La República Dominicana ya es altamente reconocida por sus películas de comedia. Grandes títulos como Sanky Panky, Perico Ripiao, Papá se volvió loco, Cristiano de la Secreta y Loto Man entre otros, han hecho reír con sus ocurrencias y ese genuino y autóctono humor propio de esta isla caribeña. Ahora estrena el film I Love Bachata, ópera prima del director Roberto Ángel Salcedo (quien también actúa, interpretando al insoportable protagonista de la película). Lamentablemente este film no logra siquiera acercarse a sus antecesores ni en humor, ni en calidad en ningún elemento.
I Love Bachata narra una historia poco original y repleta de clichés sobre unos músicos humildes que sueñan con ser estrellas. Por fin se les dará la oportunidad pero esto les acarreará incontables problemas con sus parejas sentimentales y entre ellos mismos, debido a los egos y los engaños del medio del espectáculo.
Es decepcionante decir que la película resulta aburrida, insufrible y ridícula por muchas razones. La historia es sumamente predecible, hasta el punto en el que uno sabe completamente lo que va a suceder. La edición del film es nefasta, al igual que la construcción de escenas y la dirección. Muchos de los errores que se ven en pantalla son propios de principiantes, lo que hace que I Love Bachata parezca un proyecto universitario y no un largometraje profesional.
Además, hay conflictos en el film que son presentados y/o resueltos mediante montajes musicales, simplificando absurdamente la trama. El humor y los chistes son casi infantiles, aunque de vez en cuando logran sacar alguna sonrisa, sobre todo en las escenas en las que está presente el ya conocido actor Fausto Mata, quien también aparece en Sanky Panky y Perico Ripiao.
Por si todo esto fuese poco, al final, la película intenta tornarse seria para dar la moraleja de la historia, pero luego de más de una hora de ridiculeces y giros casi infantiles de la historia, es imposible que la audiencia se tome en serio el tono dramático que obtiene el climax final del film.
Lo peor es que, si de alguna manera I Love Bachata era una apología o un homenaje a este ritmo tan icónico de la República Dominicana, la verdad es que el film está muy lejos de serlo. No solamente es terriblemente representado el mundo de los “bachateros”, sino que es poco el amor que se siente hacia el género musical.
En fin, Salcedo demuestra que no estaba preparado para saltar de la actuación a la dirección y tristemente el amor a la bachata, no fue suficiente para lograr un buen film.