
Washington, D.C. – Más de 90 mil muertes se podrían presentar este otoño e invierno por la gripe A H1N1, con 120 millones de infectados y casi dos millones de personas podrían ingresar a los hospitales, según un informe procedente del Consejo de Asesores sobre Ciencia y Tecnología del presidente de los Estados Unidos, Barack Obama conocido esta semana. Y aun la vacuna no está lista. Cuando llega septiembre es cuando termina el verano, y aunque no es oficial, las escuelas inician clases, las altas temperaturas disminuyen, y con ello llega la temporada de la gripe. Lo diferente de este año es la presencia del virus H1N1, que, según el Consejo, dejará a por lo menos a la mitad de la población enferma. Se estima que 300 mil personas requerirán de cuidados intensivos, lo que podría ser difícil para pueblos o ciudades en el país, donde no hay suficientes camas para los enfermos. Gita Agawal, doctora de Mary’s Center for Maternal and Child Care en Washington, asegura que el plan que se han impuesto es proporcionar la vacuna a los niños, embarazadas y adultos con enfermedades crónicas, si es que hay un número reducido de éstas. Dijo que existe un medicamento que aunque no es vacuna, hace que los síntomas sean menores, y disminuye las complicaciones. Normalmente se presentan en el país cada año entre 30 mil a 40 mil muertes; pero la falta de vacunas puede ayudar a que los números aumenten mucho más. Aumentará más entre jóvenes y niños, más que a la tercera edad. Se cree que el momento más crítico será a mediados de octubre, cuando se espera que la vacuna comience a distribuirse. “Estamos trabajando fuerte en encontrar la vacuna. Creemos que estará lista para mediados de octubre, y de hecho se están tomando muestras y los resultados parecen buenos, pero no la administraremos hasta que esté demostrado que es efectiva y segura”, dijo la Secretaria de Salud y Servicios Sociales, Kathleen Sebeliu. Sin embargo, ya se han producido retrasos. Se esperaba que para el 15 de octubre se tendría hasta 120 millones dosis, pero solo habrá 45 millones, las cuales se administrarán primero a los niños, mujeres embarazadas y personal médico. También aumentarán los servicios de vigilancia para detectar variables. “Es muy difícil predecir qué pasará con un virus; éste cambia, y pueden ser diferente en una temporada que en otras, algunas veces son más severos que otros. En algunos casos se hace la vacuna teniendo en cuenta el virus del año anterior y puede suceder que el virus haya cambiado”, dijo Agawal. “No es seguro en un 100 por ciento que tengamos el mismo virus… es muy difícil predecirlo”, dijo. El Consejo recomendó el uso de antivirales intravenosos en caso de ser necesario, y se designó a alguien en la Casa Blanca para coordinar la respuesta al virus a nivel nacional. Se espera que el gobierno gaste por lo menos 2,000 millones de dólares en comprar unas 159 millones de vacunas a cinco compañías que estarían produciendo el producto. El reporte recomendó que por lo menos una porción de las vacunas que estén disponibles para mediados de septiembre se proporcione para aquellos que tienen alto riesgo, sin esperar los estudios para determinar que las dosis estén completas. El artículo original fue publicado en: www.conciencianews.com