A pesar de la crítica situación que atraviesa el País —recrudecida tras el paso del huracán María el pasado 20 de septiembre— la Universidad de Puerto Rico (UPR) confía en que lograrán cumplir con sus metas en las solicitudes de admisión al sistema.
Actualmente, la UPR ha recibido 4,971 solicitudes de admisión para el semestre que arranca en agosto de 2018, según la directora de Admisiones, Ivonne Calderón. El año pasado la institución universitaria tuvo un cupo de 13,121 estudiantes.
Pese a una aparente merma en las solicitudes de admisión, Calderón y la vicepresidenta asociada, Aileen Torres, coincidieron en que las estadísticas del año pasado no se pueden comparar con las actuales debido al impacto del huracán sobre los procesos relacionados a la solicitudes de admisión.
Por ejemplo, la administración del examen del College Board se postergó y el Departamento de Educación pidió a las universidades que no se tomara en cuenta las notas del primer semestre del grado 12 al cálculo del Índice de Ingreso (IGS).
Sin embargo, los estragos provocados por el huracán María no han sido el único escollo con el que ha tenido que lidiar la UPR al momento de reclutar estudiantes. En marzo del año pasado, la mayoría de las unidades del centro docente fueron paralizadas por huelgas estudiantiles.
De acuerdo con Torres —a pesar de las interrupciones en las labores académicas debido a la huelga— es común que las solicitudes y las admisiones al sistema UPR se vean reducidas. Empero, la funcionaria aseguró que, tras estos sucesos, a la institución siempre le toma un año “recuperarse”.
Aunque ambas funcionarias reconocieron que las circunstancias tras el huracán María han complicado el proceso de admisión, la institución apuesta al reclutamiento presencial en las escuelas superiores públicas y privadas de la Isla.
Otra medida que estudian para lograr el mayor cupo estudiantil es la evaluación de los IGS. Aunque Torres indicó que se trata de un proceso que se realiza todos los años, muchos estudiantes podrían beneficiarse de una reducción en el IGS de algunos programas. No obstante, otros programas podrían resultar perjudicados de no cumplir con los cupos estudiantiles.
Situación fiscal de la UPR
Además de sus propias limitaciones económicas, a la UPR también le ha salpicado la crisis fiscal del gobierno central. La Junta de Control Fiscal (JCF) solicitó una reducción de $450 millones para el año fiscal 2021-2022 a la aportación que realiza el gobierno central a la institución pública.
Ante esto, las funcionarias no pudieron precisar si de existir una merma sustancial en las admisiones a la UPR para este año, cuánto se afectarían los recaudos de la institución.
Tanto Torres como Calderón apuntaron a que el Plan Fiscal de la UPR todavía se está evaluando y en su momento se conocerá el impacto de las admisiones en el fisco universitario.
La UPR debe entregar su Plan Fiscal a la JCF el próximo 9 de marzo. El Plan Fiscal aprobado por la Junta de Gobierno el pasado 31 de julio, contemplaba un aumento sustancial en la matrícula estudiantil.
Continuarán reclutando
Aun cuando ambas funcionarias entienden que cumplirán con la meta de admisiones en el sistema universitario, las campañas de reclutamiento y orientación de estudiantes de escuela superior no se detendrán.
Torres y Calderón coincidieron que con las visitas a las escuelas alrededor de la Isla han podido orientar a los estudiantes y comenzar el proceso de solicitud a mano.
Con los problemas en las telecomunicaciones que enfrentó el País tras María, la UPR extendió el periodo para solicitar en línea para el 9 de febrero. Sin embargo, las solicitudes presenciales y a mano continuarán indefinidamente.
Cada recinto y unidad, por su parte, seguirá llevando a cabo esfuerzos de reclutamiento por su cuenta con las habituales casas abiertas. La UPR también tendrá actividades en las Fiestas de la Calle San Sebastián y en marzo visitarán los centros comerciales de Plaza Las Américas, Plaza del Caribe en Ponce y el Mayagüez Mall.