JOHANNESBURGO (Reuters) – Miles de partidarios del Congreso Nacional Africano (CNA) celebraron con su líder, Jacob Zuma, la significativa ventaja del partido gobernante en los recuentos parciales de votos de las elecciones presidenciales en Sudáfrica. Zuma, quien bailaba y cantaba su conocido himno contra el apartheid “entrégame la metralleta”, enfatizó que el CNA “aún no está celebrando (una) victoria”, a pesar de que con cerca de un 60 por ciento de los votos contados, iba camino a un éxito rotundo. “Este partido es un elefante. Tú realmente no puedes derrocar a un elefante”, dijo Zuma el jueves a un mar de partidarios que vitoreaban vestidos con los colores del partido: amarillo, verde y negro, en la sede central del CNA en Johannesburgo. El CNA tenía el 67,06 por ciento de los votos, de acuerdo a resultados preliminares, acercándose la mayoría de dos tercios que le permitiría cambiar las leyes y afianzar su poder, un escenario que ha intranquilizado a los mercados, aún cuando el partido ha enfatizado que no abusará de su derecho. “No necesitas dos tercios para gobernar un país. Necesitas voluntad política para hacerlo”, dijo la portavoz del CNA Jessie Duarte. Zuma, un polígamo que aprendió a leer por sí mismo, se describe como un campeón de los pobres. Para muchos votantes el historial del CNA en la lucha contra el gobierno de minoría blanca aún es más fuerte que las frustraciones por su fracaso en afrontar el crimen, la pobreza y el sida. El ANC había enfrentado una oposición revigorizada que esperaba al menos recortar su mayoría bajo los dos tercios en la elección del miércoles, comparado con el casi 70 por ciento que obtuvo en la elección del 2004. Pero el partido Congreso del Pueblo (COPE, por su sigla en inglés), formado por disidentes del CNA con el objetivo de representar el primer desafío real al CNA desde el fin del apartheid en 1994, sólo alcanzaba el 7,66 por ciento en los conteos preliminares. El rival más cercano de CNA era la Alianza Democrática (AD), liderada por una mujer blanca, que hasta el momento llevaba el 15,82 por ciento de los votos. La AD superaba al CNA en la provincia del Cabo Occidental, destino turístico del primer ministro de Sudáfrica que actualmente es controlado por el CNA. “Debemos realinear la política en Sudáfrica y eso es lo que voy a hacer en los próximos cinco años”, dijo la líder del AD, Helen Zille.