Hay iniciativas que ponen su granito de arena para que tengamos un mejor país. Por eso, cuando estos proyectos son reconocidos, la satisfacción por lo que se obtiene es mayor. Este es el caso del Colectivo Teatral Boal (CTB), fundado por la estudiante de periodismo Alejandra Rosa, quien recientemente obtuvo a beca National Puerto Rican Day Parade (NPRDP) Scholarship con la que podrá darle una sede al grupo.
El CTB es un proyecto que busca ayudar a los jóvenes de escuelas públicas y privadas por medio de las artes escénicas. Si bien desde su fundación en 2016 había encontrado en las esquinas de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras (UPRRP) lugares donde ensayar y preparar los talleres, parte de la beca que obtuvo Rosa permitirá alquilar un espacio para dar rienda a la creatividad del colectivo.
Rosa decidió solicitar la beca teniendo en mente invertir el dinero en un espacio para el proyecto, pues, aunque el teatro que hace el colectivo “cree en estar en la calle”, lo ciertos es que —por cuestión de logística— contar con espacio propio propiciará “que el proyecto funcione”.
“Uno se siente más tranquilo”, resumió.
Esa tranquilidad permitirá a los participantes de CTB —cuyo nombre rinde homenaje al dramaturgo brasileño Augusto Boal del teatro del oprimido—, poder fortalecer sus propuestas de un teatro pedagógico que hace posible la transformación social.
Este proyecto, que hace poco más de un mes se convirtió en una organización sin fines de lucro, trabaja específicamente para ser un apoyo para los trabajadores sociales de escuelas elementales, intermedia y superior.
“Nosotros hacemos acercamientos a trabajadores sociales escolares de poblaciones que entendemos que tiene altas tasas de violencia o son comunidades vulnerables. Comenzamos un proceso de diálogo con la trabajadora social para ver cuál de sus grupos de estudiantes en la escuela tiene alguna necesidad en la que necesite apoyo adicional”, explicó la joven, que también recibió el pasado año una beca de la fundación Harry S. Truman y quien en 2015 formara parte del internado Córdova y Fernós en Washington D.C..
De hecho, fue durante su pasantía en la capital federal que nació CTB, como una propuesta para desarrollar proyectos que tuvieran impacto social en Puerto Rico.
Al llegar a la Isla, Rosa se dio cuenta de que podía hacer realidad la iniciativa y, aunque le tomó un tiempo poder darle forma, debido a otros compromisos, tan pronto se coló el tiempo, se lanzó a la aventura.
Entre sus logros, el colectivo ha ayudado a que los estudiantes puedan analizar y llegar a sus propias conclusiones respecto a cuál es su rol en la sociedad, qué tipo de hábitat desean y qué tienen que hacer para lograrlo.
No obstante, Rosa, quien también es egresada del programa de estudiantes-periodistas de Diálogo, aclaró que esto no son simplemente talleres, sino que son estudiantes universitarios de distintas disciplinas que son adiestrados en técnicas de teatro social. Además, es un proyecto que le provee herramientas a los alumnos que eventualmente van a trabajar con alguna población estudiantil o juvenil.
“Yo me siento súper contenta y súper orgullosa de los muchachos y de los estudiantes que forman parte del grupo. Para mí ellos son un saquito de energía”, expresó la novel emprendedora cultural.
Como planes futuros, el CTB continuará el próximo semestre dando seguimiento a dos escuelas en las que han estado muy presente. También abrirán una convocatoria en septiembre para que el grupo siga creciendo.
Actualmente, el colectivo tiene 11 integrantes, todos estudiantes de la UPRRP que llegan de diversas facultades, lo que impregna un sentido interdisciplinario en el grupo.
La beca National Puerto Rican Day Parade (NPRDP) Scholarship es otorgada a estudiantes de escuela superior como universitarios que tengan 3.0 o más de promedio, que sean puertorriqueños y que sean voluntarios o brinden algún servicio a la comunidad.