En la mañana de hoy, como parte de la ceremonia del 115 aniversario de nuestra bandera, el Ateneo Puertorriqueño honró al movimiento estudiantil de la Universidad de Puerto Rico por su esfuerzo para garantizar la calidad de la enseñanza a nivel superior y la autonomía universitaria en el País. En la actividad se izó la bandera al son del himno nacional revolucionario. La historia de este símbolo nacional merece ser recordada y celebrada.
Para finales del siglo 19, los puertorriqueños que luchaban por independizarse del imperio español utilizaron la bandera de Lares como símbolo para identificarse. En 1895, decidieron adoptar una nueva bandera para sustituir la que actualmente representa a Lares. Se decidió entonces imitar el símbolo de la insurrección cubana invirtiendo los colores.
La bandera se presentó por primera vez en una reunión constituyente de la Sección Puerto Rico del Partido Revolucionario Cubano en Nueva York el 22 de diciembre de 1895. En dicha reunión, se eligió la Junta Revolucionaria, de la cual fueron miembros Ramón Emeterio Betances, Eugenio María de Hostos, Manuel Besosa y Roberto H. Todd, entre otros.
Los revolucionarios le otorgaron significado a los símbolos de la nueva bandera. Las tres franjas rojas representan, para ellos, la sangre derramada por los patriotas de la revolución: las dos franjas blancas, la victoria y la paz venidera; el triángulo, el mar y la estrella, que representa la Isla.
Después de intentos infructuosos de las cámaras legislativas para oficializar la bandera en los años 1916, 1922, 1927 y 1932, el Estado Libre Asociado (ELA) la oficializó el 24 de julio de 1952. Según el ELA, las franjas rojas representan los tres poderes del gobierno ejecutivo, legislativo y judicial; las franjas blancas, la libertad del individuo y los derechos del hombre; la estrella, el Estado Libre Asociado y el triángulo, los ideales republicanos: igualdad, libertad y fraternidad.
La bandera de Puerto Rico es un símbolo patrio que ha ayudado en la formación de la identidad nacional y ha servido como instrumento de unidad colectiva a través de la historia.