliza para controlar las ansiedades de personas autistas. Nosotros en Puerto Rico la estamos proponiendo para controlar las ansiedades que suelen ocasionar las memorias de cuando era adicto a la cocaína”, explicó Maldonado Vlaar. Según el estudio, las personas sufren recaídas cuando vuelven a visitar espacios donde solían drogarse. Es por ello que con esta hormona se puede mantener un control a esas ansiedades que ocasiona visitar estos lugares. No es medicación de la droga La doctora Maldonado Vlaar espera que su estudio no sea confundido con una exhortación a la medicación de la droga en Puerto Rico pese a que esta opción se ha puesto en práctica en otros países del mundo. “Esto es una alternativa natural, puesta en uso desde una perspectiva médica, que sería mejor estrategia que las que se han estado trabajando hasta ahora”, sostuvo la también catedrática del Departamento de Biología de la Facultad de Ciencias Naturales de la Universidad de Puerto Rico en Río Piedras. Según la doctora, en Puerto Rico se trabaja con adictos desde una perspectiva más punitiva, que apela a la cura enlazada con actos de fe y religión. Esto no es negativo pero si se trabaja de la mano con otras alternativas fuese más eficiente”. En torno a la legalización de las drogas en Puerto Rico, como han hecho otros países de América y Europa, la doctora explicó que la Isla no está preparada para llevar a cabo un plan de esa magnitud. “Antes de pensar en legalizar las drogas, el gobierno de este País debe poner en marcha un plan de orientación, educación y sanación a otros aspectos. Aquí se le da mucha importancia al problema del narcotráfico y se omiten las posibles aportaciones que pueden tener estas sustancias en la medicina”, opinó Maldonado Vlaar quien se manifiesta en total apoyo a la legalización de algunas drogas particulares. Para la especialista su trabajo es un gran paso aunque reconoce que “será un poco arduo ponerlo en práctica en la Isla ya que para que cualquier tipo de medicamento salga al mercado tiene que pasar por varios procesos de estudio que en ocasiones duran alrededor de diez años”.
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