El decano de la Facultad de Educación del Recinto de Río Piedras de la Universidad de Puerto Rico (UPR), Roamé Torres González, confirmó a este medio que dejará el puesto este viernes, luego de que el rector interino Luis A. Ferrao le solicitara la renuncia la semana pasada.
La salida del decano ocurre en momentos en que se discute la propuesta reforma educativa que viabilizaría el traspaso de escuelas del sistema público a operadores externos, en lo que el gobierno ha denominado “Escuelas Alianza”. Torres González se opone a este modelo de escuelas chárter, a pesar de que la pasada semana el presidente interino de la UPR, Darrel Hillman, y varios rectores interinos, incluyendo a Ferrao, defendieron la reforma ante la Asamblea Legislativa, y manifestaron su disposición a que las respectivas unidades del sistema universitario adopten algunos de los planteles.
En pasados días, la senadora popular Rossana López denunció que, con las discrepancias en torno a la reforma educativa como telón de fondo, “me ha llegado información de que le han solicitado la renuncia, para principios de marzo, al decano de educación Roamé Torres y a la decana asociada Loida Martínez” y aseverando que “si la opción es atropellar a los que no estén de acuerdo con la administración, la democracia y la autonomía [universitaria] entonces son letras muertas”.
“La semana pasada [Ferrao] me dijo que aceptaba la carta de renuncia que puse sobre la mesa cuando a él lo nombraron rector (en julio del año pasado), pero no me especificó motivos particulares. Dice que quiere armar su propio equipo de trabajo. Le pregunté si tenía que ver con el tema de las charters, y me dijo que no”, expresó Torrés González a Diálogo.
A través de un portavoz, el rector interino se limitó a decir que “el decano puso su renuncia y fue aceptada”.
Este miércoles, Torres González depondrá sobre la reforma educativa ante el Senado y al día siguiente hará lo propio en la Cámara de Representantes.
“Mi posición es muy similar a la que manifesté cuando se presentó el proyecto [del senador popular Eduardo] Bhatia en 2015. Estoy en total desacuerdo con el concepto de las escuelas charters y aún más con lo de los vales educativos. Las escuelas charters constituyen una gran amenaza para las escuelas en Puerto Rico y desmantelaría el sistema de educación pública en un proceso que, aunque [sus proponentes] digan lo contrario, es de privatización. Son escuelas que no aseguran nada en cuanto al aprovechamiento académico pero con gran potencial de aumentar la desigualdad educativa”, dijo el decano.
El programa de vales educativos, que según el plan del gobierno de Ricardo Rosselló Nevares entraría en vigor a partir del año escolar 2019-2020, en principio permitiría que los padres matricularan a sus hijos en escuelas privadas de su elección. En la década de 1990, luego de que el gobierno de Pedro Rosselló instituyera una iniciativa similar, el Tribunal Supremo declaró inconstitucional esta práctica.
Con los vales educativos “se le estarían dando fondos públicos a escuelas privadas que no necesariamente están de acuerdo con los fines públicos que establece la Constitución. Básicamente se desvían fondos públicos para financiar entes privados”, censuró Torres González, quien asimismo descartó que las escuelas laboratorio de la UPR, como lo es, por ejemplo, la UHS en Río Piedras, representen modelos de escuelas chárter.
“Las escuelas laboratorio siempre han sido parte de la UPR, no son producto de un acuerdo entre la universidad y el Estado. Los maestros en las escuelas laboratorio son profesores universitarios pertenecientes a la Facultad de Educación y se les paga como profesores universitarios, que es más del doble de lo que se le paga a un maestro” en el sistema escolar, agregó el decano.
Torres González aclaró que, partiendo del éxito de planteles como la UHS, favorecería que las distintas unidades de la UPR administren planteles escolares “pero hay que dejar claro que las escuelas laboratorio no son ejemplos del modelo chárter”.
En días recientes, la Asociación Puertorriqueña de Profesores Universitarios (APPU) lamentó que el presidente interino de la UPR favoreciera el modelo de escuelas chárter sin considerar a los expertos en educación con los que cuenta la institución. La asociación criticó igualmente, en una carta enviada la semana pasada a Hillman, que su postura no mostrara evidencia de cómo este modelo escolar ha funcionado en otras jurisdicciones –y los resultados contradictorios que han dejado–.