Silicon Valley será el rey del camino en 2030. Las alcantarillas inteligentes incrementarán las métricas de la salud pública. La agricultura será como el béisbol. Estas son sólo algunas de las declaraciones y predicciones realizadas recientemente en la Cumbre de Innovación de The Economist, donde los CEOs de las 500 empresas más importantes de la revista Fortune, así como responsables políticos y emprendedores, se reunieron para explorar las oportunidades y los retos en la administración de la disrupción digital.
¿Cuál es el principal cuestionamiento? ¿Cómo impulsar la innovación en la era digital actual? La realidad es que, así como mencionó Vijay Vaitheeswaran, editor de negocios en China de The Economist, “innovación” es una de las palabras más sobre utilizadas. ¿Qué significa esto? En términos simples, innovación en el siglo 21 es tener la habilidad de identificar y entregar valor a los stakeholders, al tiempo de estar cercanos al punto de demanda.
La posibilidad de tener visibilidad es clave, ya que hoy existen capacidades tecnológicas para sensibilizar datos desde cualquier dispositivo, analizar para proporcionar información accionable y actuar en tiempo real. Tenemos la habilidad de identificar la brecha entre lo que pensamos que está ocurriendo y lo que realmente ocurre, y entonces poder tomar las acciones necesarias. Como J.B. Pritzer mencionó, “si no actúas como una empresa de tecnología, o te estás muriendo o ya estás muerto.”
¿Tendremos siempre la respuesta correcta? Probablemente no. Pero hay mucho que podemos aprender de nuestros errores colectivos – más de lo que podemos aprender de nuestros aciertos. ¿Cuál es su activo más importante? Las personas. La mayoría de los ejecutivos concuerdan que la fuerza laboral, y no la tecnología, es crucial al momento de administrar efectivamente la disrupción digital en el trabajo. Este fue uno de los 5 mitos más comunes que se abordaron durante la Cumbre de The Economist. Entre ellos se encuentran:
- Mito #1: La tecnología es el factor clave en administrar la transformación digital. La tecnología es integral en facilitar el proceso, pero el éxito o el fracaso depende de la fuerza laboral. Al mismo tiempo, la tecnología es instrumental en transformar a los empleados en la era digital. Al incrementar la fuerza laboral con inteligencia de datos, las empresas pueden liberar capital humano y redirigir recursos hacia puestos de valor agregado, al tiempo que reducen errores, incrementan la productividad y aumentan la satisfacción laboral, sin mencionar que la tecnología, por sí misma, puede ser usada para retener a los empleados a partir de nuevas y atractivas maneras. Cuando todo es claro, las personas hacen que las cosas ocurran, aceptan el cambio y adoptan nuevas maneras de trabajar y colaborar.
- Mito #2: Las expectativas de los clientes difieren con base en el producto o servicio. Al utilizar Uber, las expectativas del usuario se definen como viajero, pero también como comprador, como paciente, o como ciudadano. Por lo tanto, las altas expectativas definidas por los mejores proveedores estipulan las normas que aplican a todas las industrias. Para satisfacer estas expectativas, las marcas invertirán el doble para crear experiencias inmersivas para sus clientes. De hecho, un estudio reciente de Zebra Technologies reveló que cerca del 80% de los comercios minoristas podrán customizar la visita a la tienda hacia el 2021, al tiempo que la mayoría de ellos sabrán cuando un cliente específico visite su tienda. Esto será una norma no solo para comercios minoristas, sino para proveedores de servicios financieros, salud y otros.
- Mito #3: El progreso creativo resulta de un análisis a fondo de industrias específicas. Esto es parcialmente cierto. Los ejecutivos han encontrado elementos en común e inspiración a través de distintos sectores de industria. Antes de reinventar la rueda, los ejecutivos deberían revisar las mejores prácticas y benchmarks, sin importar el sector. “La agricultura es como el béisbol: cuenta con muchos datos. La clave entonces está en cómo transformar esos datos en conocimiento,” señaló Hug Grant, CEO de Monsanto. Y ese es solo uno de los retos comunes a través de diferentes sectores.
- Mito #4: Los negocios deben enfocarse en revisiones. Casi uno por ciento en la cadena de suministro podría generar grandes ahorros y generar oportunidades. Por ejemplo, hoy en día, 30% de la carga en contenedores se realiza por transportación aérea. Es correcto: aérea. Al eliminar ineficiencias en la densidad de carga y lograr sincronizar la cadena de suministro digital se podría transformar esta realidad. Utilizar datos recolectados en los andenes de carga junto con los dispositivos móviles y analíticas de carga, los almacenes y los gerentes de andenes pueden recibir información en tiempo real sobre cada uno de los contenedores para asegurar que la carga alcance todo su potencial.
- Mito #5: Está usted solo. De ninguna manera. No está solo como una compañía que enfrenta una transformación digital, ni como una compañía consultora en la transformación, ni como un ejecutivo realizando decisiones de inversión. Y no hay razón para sentirse así. Los métodos, procesos y compromisos estratégicos que adoptan innovación abierta y colaboración B2B resultan en la nueva ventaja competitiva. Así como uno de los panelistas de la cumbre de The Economist mencionó, “el siglo XXI es un mal momento para ser un ejecutivo controlador”. No se trata de controlar la información y los secretos, sino de compartir datos y apuntalar la inteligencia combinada de los clientes y socios de negocio.
El predominio del Internet de las Cosas y la adopción de la mentalidad “todo-como-servicio” incrementó las posibilidades del uso de datos. Hoy, tenemos capacidades para entender el bienestar de una ciudad al rastrear los residuos biológicos y químicos de sus residentes. Al mismo tiempo, la disrupción digital reta al status quo. Sillicon Valley se está convirtiendo en el centro de la industria automotriz. ¿Pudimos haberlo siquiera imaginado hace 10 años? Los ganadores en esta era digital serán aquellos que puedan identificar como trasladar su valor cerca del punto de demanda y consumo, definir estrategias en ese contexto para responder a las expectativas de los empleados y consumidores, y tomar acciones a partir de datos.